Capítulo 3.

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El diseño gráfico era lo que amaba desde pequeño, y aunque mi padre no quería que estudiara esto, lo hice con una beca y un trabajo de medio tiempo que he conseguido.

Han sido muy duros estos meses, mamá y yo nos hemos mudado a la casa del abuelo, mientras conseguimos un lugar donde podamos estar sin molestar a nadie, aunque pensándola bien, mi abuelo luce más feliz ahora que estamos junto a él.

Jeremy, así se llamaba mi abuelo paterno, nada parecido a mi padre. Era un ser sencillo, y muy amable. Todo un vaquero como me dice él.

—Andrés, ¿iras a la fiesta de esta noche? —quito mi mirada de la mesa y descubro la mirada descarada de Hugo mientras mira a Lana, la chica más bella del primer año de teatro. A pesar de que somos muy diferentes hemos sido amigo desde la preparatoria y cómplices en el deporte.

—No sé, creo que tengo compromiso esta noche —Hugo quita su mirada de aquella flamante chica y deja caer su fríos ojos sobre mí.

—Últimamente te has hecho un agua fiesta, de veras Andrés, no te entiendo —recrimina —Deberías de disfrutar más de esta etapa -dice molesto.

—Bueno, no eres tú que tienes que trabajar medio tiempo y preocuparte por mantener tu beca.

Niega con su cabeza.

—Sufres porque quieres, solo pídele perdón a tu viejo, y te dará todo lo que quieres.

—¡Eso nunca! —digo molesto.

—¿Lo ves? el orgullo te ciega amigo, ¿no ves lo malo que estás haciendo con tu vida? —no soporto a Hugo, no soporto más su reproches y consejos sin sentido.

—Yo me voy —digo levantándome de la silla.

La mi primera hora de clases iba a comenzar y no era posible que estuviera perdiendo mi tiempo con cosas sin sentido.

Camino a la sala de clases y ni si quiera me había percatado lo rápido que iba hasta que una dulce voz me frena.

—Hola, disculpa —relamo mi labio inferior y respiro indignado, estaba harto de este día, desde que me levanté no hubo más que reproches de mi padre, sí, se ha encargado de llamarme y seguir la amenaza que me hizo aquel día que le deje claro que no me iba a quedar con él.

"Haré que tú y tu madre vivan un infierno"

Me doy la media vuelta molesto y con cara de pocos amigos.

Mis ojos se abren un poco y mi rostro cambia de molesto ha sorprendido.

Una pequeña chica con cabello rojizo abundante y ondulado aparece en mi mapa de visión, abraza un par de libros y lleva puesto una camiseta blanca con unos jeans oscuro, bajo mi mirada a sus labios rosados y sonríe.

—Me perdí, ¿tú sabes dónde queda el aula de diseño gráfico? —sonrío un poco por la pregunta, me parece agradable que ella estudie mi misma carrera.

—Yo...eh... —no sé por qué estoy nervioso —Voy para allá —digo señalando la dirección.

—¡Que alivio! -expresa respirando hondo —No sé qué le dan a los chicos de la universidad, en serio —sube una de sus manos a la frente y entonces veo lo que dice su camiseta "Art is not crime" esa frase me hace poner de buen humor —Son tan serios y amargados —me vuelve a ver y yo levanto una ceja —Bueno, excepto tú.

—No tienes que disimular, yo también soy un amargado y odioso —sonríe, que linda es, mi corazón empieza a reaccionar y me hago preguntas internas, soy del chico que ama a las chicas pequeñas, me parecen demasiado tiernas, la verdad soñaba con el día que me topara con una chica así como esta que tengo en frente, se acerca a mí, y queda a mitad de mi hombro.

Querida Idónea. (Borrador)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora