Anakin despertó temprano por la mañana, observando a Padme dormir abrazada a él.
Sonrió sintiendo una calidez en su pecho que nunca había sentido. Recordando lo que había sucedido, acarició los cabellos de Padme y sonrió al ver el collar que él le había obsequiado en su cuello.
¿Qué ocurriría con ellos ahora? Se descubrió a si mismo pensando que no sería capaz de dejarla partir si ella le decía que no quería tener ninguna relación con él y que eso era un error.
Padme comenzó a despertar, sintiendo suaves caricias en su cabello, abrió sus ojos y se encontró con una mirada bastante conocida. Se sonrojó hasta la raíz del pelo al darse cuenta de que estaba completamente desnuda, miro un poco hacia abajo y se sonrojó aún más dándose cuenta que él también. Aunque, luego de la vista de su jefe desnudo a su lado, sentía que su vida había valido la pena, y recordando lo de la noche anterior, podía definirse como una mujer feliz.
¿Pero que pasaría si él no quería tener nada con ella? Le partiría el corazón escucharlo y lo miro algo confundida. Pero cuando él la beso con dulzura, ambos comprobaron que lo que sentían era real, y que lo que había ocurrido la noche anterior no era un error.
- ¿Dormiste bien?- preguntó Anakin abrazándola contra su cuerpo
- Mejor que en años- sonrió ella pegándose aún más a su pecho.
Padme notó las extrañas cicatrices en su pecho y las acaricio con sus dedos. Había bastantes de ella y se estremeció. ¿Qué le había ocurrido?
- Una granada en medio del campo de batalla, mi compañero, él no sobrevivió- dijo Anakin y Padme notó que le costaba recordar.
- Lo siento- dijo ella tocando aquellas cicatrices
- No importa, es pasado- dijo él sonriendo a la bella mujer a su lado.
- Oh dios- dijo Padme sentándose de golpe
- ¿Ocurre algo?- preguntó Anakin confundido
- Es pascua Ani- dijo Padme y Anakin sonrió
- ¿Quieres ir a buscar huevos de chocolate?- preguntó arqueando una ceja ante su entusiasmo
- Oh no seas gracioso- dijo Padme con sarcasmo mientras se ponía de pie.
- Ey, es en serio ¿Me abandonarás esta mañana?- preguntó Anakin
- Si Dr. Skywalker voy a abandonarlo porque tengo un dulce regalo para su hijo y mi hija, y no quisiera que despertaran sin encontrarlos- dijo ella y Anakin rodó los ojos.
Padme se dirigió hacia el baño, pero él se levantó justo al mismo tiempo.
- ¿Es broma?- se rió ella divertida cuando él la cargó
- ¿Le parece una broma Dra. Naberrie?- dijo él mientras entraba al baño con ella y abría la ducha.
- Bueno, no me opondré- dijo ella cuando el agua caliente cayó sobre ellos y ella sintió como todos sus músculos se relajaban, eso y las manos de Anakin pasando por su cuerpo de forma tan dulce, de forma tan sexy, que no salieron de la ducha hasta largos minutos después.
Padme y Anakin observaban la enorme bolsa de chocolates y Padme sonrió enternecida cuando Anakin mostró que este año no había sido un padre duro y también había comprado huevos de chocolate.
- Bien, tenemos un problema, yo no tengo jardín y tú si- dijo Anakin y Padme pensó decir algo- Y no volverás a tu casa, al menos hasta que sea seguro- dijo él y ella suspiro, con él era imposible discutir.
- ¿Qué tal esconderlos por toda tu casa?- preguntó Padme y el asintió.
Eran las 9 de la mañana y nadie despertaba aún, por lo que corrieron por toda la casa entre risas ahogadas escondiendo los huevos de chocolate.
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Almas Gemelas
FanfictionLa cirujana cardiovascular Padme Naberrie, ha trabajado duro por años para conseguir el puesto que tanto ha anhelado. Pero la vida no es justa para una mujer soltera madre de una hija de cinco años. ¿Qué pasará cuando Leia, su hija comience su nueva...