18º ROMÁNTICO🔥

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Cuando Harry llegó por la noche a la habitación de Severus, se fijó en todo. La cama estaba perfectamente hecha. Había una pequeña bandeja en medio, levitando con una botella de vino y dos copas. Las velas iluminaban el lugar y Severus no estaba.

Cuando Harry cerró la puerta tras de sí. Se fijó en el baño, una música fina de violín comenzó a sonar por toda la habitación y la puerta del baño se abrió.

—Hola, Harry... —dijo Severus, saliendo del baño con un albornoz que dejaba ver parte de su clavícula.

Con un ligero movimiento de varita, hecho vino en las dos copas y una la movió hasta su mano, mientras la otra aún permanecía allí. Harry se quedó observando lo lujoso y romántico que parecía todo, hacer el amor a la luz de las velas era muy romántico y no se podía conseguir todos los días.

Se quitó la capa y la dejó sobre el sillón que había y se acercó a Severus, que con otro golpe de varita, comenzó a acercar la copa de vino hasta la mano de Harry.

A Harry le gustaba la cerveza de mantequilla, pero el vino... Bueno, no era su alcohol favorito. Le dio un pequeño sorbo y después lo dejó en la mesita de noche de Severus.

Se volvió a acercar a él y le plantó un beso en los labios. Cuando se apartó del beso, Severus dirigió su copa hacia sus labios para beber otro sorbo.

—Quiero probar tu vino —dijo Harry, acercándose para volver a besar a Severus. Y Severus le depositó el beso mientras le pasaba el vino de su cavidad bocal a la de Harry.

—Espero que te guste —dijo Severus, que con un toque de varita, había dejado su copa en la mesa y después la varita en el sillón de al lado.

—Severus, me gusta más el vino de tu boca que el de la botella —dijo coquetamente Harry, y volvió a besar a Severus.

El mayor comenzó a besar a Harry con desesperación, intentando bebérselo al completo. Degustando el sabor del vino de la boca del contrario y fundiendo sus manos con la piel hermosa y joven de Harry.

Harry lo estaba disfrutando, sin duda que lo estaba haciendo. Había comenzado a agarrarse con fuerza del albornoz de Severus y había comenzado a caminar marcha atrás para llegar hasta la cama.

Cuando Severus lo empujó y Harry cayó en la cama. Desde la parte superior comenzaron a caer pétalos rojos de rosa y Harry se quedó observando el precioso acto los segundos que duró.

—No sabía que eras tan romántico, Sev —dijo Harry, llevando su pie a la entrepierna de Severus, y haciendo que el mayor se mordiese su propio labio.

—Harry, te gusta jugar demasiado con fuego —dijo Severus, y se lanzó encima de Harry para volver a besarlo salvajemente, provocando algunos jadeos en el menor.

—El pequeño leoncito —dijo Severus, comenzando a besar el cuello de Harry, deleitándose con el sudor que Harry comenzaba a desprender y con ese olor embriagante a lirio—. A caído en la trampa de la oveja —dijo, chupando la barbilla y volviendo a sus labios para volver a besarlo.

Harry se abrazó al cuello de Severus. Y abrazó con sus piernas la cintura también. Severus comenzó a repartir besos por el cuello mientras poco a poco, desprendía un botón de la camisa de Harry.

Cuando hubo terminado de quitar todos los botones, empezó a a acariciar su abdomen ligeramente marcado gracias al Quidditch. Harry se estremecía con cada roce que la mano de Severus le reglaba y mientras la boca de Severus jugaba con la suya.

Cuando Harry pensó que ya era buena idea comenzar a desvestir a Severus. Le empezó a quitar la bata que llevaba. Dejando primero los hombros al descubierto con varias cicatrices y después la parte de la clavícula.

Harry rompió el beso y se acercó a los hombros de Severus para comenzar a repartir besos en todas las cicatrices del lugar. Severus se abrazaba a él, ya que Harry se había levantado de la cama ligeramente.

—Mmm... —ronroneó Severus, cuando Harry mordió su cuello y después comenzó a lamer el pequeño mordisco.

Los dos estaban al borde de estallar. Se miraron por unos segundos en los cuales no supieron identificar otra cosa que no fuese: amor y deseo. Severus volvió a besarle la boca y comenzó a repartir besos por el abdomen hasta llegar a su pantalón.

Llevó su mano a la entrepierna de Harry y apretó, haciendo que el Gryffindor soltase un pequeño gemido. Severus abrió la cremallera del pantalón de Harry y después desabrochó el botón que llevaba. Los bóxers de Harry debajo de la prenda, eran de color gris y tenían una pequeña mancha húmeda del momento. Severus acercó su lengua al bóxer y la besó por encima.

—Harry, levanta un poco la cadera... —pidió Severus, y el menor hizo caso.

Severus le quitó los pantalones junto a los bóxers, dejando a Harry completamente desnudo. Ahora parecía mucho más indefenso y su rostro completamente rojo era lo más tierno que Severus había visto.

—Severus, tú también quítate eso... —dijo Harry y el mayor esbozó una sonrisa.

Se levantó de la cama y comenzó a quitarse lentamente el albornoz. Harry se mordía el labio, esperando para ver el cuerpo de Severus al completo.

Cuando Snape se quitó finalmente el albornoz. Harry se quedó observándolo con deleite. El cuerpo de Severus estaba pálido y tenía los músculos marcados en la mayoría de las zonas. Pero Harry se quedó observando el miembro expuesto de Severus, duro y grande.

SNARRY-el fantasma del que me enamoré Donde viven las historias. Descúbrelo ahora