Un portazo en la cara

938 62 3
                                    

Jim había sido siempre un chico muy dulce conmigo, llevábamos saliendo unos 8 meses y era todo un caballero, nunca imagine que fuera a hacerme algo así y todavía en otro país sabiendo que yo estoy ahí.

Estaba en shock, no asimilaba lo que pasaba, solo quería olvidar todo esto e ir a casa, pero recordé que me encontraba en otro puto país y no tenía dinero para un puto taxi, así que me fui caminando, no se hacía donde exactamente pero solo quería despejar los pensamientos que invadían mi mente de imágenes de Jim besándose con más rubias europeas.

Mientras caminaba con los brazos cruzados, lágrimas caían de mi rostro como el rió más caudaloso. Peor aun no sabía donde estaba, pero tampoco quería saberlo.

Estaba caminando por la acera derecha de la calle, por una avenida algo larga y no se veía nada  más que casas grandes y lujosas alrededor, entonces vi dos coches estacionados uno detrás de otro, el primero era negro y el segundo azul muy lujoso estacionados en ese lado de la acera pero con la vista al frente, solo pude ver que alguien apagaba las luces del auto, no preste atención, aun que luego pense: "¿Porque esos autos estan estacionados a este lado de la calle y viendo hacía este frente?", pues no me di cuenta en ese instante que en Inglaterra las vías de conducción son al revés que en America.

Tuve un poco de miedo, por que eran como las 11:45 de la noche y me encontraba sola en un país extranjero, sin dinero y sin saber donde estaba ni a donde ir. Levante la cabeza para ver un letrero en un poste que me indicaba el nombre de la calle o la zona donde me encontraba para buscar en mi GPS donde quedaría el hotel.

En ese instante que veo el letrero mientras caminaba decía "Kingston Upon Thames" y casi me da un ataque cardíaco, y me tomo tiempo razonar que me encontraba en la zona donde supuesta mente vive Tom Holland y no podía pensar con claridad, aunque en la vida real solo pasaron segundos después de que vi ese letrero, por el pánico y la borrachera deje caer mi celular.

- Aah demonios. -Dije mientras me agachaba para recogerlo. Y lo siguiente que vi, fue una luz rodeada de pajaritos volando a mi alrededor, no entendía que había pasado pero desperté en el suelo viendo una silueta borrosa que me hablaba.

- Auch ¿Q-que pasó?. -Decía confundida mientras me frotaba la frente con la mano y alguien me ayudaba a levantarme.

Por un momento creía que todo había sido una pesadilla nada más y estaba despertando y que nada de lo que había vivido las ultimas dos horas era real y que Jim no me había sido infiel, creía que era Jim o Matt el que trataba de incorporarme del suelo, pero no, era alguien más.

 Tarde en reconocer unos rizos perfectos y castaños cayendo sobre su pálido rostro, con unos ojos color canela pasión y unos labios apretados y delgados que encajaban tan bien para una sonrisa que se me hacía familiar.

- Ho-hola ¿te encuentras bien?, en serio lo siento, no te vi pasar. -Decía una angelical voz con un acento británico tan tierno. 

- Am Am ¿Que paso? - Dije sin estar completamente segura de quien era, pero vi un auto negro justo a mi lado y comprendí algo del contexto.

-¿Nadie te enseño a estacionar del lado correcto? - Añadí a mi adolorido despertar.

- Pues accidentalmente te golpee con la puerta de mi auto, no vi que te agachaste y abrí la puerta demasiado rápido, por favor perdóname. Además estoy bien estacionado, ¿De que hablas?

Y entendí que las malditas vías estaban al revés y me sentí tonta.

Cuando ya pude visualizar de quien se trataba esa voz tan dulce, sentí una de sus manos en mi cintura mientras estaba sentada, llevaba puesta un crop top y esa persona tenía las manos muy frías pero se sentía tan bien.

En ese momento me quede paralizada al ver el rostro de ese hombre, no sabía como reaccionar o que hacer.

- Perdóname por lo que haré.- dijo ese sujeto.

-De que hablas...- y en ese momento sentí como mi celular salía volando de mis manos y ese sujeto se subió increíblemente rápido a su auto y partía desesperadamente.

Hey.... que te pasa. - Grite apenas, ya que seguía algo confundida por el golpe. Efectivamente me habían robado el celular y no se porque me hice la patética ilusión de que ese podría ser Tom... "a que tonta soy" dije para mi misma.

Seguía sentada en el suelo hasta que vi a alguien más acercarse del auto que estaba estacionado detrás del auto del ladrón. Me dio mucho miedo, ya no sabía que esperar, sabía que podía pasarme algo así caminando sola a estas horas de la noche. Esta a punto de gritar del pánico, hasta que esa misteriosa persona hablo.

- ¿Te encuentras bien? ¿Vives por acá?- Dijo con un acento británico muy elegante.  

- Aah si, si lo siento no soy de por aqu... ay por Dios!!!! - Dije sin poder decir algo más. No sabía si era la cerveza que bebí toda la noche o que.

Esa persona misteriosa avanzó un poco más y pude verle el rostro gracias al poste de luz que había a un lado.

- T-tu, tu, t-tu e-eres. - Demonios no podía articular ni una sola palabra.

- Eres Tom Holland. - Dije extremadamente impactada.

- Así que me conoces. - Dijo el con una sonrisa en el rostro. 

Era exquisitamente hermoso y adorable y yo seguía en shock, creía que era un sueño, un maldito sueño del que pronto despertaría.

- No se si estoy muy borracha o juraría que me dijiste que eres Tom Holland. - Dije muy apenada y algo atontada.

- Descuida, no pasa nada, vi lo que hizo ese sujeto, creí que iba a ayudarte y no sabía que iba a robarte, y si, soy Tom Holland, pero dime Tom. - Dijo el apuesto muchacho mientras me ayudaba a ponerme de pie.

En mi interior me estaba muriendo de la felicidad y del asombro, no podía creer que estaba siendo sujetada por Thomas Stanley Holland, y solo tenía ganas de gritar por todo el vecindario que lo había conocido y que si me podía tomar una foto con el (algo cliche sabiendo que ya no tenía celular) y hablarle de todo y preguntarle un millón de cosas y decirle que lo admiraba y cosas así, pero por alguna razón, la pensé mejor y decidí actuar de forma madura y seria. 

No sabía porque, pero mi corazón me dijo "Es solo un ser humano más en el planeta, no lo pongas en un pedestal o te tratara de otra manera" y puede que haya tenido razón, ya que a ninguna celebridad le debe gustar que fanáticas lo vengan a recibir a la puerta de su casa todas alocadas por conocerlo. Debo admitir que yo sería una de esas fanáticas, pero bueno, ese no es el punto.

Modo serio "ON"

- Ahh no te preocupes no pasa nada. -Dije agitando mi cabeza como si no importara, pero me dolió mucho el golpe que me di con la puerta y me tambalee un poco y me agarre la cabeza en signo de dolor.

- Oh no puede ser, te duele mucho. - Y se acerco hacía mi mientras ponía una mano en mi cuello y la otra en la cabeza. Podía sentir el aroma de su perfume y era tan delicioso. De pronto sentí su respiración rosando mi cuello mientras el trataba de ver si tenía alguna herida en la frente.

- No, no, estoy bien, no te preocupes, solo fue un pequeño golpe. - Dije con mucho dolor en la cara.

- Pues te desmayaste. -Dijo con una sonrisa en la cara.

- Déjame ponerte un poco de hielo, mi casa esta a unas calles de acá.

- No, no quiero molestarte, estaré bien. -Dije esperando que no se vaya.

- No, en serio, es lo menos que puedo hacer, debí haber salido a ayudarte. - Dijo mientras ponía una mano en mi espalda y la otra la apuntaba hacía el coche para que me subiera.

- E-esta bien, acepto el hielo. - Dije mientras le sonreía.

- Por cierto ¿Cuál es tu nombre?

- Me llamo T/N

- T/N, que hermoso nombre. 


¿Niño Bueno O Niño Malo? T.H.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora