5º LAVABOS

1.3K 175 4
                                    

—Pienso que quizás esté en la enfermería —dijo Draco cuando terminó de escuchar a Harry.

—Draco, si estuviera en la enfermería lo podríamos ver —comentó frustrado Harry.

—Exacto, te hemos traído para que nos hables de algún lugar en especial para Severus. No para que comentes lo obvio —dijo Hermione, llevándose la mano a la frente.

—Creo que no deberíais tratarle así —dijo Ron apenado—. Solo trata de ayudar.

Draco esbozó una sonrisa, mirando al pelirrojo sentado a su lado. Movió su mano sutilmente y acarició la mano de Ron. Se aclaró la garganta unos segundos y comenzó a explicar.

—No me he explicado bien. No solo esta esa parte en la enfermería —todos posaron sus ojos y atención en el rubio, excepto Ron, que estaba totalmente sonrojado, dejándose acariciar por la mano del rubio— . Ahí una zona que pocos conocen y que por si no lo sabíais está escondida —Harry abrió los ojos—. Es una zona en la que se tratan a los profesores y a los heridos de gravedad. Una vez me llevaron allí, cuando... —hubo una mirada hacia Harry y el contrario se incomodó.

La vez que Harry casi mata a Draco en aquellos lavabos. Las heridas del hechizo lo dejaron muy grave y por suerte para el grupo, en aquella ocasión lo llevaron a esa parte de la enfermería.

—Y bueno, estuve allí —dijo el rubio—. Así que solo tenemos que colarnos y ya estaría —terminó con simpleza Draco.

—Mmm... —Hermione parecía comenzar a maquinar un plan—. Mañana a esta misma hora. En estos lavabos. Los tres y sin ningún rechiste —los tres asintieron—. Harry, tráete la capa y el mapa. Ron, trata de llegar a las mazmorras de Snape y haber si encuentras al profesor nuevo. Pregúntale cosas sobre su puesto y mete en la conversación a Snape o al menos inténtalo. Draco, ves a la enfermería y dile a la señorita Pomfrey que quieres ayudarla por todo lo que hiciste y eso, si se niega no importa, pero si acepta dile que te enseñe cosas del lugar. Yo iré a la biblioteca y buscaré cosas sobre veneno de serpientes, desangrarse por el cuello, pociones para mantener con vida de largo tiempo y cosas por el estilo.

Todos asintieron y la castaña respiró por unos segundos.

—Todo listo, ahora a dormir —dijo Hermione satisfecha.

Se levantaron del suelo y Draco acarició una última vez la mano de Ron.

Los cuatro se dirigieron a sus salas y a sus camas, aquella noche era de vital importancia descansar. La noche siguiente no podrían dormir, así que era la mejor idea.

Hermione estaba en la biblioteca sentada. Algunos alumnos estudiaban y otros parecían divertirse con sus lecturas.

Hermione tenía tres libros encima de la mesa, "misterios de las pociones salvavidas" "como sobrevivir a diferentes ataques" "pociones curativas de nivel avanzado" .

Había encontrado cosas interesantes. Se podía sobrevivir a un ataque de serpiente con una poción llamada "Serpens sanitatem" podía mantener a alguien atacado por una serpiente, hasta 48h con vida. La sangre se volvía a coagular y cerraba las heridas hechas por esos colmillos durante las horas indicadas.

También había encontrado una poción para dejar a alguien en coma y así, tener más tiempo para saber cómo salvarle la vida. La poción, tenía como nombre "altum somnum" podía mantener a alguien inconsciente durante un año si se aplicaba una gota cada noche.

Por último, había encontrado una poción para eliminar el veneno de una serpiente y sobre todo, como eliminar el de una serpiente que estaba hecha a base de Artes Oscuras.

La poción era denominada "tenebris anguis" era demasiado DIFÍCIL, pensó Hermione. Necesitaba veneno de la misma serpiente. Lágrimas de la víctima. Sangre de unicornio, dada por el animal. Lágrimas de fénix y lágrimas de una persona que ama a la víctima y es amada por la víctima también.

Ron llegó a las mazmorras y se dirigió por el frío pasillo hasta llegar a la puerta del despacho de Snape, que ahora era custodiado por King.

Tocó varias veces y se escuchó un "adelante" así que Ron abrió.

—¡Vaya! Señor Weasley, es un honor poder verle. Siempre he observado su habilidad y aunque es muy torpe, tiene un poder casi incalculable como el del trío entero —dijo King con una sonrisa.

—Muchas gracias profesor —atinó a decir Ron.

—Y bien, ¿Qué le trae por aquí? —dijo el rubio, levantándose del escritorio y acercándose a su alumno.

—Verá, quisiera preguntarle por qué eligió este puesto después de todo lo ocurrido —interrogo Ron y notó como King forzaba una sonrisa.

—Bien... Como sabrá Ron, había una bacante en pociones. Lo ocurrido con Severus, es decir, vuestro profesor de pociones —Ron notó que King parecía conocer a Severus de algo, dijo su nombre con demasiada familiaridad—. Me dejó consternado, pero quise aceptar este puesto y ayudar —Ron se fijó en su rostro mejor. Tenía ojeras por no haber dormido bien.

De repente se escuchó un "Plof" proveniente de la pequeña habitación que había dentro del despacho.

—Ho, Ron, tengo cosas que hacer. Si me disculpas, esa poción se me resiste con la sangre de unicornio y las lágrimas de fénix —rápidamente comenzó a empujar a Ron hasta la puerta y dejó de manera sutil, al estudiante fuera.

Draco caminaba hasta la enfermería, entró y observó a Madame Pomfrey recogiendo sábanas.

—¡Ho! Señor Malfoy, no esperaba encontrarle aquí después de todo lo ocurrido —la voz de la mujer sonaba áspera, como si odiase la presencia de Draco en aquel lugar.

—Buenas tardes, puede llamarme Draco. Volví por que quiero cambiar. Y quisiera una oportunidad de rectificar todos mis fallos —Draco decía todo aquello por que lo sentía, aparte del plan, claro estaba.

—¿Y cómo quiere cambiar aquellos errores? —preguntó ella, estaba vez con su tono dulce que acostumbraba a poseer.

—Bueno, he pensado que quizás necesitaba ayuda en este lugar —dijo Draco, observando la cara de sorprendida de la mujer.

—Bueno señor Malf..., digo Draco —iba a continuar la frase, pero de pronto un ruido y un grito la hizo sobresaltarse.

—Ya hablaremos en otro momento, ahora retírese —dijo asustada, y salió corriendo hacia la zona de la que Draco hablaba.

Por un momento, juraría que aquel grito provenía de Severus y de nadie más.

SNARRY-el fantasma del que me enamoré Donde viven las historias. Descúbrelo ahora