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- ¡Estás aquí!- salto a sus brazos.

- Tres días tarde, pero llegue.

- No importa, te extrañe mucho.

- Yo también - se abrazaban, dando saltitos.

Ya acomodada en la misma cabaña del año pasado, comenzó a contarle toda la travesía que tuvo que ser sometida antes de llegar a Homeland.

Emily trataba de estar lo más seria posible, pero al final no pudo estallo en risas.

- ¡No te rías!- grito enfadada golpeándola con la almohada.

- No puedo, no puedo enserio tuviste que pegarle a esa mujer por esa base.

- No, es una simple base es " la base". Pero la pelea no fue precisamente por ello.

- Entonces, espera no me digas fue por el rubor o mejor por las sombras.

- No, fue algo mucho mejor. - camino hacia su maleta, abriéndola y sacando una hermosa caja.

- Toma es para tí, y por este regalo golpearía de nuevo a esa mujer horrorosa.

- Ay Cam, como puedes... - se quedó callada al ver el contenido de la caja.
Con las manos temblorosas alzo el hermoso corsé blanco, la parte del busto era de encaje mientras que el resto era transparente, la parte de atrás sujetada con cintas. La braga era de encaje sujetada a los costados con unas pequeñas ligas formando un lazo.

- Te quedaste sin habla.

- Gracias, gracias me encanta.

- Lo sabia. Ahora tenemos que apurarnos, tenemos menos de dos días para dejarte despampanante.

- Cam, primero descansa luego vemos...

- No hay tiem... - no pudo terminar su estómago rugió de hambre.

- Creo que tú estómago no piensa así.

- Ya, ya me baño y cenamos.

Al final no pudo hacer nada, después de cenar comenzó a bostezar sin parar al recostarse un momento se quedó dormida.

Emily aprovecho esos momentos para caminar, porque apartir de mañana no podría salir para nada.

....

Emily se encontraba en el lago mirando la luna, preguntándose - ¿Qué estaría haciendo Hope?.

Por pedido de Cam, Emily se había mudado a la cabaña hasta el día de la boda. Al comienzo el canino no quería separarse de su pareja, no escuchaba a nadie hasta que su madre hablo con él.
No sabia que le habría dicho, porque funcionó.

A su espalda escucho unos pasos que se acercaban cada vez más rápido, sacándola de sus pensamientos.

- ¿Hope?
- ¡Emily!
Se acercó a ella y la abrazo.

- ¿Cómo sabías que estaba aquí?

- No lo sabía, solo pensé en nuestro lugar y al llegar sentí tu aroma.

- Te extrañe.

- Yo también mi pequeña.

- ¿Aún no logras dormir? - aparto su mirada.

- Hope, dime que te aturde por ese motivo no concilias el sueño; si me cuentas puedo ayudarte tenme confianza.

- No me sucede..
Se soltó y cruzó sus brazos - Hope Higgins - pronunció claro y fuerte.

- Emi...ly - ella alzo su ceja.

- Está bien, me preocupa que llegues a odiarme.

- ¿Llegar a odiarte?

HOPEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora