Capitulo 9

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Algo importante que resolver....

Lo único importante para Liliana siempre fue él...

Tanto le importo que construyó un laberinto para que nadie lo molestara.

El no quería saber nada sobre el exterior y ella le cumplió este capricho.

Lo importante del laberinto nunca fue llegar al centro, si no a la otra entrada del lugar, donde solo Liliana podría cruzar.

Estaba tan acostumbrada que cualquiera que entrara se perdería en segundos pero ella no...

Tanto tiempo recorriendo esos muros eran para Liliana una caminata rutinaria.

Diez minutos tomo para llegar a la otra salida y ahí sentado se encontraba él...

—¡¡Seth!!— grito entusiasmada al verlo de nuevo.

Había pasado una semana desde la última vez que lo visito y una semana le basto para hacer mil locuras.

Los ojos de Seth lucían apagados pero en un instante cambiaron por unos destellantes, estaba tan feliz por tener de vuelta a Liliana.

Una sonrisa cálida dejaba a la vista esas hermosas perlas que tenía por dientes.

Su cabello gris acentuaba muy bien con su corte de cabello Quiff, lo hacían ver mas maduro a pesar de tener solo veintiséis años y sus ojos color miel derretían el corazón de Liliana.

..Tan amable y tan puro como lo recordaba..

Sus palpitaciones aumentaban cada vez más al estar tan cerca de el, no tenía ninguna duda Seth era su felicidad.

—¡Liliana!, pensé que estarías de regreso pasado mañana— dijo entusiasmado al tenerla antes de lo esperado.

Calmo sus locas palpitaciones antes de hablar..

—Si... Lose... Pero es que sucedieron muchas cosas.

Con una mirada un tanto traviesa el le guiño el ojo.

—Y muchas diría yo~

Liliana se petrificó cuando el hizo eso, acaso el ya sabía?

—Me contó un pajarito que te has casado.

—¿Es eso cierto?

Discretamente volteó a ver a la sirvienta encargada de Seth, quería matarla por haber abierto la boca antes de tiempo.

La sirvienta que pasaba en esos instantes para darles unos aperitivos se congelo por la indiscreción que ella cometió.

Seth lo noto enseguida y negó con la cabeza.

—Lo siento, yo le obligue hablar así que no culpes a Neyli.

—Estaba aburrido y tampoco tenía noticias de ti, así que la mande para averiguar a que hora estarías de regreso.

—Solo que en ese momento vio cuando ingresabas a la mansión junto con tu esposo y tres niños.

—Ella corrió de prisa para darme la buena noticia de tu llegada y sin querer me dijo lo que estaba ocurriendo.

Liliana dejaría pasar esta indiscreción solo porque el quería saber sobre ella y eso le alegraba enormemente.

Neyli se retiró antes de que su amo cambiara de decisión, si no fuera por el joven Seth que la defendió, ella ya podría vislumbrar su futuro mendigando en las calles.

—La verdad me sorprendió mucho saber que te habías casado.

—Nunca logre imaginarme algo así pero me alegró mucho por ti.

—Y también.... estoy muy enojado contigo— Dijo tratando de hacer un puchero.

Pretendía hacer un sencilla broma pero esto a Liliana le aterrorizó por el simple hecho de saber que Seth podría estar enojado con ella.

Al notar que el rostro de Liliana se había puesto más blanco de lo normal, el le dio unos golpecitos en la mano.

—Solo bromeaba—dijo para tranquilizarla, lográndolo a la perfección.

—.....

—Liliana— su tono fue más serio—Me alegra de que estés conmigo pero creo que sería mejor estar con tu esposo en estos momentos, ustedes son recién casados!

— Disfruta tu matrimonio....

—Disfruta cada segundo y no lo desperdicies — su voz se hizo triste y el significado de sus palabras eran mucho más tristes.

Lo que parecía ser una conversación amena se convirtió en un momento incómodo para los dos.

—Las fresas ya están en su punto ¿quieres ir a recolectarlas? —pregunto para cambiar la conversación.

Liliana con un poco de tristeza acepto...

—Le hablare a Neyli para que venga ayudarme.

—¡No!— interrumpió para impedirlo—Yo te ayudare.

Seth suspiro con rendición tampoco tenía ninguna intención con contradecirla, estar cerca de Liliana le hacía sentir una tranquilidad abrumadora

Una benefactora tan buena como Liliana tal vez no lo merecía.

—Gracias.....

—Cuando... te canses de empujar le avisaremos a Neyli para que nos ayude.

El estaba esperando la respuesta de Liliana y ella solo asintió para confirmar.



∆∆∆∆

Con mucha dedicación llevaba la silla de ruedas de Seth mientras llegaban al pequeño huerto de fresas.

—¿Como es el?—preguntó curioso mientras sostenía una fresa regordeta.

Liliana lo pensó un poco y quería recordar a Erick pero lo único que venía a su mente era la imagen del mismo Seth.

—El es...—Miro a Seth con tanto amor.

—Es una persona maravillosa.... la más bella y amable que nunca imagine conocer.












Te Compre!! Ahora Me PertenecesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora