El Zorro y el Jabalí /-Inosuke x Male Reader-

52. Hasta que salga el sol I / II

-... listo, ¿No te aprieta demasiado?

Inosuke negó con la cabeza, los ojos aún le lloraban abundantemente e incluso seguía moqueando un poco, pero al menos ya me permitía verlo a la cara sin intentar ocultar su tristeza. Tal vez el que al fin tenga de nuevo entre sus manos su máscara de jabalí lo animó un poco.

Terminé de ajustar las vendas alrededor de sus heridas y acaricié sus mejillas húmedas para después depositar varios pequeños besos en su cara.

Él se quedó bastante quieto mientras lo hacía, pero cuando finalmente me alejé para limpiar sus nuevas lágrimas con la manga de mi haori me pareció escuchar un pequeño "gracias" de su parte.

- Kanao, ¿Ya puedes continuar?

Voltee a ver a la chica a mis espaldas, ella también llevaba rato llorando, y ciertamente no la culpo. La linda aprendiz de pilar asintió y se secó los ojos con la manga, algo que no sirvió de mucho ya que de inmediato se le humedecieron de nuevo. Su ojo izquierdo tenía un color bastante raro, y de hecho hace un momento había llorado sangre por ese mismo ojo, eso al parecer fue resultado de una técnica que usó para evitar los ataques de Douma al final.

No la dejó totalmente ciega, pero aún así era una gran pérdida.

- Bien, será mejor que nos movamos, ¿No creen?

Ambos dieron una débil respuesta afirmativa. Kanao ya estaba de pie, esperándonos, pero ya que Inosuke aún no parecía muy dispuesto tuve que cargarlo en mi espalda, en verdad debía sentirse mal (ya sea de manera emocional, física o ambas) ya que apenas si opuso resistencia cuando hice eso.

Salimos de la destrozada habitación y comenzamos a caminar a través de los pasillos. A pesar de que estábamos preocupados por el resto los tres estábamos lo suficientemente heridos (yo era el que estaba en mejor estado y aún así mi muñeca se sentía horrible) como para aceptar que al menos por unos minutos tendríamos que intentar mantenernos apartados de los demonios más fuertes.

- Oh, ¡Hayate!

Mi cuervo parecía estar dando vueltas por todo el lugar, ya que nos lo topamos después de cruzar por una esquina.
Le pregunté por Tanjiro y Giyuu, al parecer ninguno de los dos tenía heridas demasiado grave por lo que fue un alivio para mí. También me dió a entender que el heredero del señor Oyakata (su único hijo varón, que al parecer fue el que estuvo presente en el exámen de cazador) junto con sus dos hermanas que seguían con vida estaban supervisando toda la operación, usando a los cuervos como sus ojos y como medio de comunicación con los cazadores.

Supongo que eso explicaba el papel con aquel dibujo extraño que mi cuervo llevaba en el pecho.

- Uh, eso explica bastante..., De acuerdo, ten cuidado

Mi cuervo grazno y me picoteo cariñosamente la oreja antes de alzar el vuelo y dar un par de vueltas mientras graznaba de nuevo.

Lo tomé como una señal de que quería que lo siguiera así que tanto Kanao como yo comenzamos a acelerar el paso al seguirlo.
A pesar de la situación a Inosuke parecía comenzar a divertirle ir en mi espalda mientras yo corría, lo cuál de cierta forma me hizo relajarme un poco.

-Uh, ugh...me duele todo, ¡Ahh!

A pesar de que alcancé a escuchar esa voz tan familiar no pude frenar a tiempo y al cruzar la esquina del pasillo terminamos chocando con Zenitsu, quien se veía tremendamente cansado y herido, aunque eso no quitaba que seguía viéndose algo gracioso siendo ayudado por otro cazador mientras lloriqueaba.