Team of Setters: Familia por siempre

Discusión

(Shirabu)

De todas las personas con las que me podría haber cruzado en el camino mientras estoy perdido, ¿justo tenían que ser Atsu y Tsu? ¿Enserio? Ken tiene razón, alguien en el cielo nos odia.

No llegue ni a dar dos pasos con mi amigo, que mi ex apareció corriendo a mi lado.

-Shi, necesitamos hablar. -Fue lo primero que me dijo. Yo pretendía rodearlo y seguir mi camino, pero...

-Kenjirou-kun, creo que yo estorbo aquí. Iré a sentarme en alguna banca que encuentre. -Atsu... ¿realmente no podías estar de mi lado?

Mi compañero me abandono sin reparar siquiera en la mirada de "No te atrevas a dejarme" que yo le mande. Maldito traidor.

-Shi, por favor dame otra oportunidad. -Tsu me dijo.

-No. -Le respondí. - ¿Para qué quieres otra oportunidad? ¿No estás demasiado ocupado manteniendo tu posición en el Equipo Nacional? –

-Lo lamento, enserio. Sé que te hice daño, y no estuvo bien. Fui un idiota. -Se expreso.

Tsu, ¿cuándo no has sido un idiota? ...

-Siempre fuiste un idiota, y yo lo sabía... -No estoy muy seguro de porque lo dije. - ¿Por qué quieres que volvamos ahora? Estos últimos meses parecías estar muy bien sin mí. –

- ¡Eso no es cierto! -Es imposible no tener una conversación con Tsu que no termine en gritos. Incluso nuestro rompimiento fue a gritos...

 Yo llegue a su Universidad, lo jale del brazo hasta que estuvimos alejados de su salón, y le pregunte por qué había dejado el departamento. Me grito que porque ya no quería vivir conmigo, que yo parecía querer controlarlo, y que ya no quería verme. Que eso era todo, que termináramos. Le grité de vuelta que estaba bien para mí, y me fui enojado...

Si lo pienso bien, tuvimos un horrible rompimiento.

- ¿No lo es? Terminamos hace tres meses, Tsu. Me dijiste que te ahogaba, ¿ahora no lo hago? Dijiste que ya no querías verme, ¿y ahora sí quieres? ¡¿Cuál es tu problema?! ¡Fuiste tú quien termino conmigo! -Él es el único que logra hacerme gritar.

- ¡Ya lo sé! ¡Lo sé y no sabes cuanto me arrepiento! – Tsu se ve... ¿frustrado? -Creí que sin ti me podría concentrar solo en el vóley y mis estudios, y estaría bien... pero, no puedo dejar de pensar en ti, en lo que paso... Incluso te hice llorar. Te lastime cuando jure que nunca te haría daño. Te trate horrible y lo lamento. Fui muy inmaduro. –

¿Y cuando no lo has sido?

- ¿Y qué? ¿Ahora vas a decirme que maduraste? ¿Qué ya no va a ser como antes? ¿Qué está vez no me vas a lastimar? - ¿Realmente crees que soy tan ingenuo, Tsu? - ¿Cómo te diste cuenta de que me extrañabas? ¿Y si lo hacías desde un inicio por qué no simplemente viniste por mí antes? –

-Yo... trate de ignorar ese sentimiento, junto con el de culpa que tenía por haberte hecho llorar, pero... odio verlos cerca de ti, y ver como sonríes mientras no estoy cerca... ¡Me molesta! – Tsu, jamás eres claro al hablar, y yo no soy adivino.

- ¿Verlos cerca de mí? ¿A quién? -No estoy seguro de a donde voy a llegar con esto.

- ¡A todos! ¡Odio ver como dejas que Oikawa-san o Suga-san te abracen! ¡Odio que ahora Kageyama este en nuestro departamento junto a ti! ¡Odio que Akaashi-san y Kenma-san se mantengan a tu lado y te alimenten! ¡Odio ver como Semi-san siempre te está cuidando! ¡Odio que dejes que Yamagata-san te manosee! ¡Y odio que parezcas tan feliz sin mí, porque yo quiero tenerte conmigo y no dejarte ir nunca más! –

Tsu, quiero abrazarte y golpearte al mismo tiempo...

-En primer lugar, no hace falta que grites, estoy frente a ti. -Y creo que me dejaste sordo de un oído... -En segundo, Tobs necesitaba un lugar donde quedarse, y te recuerdo que yo alquile el departamento, así que es mío, y yo hospedo a quien quiera en él. En tercer lugar, Tooru, Kou, Kei, Ken Tobs, Atsu y Sem son mis amigos, no, mi familia, y pueden abrazarme y darme cariño cuando quieran. Cuarto, ¡Yamagata-san no me manoseo! ¡Solo somos amigos, y te recuerdo que siempre a sido así de cariñoso con todos, incluyéndote! Y quinto, ¡TENGO DERECHO A SER FELIZ! –

¿Pero quien se cree que es? Yo puedo hacer lo que quiera cuando quiera, y él no tiene porque reclamarme nada.

- ¡Sé que tienes todo el derecho a ser feliz! ¡Pero odio que sea sin mí! – Tsu parece a punto de largarse a llorar. -Hubo un tiempo en que, yo era lo que te hacia feliz... _Me gustaría poder volver al pasado y arreglar lo que hice... Me gustaría volver a ser yo quien te haga reír, a quien dejes abrazarte, quien te compre tus caramelos preferidos, quien te cuide... quien viva contigo... ¿no puedo hacerlo ahora? –

Tsu... tú siempre me hiciste feliz. Cuando tenía días malos, hacías alguna tontería para que me riera. Siempre que ibas al super me comprabas mis dulces preferidos. Cuando tenías frío o estabas enfermo, te pegabas a mí como una garrapata, y si yo estaba enfermo, no había mejor enfermero que tú para cuidarme. Y extrañamente, aún no sé cómo es que la casa no exploto con nosotros dos adentro, aunque una vez incendiaste la cocina... Nuestra relación era muy bonita... ¿por qué acabamos con ella?

- ¿Qué nos pasó, Tsu? Antes todo estaba bien, ¿cuándo empezó a desmoronarse todo? - ¿Cuándo dejamos que todo se destruyera?

-Fue mi culpa. -Su voz ahora es más baja, parece triste. -Debí hablar contigo sobre la presión que tenía, y mis preocupaciones sobre el Equipo Nacional... En lugar de eso, te aleje e ignore, y te hice llorar... Lo siento. –

Creo que esta es la primera vez que tenemos una conversación seria...

-Debí haber insistido más, o quizás haberte dado más espacio. -Fue algo que pensé en los primeros días sin ti.

-No, tú insististe. Fue mi culpa, soy un idiota e inmaduro que no supo valorarte, y ahora, ya no me necesitas...-Puedo ver las lágrimas cayendo de sus ojos.

¿Qué no te necesito? Tsu, enserio eres un idiota...

- ¡Maldito egocéntrico! ¡Deja de pensar solo en ti y en tus fallas y ponme más atención! ¡¿Enserio crees que no te necesito?! ¡¿Qué no te extraño?! ¡Que mi cara no lo demuestre no significa que no piense en ti todo el tiempo! ¡Idiota! – Enserio eres el único que logra hacerme gritar...

Y también eres el único que puede hacerme reaccionar de maneras inesperadas, después de todo, acabas de hacer que te bese.

- ¿Acabas de...? Tú...-Musito Tsu cuando lo solté. Se ve tan perdido...

-No decidas cosas por tu cuenta. -Lo regañe. -Te daré otra oportunidad, no lo arruines. Si no, mandare a Ken a matarte. –

Es tan lindo saber que Tsu le tiene terror a Ken...

Ambos caminamos juntos de la mano hacia el café con el mapa que mi amigo me había mandado, encontrándonos a Ushijima-san y a Sem en el camino.

Mi sempai se ve sorprendido, supongo que no esperaba que Tsu y yo regresáramos.

-Shirabu, ¿qué significa esto? -Me pregunto ni bien estuvimos a su lado.

-Hemos vuelto, sempai. -Le conteste. Ushijima-san nos felicitó.

-Bueno, si tú eres feliz, supongo que está bien. -Sem quiso darme un abrazo, pero alguien me jalo hacia atrás.

-No. Semi-san, Shi es mío y no quiero que lo toques. -Tsu me abrazo por la espalda muy posesivamente.

-Yo lo abrazo si quiero, mocoso. Él es mi kohai, y mi familia, así que lo sueltas ahora. -Sem regaño a Tsu, y me libero de sus brazos.

-Tranquilícense los dos, no hay necesidad de pelear. -Ushijima-san intervino.

Ambos se alejaron uno del otro, pero siguieron mandándose miradas de odio. Tengo la sensación de que me olvide de algo...

-Oye Shirabu, ¿dónde está Miya? – Oh cierto, Atsu estaba conmigo... ups.

-Uy, me olvide de él...-Sem empezó a reírse, y yo le mande un mensaje a mi amigo, para avisarle que lo había abandonado. No es que realmente me importara. Él me dejo primero con Tsu, así que, se lo merecía de todas formas.