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Los exámenes ya habían pasado, todo había vuelto a la normalidad. Era viernes y todos ya estaban más tranquilos. A la semana siguiente, el lunes se entregarían las calificaciones del examen, al siguiente día serían las semestrales y las anuales, el viernes sería firma de boletas. Una semana muy estresante para todos, pronto pasaría a tercer grado y cumpliría 17 años, se sentía orgulloso.

Aunque también un poco triste, no había hablado con Jungkook desde hace una semana y lo extraña mucho, ni siquiera un "buenas noches", un "buenos días" o un "cuídate" como acostumbraba a hacerlo. Nada.

Quería darle la buena noticia a su hyung por lo que después de clases iría al departamento de Jungkook para pasar un rato con el. Ahora estaba en receso, tenia jugó de naranja en sus manos y caminaba hacia la bolita de chicos del tercer grado que reía ampliamente, estaba nervioso y mordía el interior de su mejilla. Una vez que estuvo cerca, llamó la atención de uno de ellos.

-Uhm... H-hola, hyung.- dijo nervioso, tocando con su dedo índice la espalda ancha del mayor, quien giró sobre sus talones y le sonrió ampliamente con sorpresa, como siempre lo hacía.

-Oh, Hola Tae, ¿que pasa?- saludo alegre, mientras lo miraba directo a los ojos y Taehyung los desviaba avergonzado.

-Y-yo, quería darte las gracias por llevarnos a casa esa madrugada, no tenías por que hacerlo.- Taehyung se reverencio frente al ahora pelinegro quien le sonrió ampliamente.

Una vez que Taehyung se reincorporó Hoseok se acercó al menor y lo tomó de las mejillas acariciandolas con suavidad.

-Oh, Taehyungie, tan tierno.

-Basta hyung, me haces cosquillas.- retiro rápidamente las manos del mayor con una risilla nerviosa y le sonrió ampliamente.

-No te preocupes por eso, fue un placer.- se encogió de hombros.

-¿Como puedo pagarte?

-No hac-....- se callo de inmediato, pensó en silencio por unos cortos segundos y luego sonrió ampliamente. -¿Sabes?, si hay algo.

[...]

-¿Vas a salir? Yo debo ir con tu abuela a tomar el té.- dijo su madre entrando por la puerta de la habitación del menor al encontrar a su hijo arreglándose frente al espejo.

-Si, tendré una cita.- dijo acomodando su cabello y viéndola a través del reflejo del espejo con una pequeña sonrisa.

-¿U-una cita?- dijo sorprendida, hace mucho que no sabía acerca de la vida amorosa de su hijo.

-Si, tengo que irme en 10 minutos, ¿me llevas al centro?- se giró sobre sus talones y le sonrió a su madre.

-Si, claro.- ambos caminaron hacia el pasillo del segundo piso y comenzaron abajar las escaleras. -¿Con quien será, cariño?- pregunto curiosa.

-Con Hoseok hyung.- dijo alegre.

-¿El chico lindo de la sonrisa brillante?

-Ese.- caminaron a la puerta y salieron de la casa asegurándose de que quedara bien cerrada y subieron an al auto.

-¿No que ya lo habías mandado a volar?

-Siempre hay segundas oportunidades.- dijo con una pequeña sonrisa, mirándola con serenidad mientras el auto arrancaba y se colocaba el cinturón de seguridad.

-Si, supongo.

[...]

-Gracias por venir, te ves precioso.- dijo Hoseok frente al muchacho bien vestido llamado Taehyung.

๑  Hyung~  ๑ ・ kookv ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora