FIRESTONE (Blue Fire)

~Chapter 14~

Esa mañana desperté con una sonrisa en mis labios.
Y bueno... un fuerte dolor de cabeza, maldito alcohol.
Giré en la cama aún con los ojos cerrados, estiré mi brazo pero no sentí a Billie a mi lado.

Bostecé y me senté, sentí todo mi cuerpo adolorido y vi a Billie mirándome desde el filo de la cama.

-Buenos días. -le dije.

-Bu-buenos días. -contestó.

Sonrió fugazmente, pero no la notaba muy feliz.

Me arrastré en la cama hasta llegar a ella y descansé mi cabeza en su regazo. La miraba desde abajo, y su mirada estaba fija en algún punto de la habitación.

-¿Qué te pasa? -pregunté.

Bajó su mirada hacia mi y sonrió. Luego sus manos comenzaron a acariciar mi pelo.

-Nada, está todo bien. -contestó.

No la creí.
Me senté a su lado y metí un mechón de su pelo tras su oreja.

-Algo te pasa, estás rara. -dije.

Suspiró y agachó su mirada.

-No acostumbro a despertar con nadie, y tú... te ves hermosa durmiendo. -dijo con una vocecita adormilada.

Sonreí como una idiota e inevitablemente mi corazón se aceleró.

-No tiene nada de malo despertar con alguien a tu lado. -dije. -Además, después de tanto ejercicio no hubiéramos podido caminar ninguna de las dos para dormir en otro sitio.

Escuché su risa y me miró.
Nunca me cansaría de ver ese azúl tan bonito, y era aún mejor con los rayos de Sol que atravesaban la ventana y chocaban en ellos.

-¿Si te doy un beso también se te hará raro? -pregunté acariciando su mejilla.

Negó con una sonrisa y se acercó a mi.
Besó fugazmente mis labios, se separó solo un poco y sonrió. Volvió a posar sus labios sobre los mios y sus manos se fueron a mi cintura.
Se separó de nuevo y rocé su nariz con la mia.

Vi que levantaba una de sus cejas y sonrió maliciosamente.

-Conozco esa...

Fuí interrumpida porque chocó bruscamente contra mis labios, haciéndome caer sobre la cama. Rápidamente sentí su cuerpo desnudo sobre el mio y literalmente, comenzamos a devorarnos.

-Menudas energías. -dije riendo mientras sus labios bajaban a mi cuello.

-Tú eres quien me las da. -contestó pasando su lengua por mi pezón.

Menudo despertar...

***

Después de esa rápida sesión de sexo y una ducha por separado, bajamos al salón atravesando el enorme pasillo.
El salón estaba lleno de colillas, vasos de plástico rotos por todos lados, botellas vacías sobre todos los sitios posibles y nuestros amigos desayunando animadamente en la mesa central.

-Vaya, buenos días parejita. -dijo Halsey.

A su lado estaba Justin, Camila y Lauren.
Billie le mostró el dedo del medio y nos sentamos con ellos.

Nos miramos todos divertidamente, al parecer cada uno de nosotros tenía marcas en el cuello.

-Que fuerte. -dijo Justin riendo.

Comenzamos a reir todos y miré a Lauren mientras movía mis cejas, me tendió una taza de café y una pasta.

-Bueno Camila, parece que mi amiga casi te arranca el cuello. -le dije.

Se sonrojó y miró a mi amiga.

-Y Billie casi te secuestra en la habitación. -comentó Lauren.

Cuando conocí a Billie, nunca me imaginé que sus amigas se gustarían con Justin y Lauren. Pero me parecía divertida la situación.

-Oye Halsey, ¿quién va a recoger todo este desastre? -pregunté.

-Mi madre tiene un servicio de limpieza, ellos se encargaran no te preocupes. -contestó.

Desayunamos hablando sobre la noche anterior, lo divertida que fué y lo bien que habíamos dormido todos.
Billie se ofreció para llevarme a casa, y cuando estacionó en mi acera, mi madre y mi padre estaban en el jardín delantero cuidando de las flores.

Nos saludaron con la mano.

-Tengo... ¿tengo que presentarme? -preguntó Billie con nerviosismo.

Me pareció demasido tierna.

-No hace falta si no quieres. -contesté. -Pero no voy a irme sin darte un beso y... luego preguntarán.

Sonrió y posó su mano sobre mi muslo.

-¿Y qué les dirás? -quiso saber.

-Pues... que eres una muy buena amiga mia. -dije y rió, haciéndome reir a mi. -Bueno, nos vemos pronto.

-Nos vemos preciosa. -dijo inclinándose hacia mi.

Besé fugazmente sus labios, pero tanto ella como yo necesitamos más y acabamos besándonos calurosamente dentro de ese coche.

-Adiós. -dije con una sonrisa.

Guiñó su ojo, casi me mareo por lo guapa que se ve y bajé del coche.
Caminé hacia mis padres mientras sentía el motor de su coche desaparecer calle abajo.

-Buenos días cariño. -dijo mi madre.

-Y muy buenos días por lo que parece. -añadió mi padre chocando suavemente su hombro con el mio.

-Ahorraos las preguntas. -contesté levantando las manos. -Se llama Billie y somos... somos amigas.

Mi padre levantó sus cejas.

-No sabía que las amigas ahora se despedían con un intercambio de saliva. -dijo riendo.

Me sonrojé y reí, comencé a caminar hacia casa y una vez en mi habitación, literalmente me tiré sobre la cama.

Sentir mi cuerpo adolorido y saber que la causa es Billie, me hizo sonreir como una estúpida.

-¿Qué te está pasando Ashley? -me pregunté en voz alta. Suspiré.

Nunca había sido una chica que se encariñaba fácilmente con alguien, todas mis relaciones duran relativamente poco porque nadie aguanta mis cambios de humor. Por eso era más de tener encuentros sexuales sin compromiso.
Así comenzó con Billie, pero cuando la miraba a los ojos podía sentir mi pecho inflarse y sentía ese cosquilleo que nunca había sentido con alguien.
Con Billie todo parecía fluir fácilmente, era como si no hiciera falta decirnos nada porque con la mirada nos lo decíamos todo.

¿Me gusta Billie?
Estoy segura de que sí, y darme cuenta da mucho miedo.

Decidí no darle más vueltas al asunto y dejar que las cosas fluyan.

Todo fluye con Billie, pero no estoy segura de que sea ella la indicada.
¿Por qué?

Porque las dos estamos demasiado rotas por dentro, ella carga su pasado y yo el mio.
Ella sabe como llevarme al cielo con un solo toque, con una sola mirada, con un solo beso.

Pero también estoy segura de que es capaz de dejarme caer, y la caída puede ser demasiado dolorosa.

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¡Hola a tod@s!
Bueno... en España el verano ha llegado, eso significa que tengo que trabajar y comenzaré muy pronto...

Prometo actualizar lo más seguido posible, no os preocupeis.

¡Un beso a tod@s!

-Karla