Capitulo 56

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Lo miraba divertida mientras lo veía lidiar con todo a su alrededor.

Incluso cuando desplegaba una bandeja en la cama se notaba su alegría en las cosas mas sencillas que pudiera uno imaginar.

—Eres un esposo muy atento~ —dijo con una agradable sonrisa.

Los cuidados que Erick tuvo por ella dieron como resultado que su recuperación fuera cada vez más rápida.

Sus fuerzas estaban regresando poco a poco y eso fue un gran alivio para ambos.

—Siempre he sido así..—contestó y la beso en sus mejillas que se tornaron de un mejor color.

Ya veo...—susurro.

Se sentía feliz de que alguien como el estuviera con ella.

Perdió por cuatro años los mimos de su amable esposo, realmente no lo dejaría ir y eso no significaba que lo retendría, si no que trataría de conquistar cada día a este amable caballero.

Jamas lo haría sufrir de nuevo por causas tan estúpidas.

—¿Bien entonces con que quieres comenzar?

Señaló los platillos que acomodo dentro de la bandeja.

—¿Con las albóndigas de espinacas?

—Avena con puerros o con la sopa de crema de cacahuate?

Bueno que podría decir?, si al final ella tendría que comerlo todo.

—Con las albóndigas esta bien— contesto agradecida.

Probó el primer bocado y sabía mucho mejor de lo que esperaba.

Nunca le gustaron las espinacas pero si él lo preparaba aunque no fuera un Chef aún así sería el mejor de los manjares.

—El jugo del día es de anacardo con semillas de girasol.

Vaya....No quería molestarlo más.

—Y como postre tendremos una tarta fría de chocolate...

"Pfff" quería reírse pero se contuvo.

Estaba monopolizando a este lindo y atento hombre del mundo.

—Erick? no te parece que es demasiada comida?

No tenía intención alguna de decirle nada, pero aveces Erick traía más de tres platillos sin incluir los postres que al final ella terminaba de comer.

—No digo que este mal...—se apresuró en terminar, no deseaba verse como alguien desagradecida por sus cuidados.

—Tu comida es deliciosa, pero es demasiada.

—¿Acaso pretendes engordarme?— pregunto un poco culpable por haberlo dicho de esa forma.

—....

—....

Erick al instante se avergonzó, en realidad tenia dos intenciones con sus cuidados.

La primera y más importante era que Liliana recuperara sus fuerzas como también salud.

Y la segunda tal vez si decía algo ella probablemente se enojaría o diría que era un degenerado.

Incluso más haya de lo sexual esperaba que Liliana estuviera de acuerdo con el. Ya que seria el cuerpo de su esposa el que recibiría ese gran cambió radical.

∆∆∆

—Liliana puedo hacerte una pregunta?

—¿...?—Ella asintió en respuesta mientras terminaba de comer las albóndigas.

Te Compre!! Ahora Me PertenecesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora