Mi hermanastro (Bokuaka)

capitulo 7

Akaashi POV

Qué les puedo decir? Durante todo el camino a casa fue silencioso y lento. Algunas personas nos miraban extraño, pero poca era mi importancia ante eso. Y al parecer para Bokuto era lo mismo.

De a poco el cielo que era de color anaranjado se oscurecía lentamente y se daba la presencia de las luces de casas, semáforos y demás.

En ningún momento me bajó para tomarse algún respiro o descanso, no seré muy pesado para el?

-Aka... Aghashi?- escuche que decía Bokuto- c-cómo... Te sientes?

-ehm... Un poco mareado todavía- desde cuándo tanta preocupación? De verdad escuché bien lo que me dijo y no era una ilusión? Es que simplemente no me calzaba. Aparte de que dijo mal mi nombre, qué le ocurre?

-yo estoy bien pero, tu no quieres descansar un poco?- si, de verdad algo le ocurría.

-no es necesario, cuando lleguemos a casa podré descansar.

No volvió a dirigirme la palabra y el silencio entre ambos se hizo presente de inmediato, vehículos pasando por las calles era el único sonido.

Estaba cansando a pesar de que no me movía, aun que bien, puede que sea a causa del abundante mareo que sufría, era de verdad estresante y sin notarlo mi parpados empezaron a pesarme.

***

-Aghashi, ya estamos en casa- me habia despertado mi hermanastro, otra vez con ese nombre tan extraño.

Bostece- lo siento, me quedé dormido sin darme cuenta- froté mi ojo.

-no importa- me dijo, estábamos en frente de la puerta y no nos movíamos. Observaba aquella puerta sin siquiera parpadear, ni si quiera sabia porque lo hacia realmente- ehm... Aghashi puedes bajarte un momento? Es que necesito abrir la puerta.

Claro, como no lo habia pensado. Ni el ni yo podíamos abrir la puerta en la posición que estábamos. Así que tal como me lo habia pedido me bajé de su lomo, notando de vuelta el molesto mareo, que irritante se ponía. Sabia que si me tambaleaba iba a surgir una nueva preocupación así que recargué mi peso en el muro de nuestra casa esperando de que Bokuto abriera pronto la puerta, me sentía muy patético e indefenso en la situación en la que estaba, sentía de que cualquiera se podría aprovechar de mi por lo vulnerable que estaba.

-sube- me dijo Bokuto luego de abrir la puerta, mostrándome su ancha espalda y doblando un poco sus rodillas. Era claro de que quería que subiera a su espalda, y no habia puesto resistencia.

-agh se me olvidaba- volvió hablar cuando ya estaba arriba suyo- olvidé bajar mi pelo, puede hacerlo por mi por favor?

Que extraña pregunta, bajar su cabello puntiagudo al de siempre, tocar su cabello...

Lo hice como me lo habia pedido, pasando mis dedos por sus raíces bicolores. Era mas suave y brillante de lo que me esperaba. Sonaba muy extraño lo que habia pensado, pero era cierto.

-bienvenido a casa- nos habíamos adentrado al hogar y escuchamos como nuestra madre nos saludaba, estaba cocinando así que la saludamos como pudimos. Y luego de escuchar un saludo nos miró a ambos saliendo un poco de la cocina.

Es obvio pensar como madre preocupada, acercarse a nosotros preguntando que habia pasado.

-no es nada, Akaashi esta bien, no es así?- asentí a la pregunta, dijo bien mi nombre.

-uff... Que alivio- suspiro calmada mi madre- pero eso no quita de que estas arriba de tu hermano, qué pasó?

-un pequeño mareo, pero no te preocupes ma, subo a Akaashi a su pieza de inmediato para que descanse- de verdad de que Bokuto era todo un actor, demostrando mucha alegría y ensuciamos, y de repente volverse serio.

-que bueno que seas bueno con tu hermanito- sonrió mi mamá- te dejaré un plato con comida mas tarde.

-bien- todos este rato de encuentro habia respondido únicamente Bokuto. Quien luego de responder subió las escaleras con suma calma hasta mi pieza, dejándome acostado en mi cama.

Simplemente luego de eso se fue de mi habitación dejándome solo.

Estar acostado mirando casi solo el techo si era un logro, como bien no me movía o me movían mi cabeza se mantenía tranquila y con eso el mareo también. Por fin podre tener un mejor descanso.

Ya era de noche y se escuchaban los grillos cantar por la ventana de mi pieza hacia el patio. Sueño no tenia, sin duda se me habia quitado luego de echarme una siesta en el lomo de Bokuto.

Y gracias a eso no me habia fijado que tenia algunos mensajes no leídos de Kenma, estaba preocupado por mi. Le respondí de que todo estaba bien, de que ya estaba en mi casa y con menos mareo.

Estaba en eso cuando siento que abren la puerta de mi pieza. Mi hermanastro venia con una bandeja con comida, la verdad es que no tenia mucha hambre pero se de que no podía rechazarla así que me senté en mi cama y agradecí por la comida.

Procedí a tomar uno de los dos pedazos de sándwich y comerlo con paciencia y lentitud, teniendo la mirada penetrante de Bokuto hacia mi, cosa que me incomodaba bastante.

-qué sucede?- pregunté seriamente esperando que dejara de mirarme.

-solo quería saber si de verdad estas bien- dejé de masticar mi comida para mirarlo a el.

Todavía su mirada la tenia puesta en mi, demostrando sus facciones algo de tristeza y preocupación.

Flashback

Estaba sentado en la mesa del patio trasero, en la casa de los Bokuto.

Comía algunos onigiris que me habían regalado mis vecinos ya que se habían enterado de que me encantaban. Los disfrutaba y saboreaba con cada mordida que daba.

Recién después de un rato sentía que me observaban detalladamente, y con la curiosidad de todo niño empecé a mirar en distintos lugares tratando de encontrar a quien me miraba tanto.

A lo lejos estaba aquel que me miraba tanto, de pie y cerca de la red de voleibol que siempre tenían ahí puesta y que a veces instalaban en mi casa. Estaba atontado mirándome con la boca semiabierta y con los ojos exageradamente abiertos.

Me habia dado una corriente extraña en la columna que subía, me habia incomodado su mirada. Fue tan raro todo que traté de ignorarlo durante todo el rato que intentaba comer el resto de mis onigiris con tranquilidad.

Fin flashback

-no te preocupes, estoy bien, enserio- le respondí luego de unos segundos de silencio- si no fuera por ti tal vez nunca hubiera llegado a casa.

-no es nada, puedes contar conmigo cuando estés en algún aprieto- sonrió, después de mucho tiempo habia sonreído y sabia de que no era una forzada, era completamente genuina.

Aun que bien, tan solo habia durando apenas unos pocos segundos, intentando volver a su rostro neutro y serio. Divise también como un poco de sudor estaba cayendo por su frente, estaba estático. Era chocante verlo así.

Y tal como su sonrisa se habia esfumado el también lo habia hecho como si intentara escapar de algo.

No entendía que habia pasado. Me tocaba la frente tratando de pensar y encajar mis dudas, pero, de inmediato sentí como mi mano se calentaba un poco. Tenia el rostro rojo?

Tome el celular y mire por el reflejo de la pantalla, si lo estaba. Pero por qué lo estaba?