Regla No.5//Emiliaco

°Coqueteo indeseable°

Mi alarma empieza a sonar, la apago y empiezo a vestirme para la escuela mientras estoy en eso recuerdo que hoy no tengo que ir ya que estoy suspendido.

-Maldita sea- Susurro para mi mismo. Me vuelvo a poner la pijama y aviento la ropa que me había puesto antes.

No pude volver a dormirme así que escucho cuando mi padre se va a trabajar y mi hermana al escuela, pienso si debería bajar a comer algo es demasiado temprano pero realmente no tengo otra cosa que hacer. Tomo la sabia decisión de bajar, la casa esta totalmente a oscuras y eso me pone algo nervioso desde niño le tengo algo de... no me gusta llamarlo miedo, más bien es que me genera ansiedad la oscuridad. Corro hacia todos los interruptores que veo y prendo todas las luces que puedo en el menor tiempo posible, me recargo en la pared para después suspirar aliviado.

Camino hacia el refrigerador rezando porque haya algo, lo abro y como esperaba no hay nada más que medio limón seco en la puerta, unas rebanadas de jamón que deben llevar ahí más de dos semanas y un bote de leche a la mitad, a mi padre le gusta comprar lo justo, cuando viene del trabajo trae solo para hacer la comida y algo para la cena ya que ninguno de los tres suele desayunar en casa, lo que si hay son bastantes dulces pero no pienso desayunar eso. Mientras doy vueltas por la cocina pensando en si debería resignarme a morir de hambre o pedir algo a domicilio mis ojos se topan con una caja de cereal encima del refrigerador, voy hacia ella y la tomo esperando que al menos quede para un plato, para mi suerte queda justo para uno, celebro para mi mismo haciendo unos pasos de baile ridículos y procedo a servirme mi delicioso desayuno.

Estoy viendo una película mientras termino mi cereal, en eso mi celular vibra a mi lado lo tomo sin apartar la vista de la tele y miro de reojo la notificación "Joaquin" se puede leer en la pantalla. Vaya no pensé que me hablaría después de lo de ayer, pauso la película y pongo mi dedo en la notificación, deslizo hacia abajo para ver el mensaje completo sin necesidad de abrirlo.

"De verdad lo siento, ¿podemos hablar?"

La verdad el enojo de ayer se me ha pasado por completo y realmente quiero hablar con el.

-Puedes venir después de la escuela si quieres pero tendrás que entrar por la ventana de mi cuarto.

Recibo una respuesta al instante.

-¿Por qué por la ventana?

-Pues porque mi hermana va a estar en casa y yo estoy castigado por ende no puedo traer a nadie a casa menso, vas a entrar de infraganti.

-Bien te veo ahí a las 3:30

Ahora tengo que encontrar una escalera, se la pediré a Daniela mi vecina y ex novia pero ahora no, seguramente esta en la escuela y sus padres trabajando.

Paso la mañana viendo películas y en redes sociales, intente mandarle un mensaje a Brisa pero al parecer le quitaron su celular ya que no recibo respuesta alguna, desde que entramos a la prepa hemos dejado de lado muchas cosas que ella y yo hacíamos siempre como vernos después de clases todos los días o desvelarnos los Lunes viendo películas, creo que solo es parte de crecer tenemos más responsabilidades y por ende menos tiempo, pero bueno solo necesitamos acostumbrarnos a este nuevo ambiente y todo volverá a ser lo mismo... espero, dejo el teléfono de lado y sigo con mi desayuno y mi película.

Es momento de ir a pedir la bendita escalera, voy hacia su casa que esta solo a una cuadra de la mía, llego y toco la puerta esperando que ya haya llegado de la escuela o que al menos este alguno de sus padres.

-Hola Emilio ¿Y este milagro?- Me dice Dani con una sonrisa amable y me invita a pasar con la mano, yo me niego.

-Hola Dani solo vengo a pedirte un favor- Ella me mira y sus ojos brillas esperanzados.