Mi eterno enemigo

Epílogo

---------------------------------------

Perdón por el retraso, pero estaba terminando de hacer trabajos para la escuela, pero en fin, aquí esta el epilogo, disfrutenlo.

-----------------------------------------

○
○
○

Advertencia ⚠

Habrá contenido +18, (algo así), así que prepárense . 

○
○
○

1 años después 

Alfred

Ya había pasado un año desde ese suceso en Alemania, cuando sali del hospital mi jefe cambio drásticamente. Desde ese momento Rusia y yo podíamos salir como una pareja normal, después de todo mi jefe me había dado permiso, con la condición de que fuéramos discretos.

Sabia que Rusia, mi hermano y Bielorrusia habían secuestrado a nuestros jefes, aun que la verdad no sabia a detalle muchas cosas.

¿Qué les habrán hecho?

Rusia no quiso contarme, siempre cambiaba el tema o ignoraba lo que decía, pero hoy era el día, haré que Rusia me diga lo que hicieron esa vez.

Ahora estaba haciendo la cena de navidad con mi honey, aun que solo seriamos nosotros dos en esta navidad, nuestra primera navidad.

—Rusia—  había entrado a la cocina, se acerco a mi y  recargo su cabeza en mi hombro,  tan lindo.

—¿Qué haces?—

—Haciendo la cena, es nuestra primera navidad juntos y quiero que sea perfecto—

.
.
.
.
.
.

Habiamos terminado de cenar y nos dirigimos a la sala, habia esta el magestuoso y maravilloso árbol de navidad, que personalmente había decorado, bueno, con un poco de ayuda,  a pesar de que todavía no era navidad, estaba tan ansioso de darle su regalo.

Cada uno dio su regalo, aun que el no me dejo abrir el mio, al parecer alguien le había comentado que los regalos se abrían el 25, maldigo a quien le dijo, en fin, ninguno de los dos abrió su regalos , así solo nos pusimos a ver película.

—Rusia— dije seriamente a mi acompañante.

—¿Qué pasa mi girasol? —

—Dime que...—  no pude terminar de formular la oración cuando el me negó inmediatamente.

— no—

—¿Porqué?— Él solo sonrió y se acercó a mi, tomo mi mejilla y la empezó a acariciar.

Dio un gran suspiro, aun sosteniendo mi mejilla— por que no—

Hice un puchero, era el único que no sabia y eso que yo tambien tenía que ver con el problema y eso aumentaba mi curiosidad.

—Rusia, sabes que eso aumenta mi curiosidad, además, siempre me dices que no fue nada grave, entonces ¡¿Por qué me lo ocultas?!—

Me tomo de  manos y me miro seriamente—Quieres saber, te lo diré de una maldita vez—