Ave María Purísima

Se graduó el niño

Los años pasaron y ahora Katsuki era el nuevo párroco de la iglesia de su pueblo.

Contra viento y marea, lo logro.

Y justo en ese momento se encontraba dando la predica.

— TODOS USTEDES SON UNOS PECADORES HIPÓCRITAS DE QUINTA, NI SIQUIERA PODRÍAN DAR SU VIDA POR QUIEN YA ANTES DIÓ LA VIDA PARA QUE USTEDES VIVAN TRANQUILAMENTE EN PECADO — En ese momento saco una pistola de quién sabe dónde y lanzó 4 disparos al aire, la gente espantada por este acto salió huyendo como almas que lleva el diablo, excepto algunos que aún con temor se atrevieron a quedarse, entre estos se encontraba la madre de aquel sacerdote loco. El cenizo apoyado en el ambón sonrió con arrogancia — ¿Ahora ven lo que les digo?  Podemos continuar con la misa ya que todos los hipócritas se fueron — la misa transcurrió con "normalidad".

El personal de la iglesia, los que ayudaban en misa y los demás ministerios de la iglesia, ya conocían a Katsuki desde hace años por lo que su miedo hacia él era menos, pero aún así no se atrevían a enfrentarlo, excepto una persona, y ese era el nuevo director del coro, Shoto.

La rivalidad entre Shoto y Katsuki era uno de los rumores más conocidos en aquella iglesia. Unos decían que se odiaban porque Endeavor no lo había dejado entrar al coro años atrás, otros decía que eran compañeros de clase y que de ahí venía todo y otros se atrevían a decir que eran mejores amigos pero que se separaron por el amor de una chica que al final Shoto se quedó y el cenizo por el dolor decidió convertirse en sacerdote. Nadie le atinaba a lo que realmente paso.

Pero eso ya no importaba... Al menos no por el momento.

— ¿Porque tengo que ir a bendecir a esos imbéciles? De todos modos algún día se irán al infierno

— Estoy muy viejo como para seguir explicando esto — dijo el mayor que caminaba junto a el.

Kirishima era como el vino, entre más viejo más bueno, parecía que los años no le pasaban factura, pero si se sentía un poco agotado mentalmente aveces. Además ahora solo era el sacerdote asistente, por lo que tenía menos trabajo.

— Como sea

Ya estando en la entrada de la iglesia se paró para que todos esos pecadores hicieran fila y el pudiera "bendicirlos" como si eso les evitaría cinco minutos menos en el infierno.

— Disculpe, quería saber si mi hijo puede servir en la iglesia — pregunto una tímida señora regordeta de cabellos verdes, después de haberla persinado.

— Depende de como sea el mocoso — gruño.

— No soy un mocoso — salió a defenderse un chico pecoso que seguramente le llegaba al pecho de alto.

— ¿Porque quieres servir en mi iglesia?

— Porque mi tío All Might es el actual papa

— ¿QUE? — esta vez fue Kirishima.

— hm, pruébalo

El chico saco rápidamente su móvil y busco en su galería.

— Aquí tienes — le dió el teléfono al rubio quien practicamente se lo arrancó de las manos.

En efecto, en la foto se podía ver al par de peliverdes con el papa frente al Vaticano.

— Tsk, bueno a mi que me impor...

— KYAAAAAAAA, aceptamos, comienzas el próximo domingo. — se le adelantó el pelirrojo estrechando su mano con la del muchacho — Siempre quise ir a Roma — fantaseo aún sangoloteando la mano del peliverde.

Después de tan incómodo apretón de manos, el par de peliverdes agradecieron y se fueron.

— Genial, más idiotas que aguantar — murmuró para si mismo, mientras veía a Kirishima saltar de un lado a otro.

— Oye, ¿Crees que me dejen subir al papa móvil?

— YA CALLATE