Cae la tarde. Un aeropuerto cómo cualquier otro. Jóvenes y adultos salúdan y despíden a sus familiares.
Entre tantas personas, una chica, lleva un moño malhecho que esta cubierto por un suéter negro. Unos ojos (c/o) que intentan desviar la mirada de la demás personas. Lleva un pantalón largo negro. Tiene la cabeza baja y las manos metídas en los bolsillos de su prenda de arriba.
--¡(T/N)!-- La nombrada volteó a mirar quien había gritado su nombre.No se esperaba que alguien viniese por ella en el aeropuerto. Un peliverde corrió hacía aquella fría y distante jóven.
-- Zoro...-- Susurró la jóven, sorprendida y con una sonrisa nerviosa y sus labios temblaban, al igual que su cuerpo.
Ambos se uniéron en un cálido abrazo.
-- Te extrañé tanto, enana...-- Murmuró el chico. Ella sonrió.
--Me jódes...¿Nos vamos a casa?-- Ambos sonrieron y entrelazaron sus dedos. Caminaron hacía la salida.
La chica tenía la mirada pérdida en el suelo.
--Éspera,¿donde está la salida?-- Preguntó el peliverde, mientras arrascó la nuca.
La chica estalló a carcajadas. --De verdad no cambiás, idiota.
Una hora después...
Ambos llegaron a un apartamento.
Era grande, para dos personas, mínimo. Tenía una sala de estar, cocina y dos habitaciónes. La jóven seguía cubriéndose todo el cuerpo con aquellas largas prendas.--Escuché que estudiabas...
-- Periodismo-- Interrumpió
la oji-(c/o).-- Eso.
--¿Y tú?-- Preguntó, con cierta curiosidad y alzando una ceja.
-- No estúdio. Simplemente trabájo, me manténgo a mi mismo, ahora a tí.-- La jóven sonrió. Ese chico, seguía siendo el mismo holgazán e idiota de siempre. ¿No se cánsa se si mismo?
--¿Quieres té?-- Zoro asintió.
La peli-(c/c) se levantó y caminó hacía la cocina, que estaba concetada a la sala de estar, con paso rápido, mientras intentaba esconder su sonrisa de una cría idiota.
--Dime la verdad. Quería ver la cocina,¿no?-- (T/N) rió. La habían descubierto, ella tenía algo con las cocinas. Aunque odiaba cocinar.
-- Sigues siendo el mismo imbécil de siempre, hermanito.
--"Hermanita" serás tú. Tu eres menor que yo, idiota.-- Ella sonrió.
La jóven enpezó a hacer el té, rodó loa ojos, mientras seguía conversando con el peliverde.
--¿Tienes novia?-- El chico lo pensó un segundo, estúvo apunto de contestar, pero la chica le interrumpió. --No, fuí idiota al preguntár. Ningúna chica se fijaría en ti.
-- Idiota, estás. Soltero, estoy. Este guapo de aquí, no tiene novia.-- Sonrió ladinamente.
--Venga...¿que pasó? No me digas que te gústan los chicos.-- Burló la jóven.
--¡Tsk! Se nóta que la que no ha cambiado, eres tú.-- Murmuró el chico.
--¿Que has dicho?
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Atrapádo en tu Miráda (Ace x Lectora)
RomanceMiedo al recházo, miedo a la soledad. (T/N) es la única que sabe como se siente eso. Tanto dolor, una gran carga para su corazón. Un chico pecoso, hace que su vida de un cambio drástico. Lenguaje y escenas +18