Estas advertida

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- Bien... no voy a negar que pasaste un buen momento con Tom. - Sarah se limpiaba los labios con una servilleta.

- Fue... muy mágico, no creí que iba a quererlo tanto. - Sonreía mientras comía mi pudín con cara de niña.

- Pero la pregunta del millón es...

- No se que pasará, Sarah. Tom me dijo que el hablará con sus abogados, pero no se que deba hacer yo ahora.

- Relájate T/N estoy segura que Tom encontrará una salida.

Seguí comiendo mi pudín mientras pensaba en todos los momentos maravillosos que pase con Tom. Estaba feliz. Pero mi rostro cambio de repente y mis ojos comenzaron a soltar lágrimas.

- ¿Qué pasa T/N?- Sarah se estaba preocupada.

- Tengo miedo de perderlo. - Me limpiaba las lágrimas con las manos. - No se que pasará con esto o cuando se termine. ¿Qué pasará cuando tengamos que volver a Atlanta? No quiero que esto sea solo un romance de verano. - Sarah se inclino y me dio un gran abrazo.

- Hey T/N tranquila. Estoy segura que Tom no te dejara tan fácil. Demostró que eres muy importante para el. Encontrará una solución para todo esto.

- Gracias Sarah. Solo quiero despejar mi mente de todo esto y no tener que pensar en asuntos legales ni extorsión cibernética por unos momentos. 

- Hoy es nuestro día nena. Vamos a relajarnos juntas.

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Al día siguiente

Ciudad de Versalles - 4:37 pm

A pocos días de que este viaje se acabe, decidimos ir a un pueblo muy cerca de París y nos hospedamos en una pequeña casita antigua con 2 dormitorios. Algo sencillo, la ciudad es muy bonita y el palacio de Versalles es impresionante. Me encuentro admirando unas pinturas del palacio en un gran salón. La decoración es exquisita.

Vi que Sarah y Matt entraban a una habitación del palacio y quedaban fascinados. Los oí comentar sobre los objetos y comenzaban a reírse, creo que la pasan muy bien.

- ¿Cómo va tu tobillo? - Me sobresalte y me di la vuelta.

- ¿Qué? - Ah, era Jim.

- Ah, mucho mejor, no me duele casi nada. - Estaba algo nerviosa.

- Es todo muy bonito ¿Verdad? - La voz de Jim era seca y fría.

- Si, si esta todo muy hermoso. Los jardines son esplendidos.

- Déjame tomarle una fotografía a estos cuadros. 

Me ponía muy tensa cada vez que veía que Jim usaba su celular y peor aun cuando sacaba fotografías.

- ¡Creo que no puedes sacar fotografías! - Grite levemente del pánico.

- Mmm, no lo se, de todas formas, nadie esta mirando. - Tomo su teléfono y tomo un par de fotos.

Después de sacar las fotos tomo su celular y comenzó a revisarlas. Sin darme cuenta empecé a morder mi dedo y la uña de los nervios mientras disimulaba que veía otros cuadros. Cuando volteo note que estábamos casi solos en esa sala.

- No creo que debas usar tu teléfono, Jim. - Tenía que evitar que siga deslizando las fotografías.

- ¿Por que T/N? - Se volteó y me vio directo a los ojos.

- Porque... tal vez esta p-prohibido y nos llamaran la atención.

- No veo a nadie de seguridad por aquí. - Jim se dio la vuelta como si buscara con la mirada a los guardias.

- Solo por si a caso. - Seguía mordiendo mi dedo.

- No tienes porque estar tan nerviosa T/N. - Jim seguía revisando las fotos en su celular.

- ¿Yo? ¿Nerviosa? n-no, no lo estoy Jim.

- Estas actuando algo raro. - Jim comenzó a verme de reojo mientras usaba su celular.

- No, no para nada, todo esta bien. - Comencé a alejarme como si fuera en busca de Sarah o de Matt.

- Ya se que borraste las fotos. 

Por un minuto mi cerebro se reinició y creyó haber escuchado mal.

- ¿Qué? - Mi voz era temblorosa.

- Ya se que borraste las fotografías T/N. - Jim veía las pinturas de las paredes. - Las de la perra de tu noviecito y tu. 

Mi cuerpo comenzó a temblar y no salían palabras de mi boca. No sabía ni que responder a eso.

- Jim. y-yo...

- Tranquila T/N, también se que tu puto tobillo esta bien y que pasaste toda la mañana de ayer con ese imbécil.

Mis ojos se llenaron de lágrimas.

- Creí que eras más lista T/N, no importa que las hayas eliminado, tengo copias. - Jim esbozó una sonrisa.

- ¿Qué es lo que quieres Jim? - Mi voz era fría y ronca.

- Esto es lo que va a pasar T/N. Tu no dirás ni hablaras de esto con tu noviecito. No quiero ni que le digas a Sarah... Yo publicaré esas fotos cuando me de la gana y no quiero que adviertas a nadie, de lo contrario las pagaras, y no solo tu, también el idiota de Tom. 

- Podre tener mucho dinero T/N, pero también soy muy listo. Cualquier llamada o mensaje de tu teléfono o el de Sarah lo tengo controlado. Nada de redes sociales o internet, yo lo sabré. Y me encargaré de acabar con Tom Holland por quitarme lo que es mío.

- ¿Por que haces esto Jim? No soy de tu propiedad. - Las lágrimas comenzaron a salir lentamente.

- Porque puedo y porque vas a ser mía... y porque... no te queda alternativa. - Jim extendió su teléfono y me mostro una fotografía.

Era la habitación de Jim y Matt en la casita del pueblo y sobre la cama hay un arma.

- Estas advertida T/N, lastimosamente no pude traerla hoy por la seguridad que hay en este palacio. Pero si tratas de comunicarte de cualquiera manera con Tom... los asesinaré a ambos.  

¿Niño Bueno O Niño Malo? T.H.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora