50: Baile de Navidad 2/2

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Perdon por la demora, ahora estoy haciendo el trailer del quinto libro de Laila! 

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Despues de lanzarle la bebida a Malfoy fui a saludar a algunos compañeros, Fred y George me fueron a ver y a que les diera una explicación a lo que sus ojos fueron sometidos a ver, les explique que le había escupido cerveza de mantequilla a Draco en su caro traje y ellos se arrodillaron y me dijeron lo hermosa que me veía. De verdad me sentía como una princesa y que Fred y George me hicieran  una reverencia me daba una calidez, era hija única y mis primos eran algo odiosos, en especial Rolf, por lo que Fred y George eran unos hermanos mayores para mi.

—¡No nos vuelvas a asustar así Scamander! ¡Pensamos que te fuiste al lado oscuro!—Fred me gritó antes de irse a bailar de nuevo con su pareja enloquecidamente haciéndome reír un poco.

—Laila—escuche una voz demandante detrás de mi, suspire pesadamente y vi quien era; obviamente era la reconocible y odiosa voz de mi odiosa abuela Angelique; esta traía un vestido verde vomito de cuello alto, un sombrero morado con, para mi horror, la cabeza de un cuervo, un collar de piedras preciosas que de seguro valía mas que todas mis cosas y su cabello rubio platinado en un estirado moño, era bonita de cara, hermosa, pero por Morgana sus ropas eran horribles.

—Profesora—dije estiradamente—. Se ve como el demonio de mis pesadillas.

—¿Laila de donde sacaste ese vestido?—ella me preguntó viéndome de pies a cabeza—. Pense que no tenias nada que usar para el baile.

—¿No lo reconoces?—pregunté extrañada pero ella negó con la cabeza. Apreté mi cerveza de mantequilla con fuerza y la vi incrédula, abrí y luego cerré la boca, de verdad no era una broma, veía mi vestido como si nunca lo hubiera visto.

—¿Y? ¿De donde lo sacaste? ¿Por que no traes ese precioso vestido que te compre?

—¿No reconoces el vestido de novia de tu hija?

—¿Que?

—¿Ni si quiera fuiste a la boda de mis padres?! ¿Cual es tu problema? ¡Mi mamá era tu única hija! ¿Ves? ¡Es por esto que tu y yo jamas podremos ser cercanas!

—Laila Elizabeth....

—¿Y sabes mi horrible nombre? ¡Es Fleuphemia! ¡En honor a los padre de James Potter, porque ellos fueron mas amables con mi madre que tu con ella!—le recriminé—. Asi que perdón, si no quiero usar ese horrible vestido que me dio una horrenda mujer como tu.

La deje ahí dándome la vuelta, Morgana había desaparecido, no sabia porque, me senté en una silla, tratando de respirar tranquilamente. No me enojaba con mucha facilidad, pero esta mujer me sacaba los nervios, me daban ganas de solo lanzarle un embrujo o una maldición...hacerle daño como ella le hizo daño a mamá...

—¿Estas bien?

Abrí los ojos y no pude evitar sonreír, siempre sonreía cuando él estaba frente a mi, su presencia no sabia porque iluminaba los momentos tristes, tal vez por su gentil personalidad.

Laila Scamander y El Torneo De Los Tres MagosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora