La planeadora de bodas.

21

¿Qué es lo que había hecho?

Esa pregunta se repetía constantemente en su cabeza y no lo dejaba en paz.

Desde aquél beso, todo su mundo había cambiado completamente, ya no estaba seguro de lo que quería y de lo que estaba haciendo.

Si bien, por una parte quería seguir con su plan hasta concretarlo, otra parte de él le decía que abandonara todo y luchara por ella porque aún estaba a tiempo. Un sueño que se veía eclipsado cuando el sentido común y la realidad entraban en el juego.
No podía luchar por Sakura aunque quisiera, ella estaba con Sasuke.

Otro problema más rondando en su cabeza, la culpa. Culpa por haber besado a la novia de su mejor amigo, culpa por engañar a Hinata y culpa por arrastrar a Sakura en todo esto.

Aunque sabía de antemano que la relación de Sasuke y Sakura no estaba en el mejor momento, aún así no debió de aprovecharse de la situación y de la vulnerabilidad de la peli rosa ¿En qué clase de persona se estaba convertido?

Ahora era mucho más difícil verle a los ojos a su prometida y a su amigo sin sospechar que ellos adivinarian lo sucedido con un simple vistazo a sus ojos, o si no era así, entonces él terminaría diciéndoles todo como si las palabras fluyeran a través de él como vómito por castigo de su traición.

¿Pero qué estaba pensando? Fue sólo un beso, no fue gran cosa ¿Verdad?
Probablemente ni siquiera había significado nada para ella y posiblemente cuando se volvieran a ver, lo odiaria por haberse aprovechado de ella y el progreso que habían hecho en su relación habría caído por la borda. Sinceramente entendería si ella ya no le quisiera hablar, pero también le doleria el hecho de que para Sakura el beso fuese insignificante cuando para él, ese beso inició un mar de sentimientos incontrolables.

-

-

-
Ya había pasado algún tiempo desde ese suceso. Intentaba mantenerse lejos de la peli rosa pero no podía poner la misma distancia con el azabache. Últimamente salían juntos más a menudo que antes, Naruto sospechaba el motivo pero no quería sacar el tema de la Haruno con su amigo cuando él mismo no podía parar de pensar en ella.

Sin embargo esperaba que está vez fuera diferente.

Estaba dirigiéndose hacía la boda de Gaara, uno de sus viejos amigos. Honestamente se lo planteó un millón de veces si debería de ir o no, ya que aún no confirmaba su asistencia debido a asuntos personales, la pelea que tuvo con Kankuro y el hecho de que las bodas le traen un monton de recuerdos.

Pero esta vez tenía que ser diferente.

Hinata quería acompañarlo y aunque preferiría ir solo, quién era él para negarle eso a su prometida, sin embargo no podía evitar que se aburriria en la velada y terminarían llendose temprano. Así eran las cosas con ellos, las charlas eran monótonas, la Hyuga no se atrevía a bailar en público y mucho menos beber aunque sea una copa. Así era ella pero estaba bien porque aún así no dejaba de ser amable y se preocupaba por los demás, simplemente no era su tipo.

Llegaron y la recepción estaba increíble, había ramos de flores y candelabros colgando del techo y con la iluminación daba el efecto de luces iridescentes, simplemente era espectacular. Al parecer a la Hyuga también le había encantado, pues observaba maravillada aquel espectáculo y las luces se reflejaban en sus ojos perla. Era demasiado hermosa y aún así Naruto no podía obligarse a amarla.

La ceremonia también fue muy emotiva, aunque para su preferencia, la de Shikamaru y Temari fue su favorita, más que nada porque fue muy gracioso el ver como la rubia regañaba a su esposo en medio de la ceremonia y como ambos fueron muy sinceros y muy abiertos a la hora de decir los votos. También por la cuestión antes mencionada... Pero no era momento de volver a recordar eso.

A lo lejos observó a Kankuro sentado en la primera fila de bancos y no pudo evitar que le hieviera la sangre con el solo hecho de estar en el mismo lugar que él. De hecho, si no hubiera sido por la insistencia de Gaara, no estaría en ese lugar porque sabía que en cuanto lo volviera a ver, quién sabe si podrá contenerse.

Intentó ignorarlo el resto del evento y al parecer funcionó, pues ni uno ni el otro se dirigían la mirada y mucho menos la palabra, simplemente se dedicaron a disfrutar de la fiesta.

Naruto y Hinata se acercaron con Gaara y Matsuri para felicitarlos por su boda.

-Felicidades amigo.- Le dijo el rubio.

-Gracias Naruto, que bueno que pudiste venir.

-Fue gracias a tu constante insistencia.-

-De cualquier forma me alegro de verte aquí con Hinata.-

-Si bueno, yo me alegro de que hayas encontrado finalmente tu felicidad.-

-Sí, creo que este ha sido un buen año para mis hermanos y para mí.-

El otro sólo asintió algo incómodo por la mención de sus hermanos.

-Dime Hinata ¿Cuándo va a ser su boda?- Le preguntó Matsuri a la Hyuga.

-Será en la primavera del próximo año.- Contestó muy contenta.

-¿Enserio? Eso es bastante tiempo, no sé cómo puedes ser tan paciente.- Contestó la castaña.

-Bueno ese fue un acuerdo entre ambos y creo que mientras sea con Naruto, vale la pena esperar.-

-¡Tonterías! Has esperado demasiado tiempo por él y ahora que finalmente lo tienes deberías apresurar las cosas.-

-¿De verdad crees eso?- Preguntó no muy segura.

-¡Por supuesto! Verás, yo era un poco como tú en ese aspecto, pero después comprendí que si realmente quieres algo tienes que ir a conseguirlo y no esperar a que llegue a ti por arte de magia. Es por eso que tienes que aprovechar la oportunidad e ir por lo que mereces.-

-Pero ¿Crees que funcione? Quiero decir, Sakura ya ha planeado gran parte de la boda y ya hasta reservó el lugar.- Dijo algo desanimada.

-Es de Sakura de quien estamos hablando, ella puede hacer milagros, tan solo mira a tu alrededor.- Dio una vuelta completa extendiendo sus brazos.

-Tal vez tengas razón... Pero tengo que discutirlo con Naruto antes de hacer algún cambio.-

-No creo que eso sea necesario, después de todo es tú momento y creo que él debería de entenderlo.-

-No estoy muy segura...-

-Sólo piénsalo ¿Si?- La tomó por los hombros y se despidió de la Hyuga para atender a sus otros invitados, dejando a la otra con muchas preguntas.

-¡Ey! ¿De qué estabas hablando con Matsuri?- Llegó Naruto con ella sorprendiendola.

-Ummm... Sólo hablábamos de las bodas y de Sakura.- Dijo tratando de no sonar nerviosa.

-Sakura... Ya veo.-

-Por cierto, no la he visto por ningún lado, ella debería de estar aquí.- Preguntó Hinata.

-No pudo asistir porque no se sentía muy bien, pero en cambio envío a su asistente y he de decir que ha hecho un trabajo excelente.- Contestó Gaara.

Era de esperarse, pensó el rubio, después de todo, volver a toparse con Kankuro o incluso con él mismo debía de ser muy difícil para ella.
Aunque era una tarea difícil, intentó dejar de pensar en ella y concentrarse en otros asuntos, después de todo era una fiesta y él vino para pasar un buen rato y distraerse un poco de lo que estaba pasando.

-

-

-
Perdón por la espera pero aquí tienen finalmente otro capítulo, espero que sea de su agrado y díganme si les gustan los capítulos narrados a través de la perspectiva de Naruto.