𝒜𝓃𝓉ℯ𝓈 𝒹ℯ 𝓆𝓊ℯ 𝓉ℴ𝒹ℴ ℯ𝓂𝓅ℯ𝓏𝒶𝓇𝒶 ♡ daryl dixon ♡

primera vez

ADVERTENCIA: SEXXXO

Felicity estaba nerviosa, después de un mes de noviazgo por fin se verían en otro lugar que no fuera el bar.

Daryl quiso ir a un pueblo vecino, donde nadie los conocía, para poder salir a pasear, pero Felicity no quería eso. Ella quería algo más.

Sí, fueron al pueblo vecino, iban de camino, realmente. Felicity sentía que la respiración se le iba en la vieja camioneta, la calefacción de esta había fallado, sus piernas se movían de a un lado a otro, Daryl ni siquiera sabía lo que ella quería hacer.

—¿Pasa algo? —preguntó él, mirándola de reojo —No te preocupes, tu amiga Ámbar te cubrirá. Nadie sabrá

—No es eso —interrumpió mordiendo sus labios perfectamente pintados.

—¿Entonces?

—¿Estamos por llegar?

Daryl asintió y apuntó con su mano aún pegada al volante al pequeño letrero donde daban la bienvenida a los viajeros, ella suspiró de manera más pesada, no sabía como decirle.

—¿Quieres ir a cenar? O algo así —preguntó él nervioso, lo más parecido que tenía a citas era coger con alguien. Nunca había tenido algo formal hasta ahora.

—Sí, pero en un food cart, podemos cenar en el parque.

—¿Estás segura?

—Daryl, estoy harta de comer caviar —bromeó, sintiéndose menos pesada.

Daryl asintió y emprendió busqueda de uno, quería hacerla feliz y si la comida rápida lo hacía, ¿quién era él para negarle?

Después de haber comido en la camioneta, siendo ua experiencia nueva para Felicity ella decidió soltar su plan.

—Podríamos ir a un motel...

—¿A un motel? ¿Para qué? —pregunto Daryl dándole un sorbo a su refresco.

—Para hablar, Daryl —respondió ella rodando los ojos.

Daryl soltó una risa de nerviosismo puro. No sabía que Felicity era tan directa y le daba nervios, a la hora del sexo era un bruto, no sabía como hacerlo con cariño y amor porque jamás lo había hecho de esa manera.

Él quería a Felicity, no quería lastimarla o que le tuviera miedo, no quería presionarla ni mucho menos.

—¿Quieres que tu primera vez sea en un motel? —preguntó él, un poco preocupado.

—¿Primera vez?

Felicity rió, no sabiendo de donde él pensó que era virgen. Aunque después de unos segundos se sintió nerviosa, muy nerviosa, ¿y si él no la quería así?

—Conozco uno bueno de por aquí...

—Oh, o sea que ya has traído a más putas.

—Tú no eres una puta, eres mi novia.

Felicity se derritió de amor.

Felicity entró seguida de Daryl, realmente el motel no era la gran cosa.

Había una gran cama en medio con sábanas blancas, desde donde estaba podía ver que la puerta del baño estaba abierta así que en cuanto escuchó que Daryl cerró la puerta corrió hacia allá.

Se encerró y se miró al espejo que estaba sobre el lavabo, se miraba guapa. Realmente guapa, no se le miraba el nerviosismo en su cara pero ella lo sentía.

Se desató el cabello y se lo puso de lado para que así el ángulo de su cara se mirara lindo y salvaje. Se puso de puntitas y se acomodó los pechos haciéndolos ver más grandes de lo que ya eran.