HOPE

24

Emily se levantó somnolienta al ver la hora se alarmó eran más de las once de la mañana - he dormido tanto - pronunció mientras se estiraba, recordando que al no poder conciliar el sueño se quedó viendo películas hasta el amanecer.

- Buenos días - al salir de su habitación pero no hubo respuesta extrañada bajo al primer nivel y nada, no había nadie en casa.

Sin darle importancia subió a su habitación a darse y baño y arreglarse faltaban menos de dos hora y tenía verse con Hope.

.....

Hope estaba nervioso llegó media hora antes, esperaba entusiasmado la llegada de Emily; miraba su reloj cada momento al marcar la una su miraba se centro en la puerta, al ver que entraban diferentes personas menos ella sintió una opresión en el pecho - ¿No vendrá? - movió su cabeza - deja de pensar eso, ya vendrá - se dijo así mismo.

No sabía como, pero cuando terminó de arreglarse miro su reloj y faltaban diez minutos para la una, decir que el trayecto hacia el bar era corto sería una broma, tuvo que correr con todas sus fuerzas daba gracias por llevar unas zapatillas cómodas. Al llegar entro algo agitada y con la mirada lo busco hasta encontrarlo sentado a un lado de la ventana se acercó rápido hacia él.

- ¡Lo siento! - pronunció al estar frente a él, se encontraba avergonzada de haber llegado tarde.

- ¿Llevas esperando mucho tiempo? - pregunto temerosa.

Él solo se quedó observandola - está hermosa - decía su mente, su rostro levemente maquillado, el cabello atado en una cola alta, vestía una blusa floreada y una falda jean corta.

- Tranquila, lo importante es que llegaste - sonrió.

Ante tal respuesta el corazón de Emily latió con fuerza.

- Esperaría toda una vida contal de verte. - murmuro para si mismo.

- Enserio lo siento - volvió a repetir - no creas que soy impuntual solo no calcule bien mis tiempos.

- Descuida Emily. Esto, pedí algo para nosotros dos espero te guste. - pronunció nervioso.

- Grac... - se quedó callada al ver a una pareja muy familiar sentada al fondo del bar - No puede ser.- refunfuño. - Ya vengo Hope.

Amarga se camino hacia ellos - ustedes, ¿Qué hacen aquí? - reclamo cruzando los brazos.
- Nosotros nada. - respondió calmado.
- Me siguieron.
- Umm te equivocas venimos a comer.
- No les creo. Se pasaron. - dió media vuelta encontrándose con Hope parado al costado de su mesa con dos bolsas de papel en las manos. - Vamos Hope, a un lugar donde nadie nos moleste. - recalcó en voz alta tomando la mano del canino.

....

- ¿Estás bien? - pregunto Hope, llevaban caminando hace más de diez minutos, pero a él no le importaba seguir andando mientras estubiera agarrado de las manos con su pequeña.

- Ehhh - lo miro, y luego se fijó en sus manos - lo siento - pronunció soltando su mano.

- Descuida. ¿Estás mucho mejor?
- Si, tranquilo. Solo que verlos ahí, ahhh me da rabia que no confiaran en mi.
- Bueno. ¿Ahora por dónde estamos? - pregunto ella observando alrededor.
- Estamos cerca al lago. Por allá. - señaló.

Al llegar al lago se sentaron bajo un árbol que los resguarde del sol. - ¿Comemos? - pregunto Hope, enseñándole las bolsas entregándole una.
- Gracias. - respondió aceptando la bolsa y abriéndola adentro había un enorme sándwich de pavo con lechuga, tomate y sus cremas; una botella con jugo de naranja y un muffin de chocolate.

- Estuvo delicioso. - respondió alegre al terminar de comer.  Él solo respondió con una sonrisa.

- Bueno Hope, tenemos que hablar yo...
- Emily hace seis años atrás fui  un imbécil y un cobarde me gustaste desde la primera vez que te ví, tu aroma, tu voz, tus expresiones, todo de ti me fascino; trate de alejarme pero no pude - negaba con la cabeza - al estar cerca a ti como tú amigo ... llegué a enamorarme más y más.
Aquella vez que nos besamos - en su mente vino el recuerdo - fue el mejor día, sentí mi corazón saltar de alegría; pero...  luego senti mucho miedo soltando crueles palabras logrando herirte.
Al final no pude ir por ti, ni explicarte nada.
Emily te pido perdón, perdóname. - con cada palabra las lágrimas bañaban su rostro.

Ella se quedó fría y sorprendida, parándose al instante Emily no esperaba escuchar tales palabras reviviendo esos momentos haciéndola llorar. Al verla pararse Hope también se paró.

- Me heriste... mucho. - logro pronunciar - ese día... fue mi primer beso Hope, al sentir tus labios sentí un cosquilleo y una alegría - se tocó los labios -, pero luego dijiste...  lo recuerdo aún " nunca me interesaría una cachorra y peor si es humana". - grito mientras alzaba un poco la cabeza para mirarlo a los ojos.

- Perdón, perdón por herirte. - se acercó tomando sus manos. - Tuve miedo... que al enterarse nos separaran tú eras menor de edad.
- No, Hope no. - negaba con la cabeza - hubieras hablado conmigo, podríamos haber pensado en algo,pero no decidiste por mi.
- Y me condeno, por no hablarlo contigo. - agarro la mano derecha de Emily, colocándolo encima de su pecho en el lugar de su corazón - siente mis latidos no estoy mintiendo.

Ella se quedó en silencio mirándolo, varias lágrimas escurrían por sus mejillas. Apartó su mano sorprendiendo al canino, retrocedió unos pasos sin apartar su mirada, respiro profundo - como no perdonarte si veo y siento tu sinceridad, además en ese tiempo eramos solo unos niños inexpertos. Aparte perdóname tu por huír como una cobarde, y no encararte ya mas calmada.

- Entonces, me estás perdonando. - hablo esperanzado.
- Si. - al escuchar su respuesta él corrió a abrazarla.

Después de varios minutos abrazados se soltaron. - Emily te amo. - soltó de pronto.
- Hope, yo...
- shhh - coloco un dedo en sus labios - no me digas nada aún, lograre conquistarte de nuevo. Y verás lo conseguiré.
- Lo veremos - le dió un guiño, antes de soltar el apodo - ojitos del cielo.
Sonrió ante el apelativo. - Lo conseguiré pequeña.