Te Compre!! Ahora Me Perteneces

Capitulo 58

La abrazó por detrás mientras contemplaban la bella imagen del jardín por la ventana, era como un sueño que estuvieran así.

—Vamos al jardín!— sugirió entusiasmada.

Quería ir con él, pero había un pequeño problema en cuanto a eso.

—No es una buena idea...—contestó de inmediato Erick.

—El cielo se esta nublando, así que probablemente lloverá en cualquier momento.

—Oh....—dijo decepcionada.

Realmente quería ir para hacer buenos recuerdos de este lugar.

—Espero que no llueva cuando ellos regresen.

¡Ah! Se equivocó, no debió decirlo, se suponía que era una sorpresa.

—¿Quien?—preguntó con curiosidad Liliana.

—....

Aunque quisiera ocultarlo no podría hacerlo, ya había revelado demasiado como para hacerse el despistado.

—Mis hermanos..—se culpo por su indiscreción.

—Ellos han querido regresar desde el día en que yo lo hice.

—Te han extrañado.

—No les fue suficiente el recuerdo que les diste..—dijo susurrando a su oído

—¡¡......!!—¿Se había dado cuenta que fue ella?

Volteo y vio su sonrisa de oreja a oreja.

¡Demonios que vergüenza!.

—¿Como te enteraste?

Erick miro graciosa la expresión de Liliana al ser descubierta.

—Nadie más que tu les daría algo como eso.—se burló un poco de ella.

Bueno tenía lógica lo que él decía, ellos no conocían a nadie como para que les regalara ese tipo de joyería.

Su rostro se volvió amable, esta vez cuando sus pequeños regresaran les daría todo el amor que ella nunca tuvo con sus padres.

—¡....!

—Espera un momento Erick!— reaccionó después de darse cuenta de algo.

Se aparto de El y lo miro seriamente.

—Dejas que ellos lleguen solos?!, sin que nadie los reciba en el aeropuerto?

¿Acaso Liliana lo estaba reprendiendo?

—Tienes que ir a recibirlos.—regaño.

Al parecer si lo estaba reprendiendo.

—Estarán bien, Félix y Lucia los acompañan—trato de tranquilizarla de la mejor manera.

—Aun así— dijo Liliana negándose a lo que Erick decía.

—.....

—.....

Al ver que no respondió alzó su voz..

—¡¡Erick!!

El Se encogió de brazos ya que por alguna razón le recordaba a la Liliana del pasado y no quería enojarla, mucho menos que se preocupará.

—Esta bien —dijo rindiéndose ante ella.

—Iré por ellos....

—Pero antes que nada..

—¡.....!

Sin previo aviso la sostuvo entre sus brazos y la llevo nuevamente a la cama.

No la dejaría que estuviera tanto tiempo ahí parada.

—Lleva una sombrilla contigo y para los demás...—sugirió.

Erick asintió y la arropó antes de salir.

—Volveré pronto..—se despidió de ella con un beso en la mejilla.

Ella se sonrojó por lo tierno que podría ser su esposo.

—¡....!

El abrió la puerta y Volteó a ver a Liliana antes de salir de la habitación.

Miró lo resplandeciente que era, tan bella, tan hermosa que parecía Un ángel.

Un ángel que en cualquier momento desaparecería!

Su corazón dio un vuelco que no lo dejo respirar y Regreso nuevamente a ella.

—¿Erick? Que sucede?—pregunto desconcertada ante su regreso.

El no respondió y la beso.

Cada beso se hacía más intenso que le costaba a Liliana respirar.

Los pensamientos de Erick se inundaron con algo que se podría llamar ansiedad...

Si tan solo!, ¡Si tan solo!

Si tan solo el cuerpo de su esposa no estuviera tan débil, le haría tantas veces el amor para no tener que separarse de ella nunca más.

Realmente no quería ir, no quería apartarse de ella.

Porque la extrañaba? No esta ella entre sus brazos?!

Algo no estaba bien, es por ello que no quería ir y dejarla sola.

Sentía temor de perderla, parecía que nunca la volvería a ver.

Esto era un sentimiento de pérdida?! Pero porque?

—¿Erick?—dijo preocupada

Que es lo que le sucedía?

—Liliana....—su voz por alguna razón se volvió triste.

—No quiero que nada te suceda , así que por favor no hagas nada absurdo en mí ausencia.

Acarició su rostro y la beso con más a profundidad.

—¡Ah!"mmmm~

Liliana no podía seguir el ritmo de Erick.

Se preguntaba del ¿Porque se estaba descontrolando tanto?

El quien siempre fue una persona tranquila y no agresiva.

Pero aun así trato de seguir el ritmo de sus besos que la hacían estremecer tanto.

Deseaba tantas cosas que el hiciera, sin embargo no era el momento más adecuado.

Toco con suavidad su espalda y le dio unas palmaditas para tranquilizarlo.

Se aparto de él y sostuvo sus mejillas entre sus manos.

—Estare bien , no tienes que preocuparte tanto por mí — dijo para consolar la preocupación que sentía.

—No voy a ir a ningún lugar.

Sus palabras eran amables y tiernas que lograron calmarlo.

—Tienes razón—respondió con pesadez y la beso en su frente.

Si, ella no iría a ningún lugar.

No lo haría...

—Volvere pronto.

Se dirigió nuevamente a la salida y antes de que el cerrara la puerta.

—¡¡Erick!!— Liliana lo llamo.

—Te...a...

No!, no lo diría ahora, sería cuando todos estuvieran juntos.

Y en ese momento le confesaría por primera vez cuanto lo amaba.

—Te diré algo cuando regreses, no tardes y traelos a mi.

El no estaba muy satisfecho pero aún así se marchó de la habitación.

Esto ¡¡¡era terrible!!!...

Su corazón se apretaba con dolor ,¿que era esta angustia que lo confundía?