Almas Gemelas

Capítulo XXIX

Dos semanas después

La relación de Padme y Anakin era cada vez mejor, finalmente Padme había terminado aceptando quedarse un poco más en casa de Anakin, luego de toda la insistencia de él, que no fue para nada poca. Claramente Padme dejó en claro que no aceptaría un no por respuesta referente a compartir los gastos, y Anakin a regañadientes había terminado aceptando. 

Entre Shmi y los niños, no se sabía exactamente quienes estaban más felices por la noticia, si de Shmi dependiera, Padme nunca se iría. Es decir, eran el uno para el otro, retrasar las cosas solo los haría perder tiempo valioso de sus vidas. 

Ahsoka había mantenido su trabajo en el hospital, y Mace Windu en persona la había felicitado por su excelente labor en la emergencia. Y por su excelente procedimiento salvando la vida de Echo.

Rex por su parte, estaba más tranquilo de saber que su novia había mantenido su trabajo y que sus dos hermanos Echo y Fives, comenzaban la que sería una lenta recuperación.

Pronto deberían enterarse de que tenía novia y de que ella estaba embarazada, pero por ahora, lo mantendrían en secreto, sus hermanos aún estaban muy convalecientes. Aunque se habían hecho bastante amigos de la señora Lina, que les leía cuentos y a veces se quedaba con ellos en la sala.  Rex a veces se preguntaba, porque dos hombres adultos, querían que la señora Lina les leyera cuentos. Pero honestamente, prefería no preguntar.

Luke y Leia se quedaban con Shmi cuando sus padres no podían cuidarlos, se llevaban bastante bien juntos, era casi como si fueran hermanos. Eso aterraba tanto como encantaba a sus padres, ellos sabían que lo que estaban haciendo era un paso enorme en su relación, una relación que recién comenzaba, estaban aterrados de que algo saliera mal, pero ¿Por qué algo debería salir mal? Luego de la primera etapa en que se odiaban, aceptar sus diferencias fue bastante fácil, y ahora eran un equipo increíble, y eso se notaba incluso en el hospital.

Shmi estaba más que feliz de cuidar a los niños, y Padme apenas podía creer lo bien que Leia se llevaba con ella, Satine y Obi- Wan les recordaban constantemente que podían dejar a los niños en su casa cuando quisieran, aunque estaban muy felices de que los niños estuvieran juntos. Satine y Obi- Wan también guardaban esperanzas de que la relación de Anakin y Padme fuera mucho más allá, que ellos se dieran cuenta que eran el uno para el otro y formaran una familia, aunque sabían que todo necesitaba su tiempo. 

Sin embargo, lo que llevaba a Obi- Wan ese día al hospital de Coruscant no era una visita a sus amigos, era más bien la salud de Satine, que no se había estado sintiendo bien hace casi una semana.

- Ella estará bien- dijo Padme a Obi- Wan mientras atendía a Satine en su horario de descanso.

No era  lo más ético, tampoco lo adecuado, pero no había nada de malo en atender a una amiga fuera del horario de trabajo, nadie podía reclamar eso. Aunque eso fue lo que dijeron a Obi- Wan, y Anakin confirmó su mentira, la verdad es que Padme estaba muy preocupada por Satine, sabía lo que sus malestares podían significar, y también sabía el posible resultado de eso. Fue esa la razón que la llevó a atender a la rubia rápidamente, sin llamar mucho la atención. No quería crear falsas esperanzas en el matrimonio, hasta no estar totalmente segura de los pros y los contras, y encontrar la manera adecuada de resolverlos.

- ¿Cuántos días que presentas mareos?- preguntó Padme a Satine anotando en la ficha clínica

- Dos semanas- dijo Satine, que sabía el tipo de preguntas que hacia Padme, sin embargo estaba aterrada, ella sabía lo que significaba, lo deseaba con toda su alma, pero no sabía si podría soportar otra respuesta negativa.

- ¿Vómitos? ¿Cansancio? ¿Pérdidas de conciencia?

- Cansancio, vómitos matutinos, no me he desmayado- dijo Satine y Padme vio que sus manos comenzaban a temblar.