Capítulo 18. T2

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NARRADOR.

Después de los invitados, Thomas fue el primero en llegar a la Iglesia, junto a sus padrinos y los Jinetes. Saludó a los invitados y, una vez que el novio y los padrinos entraron, todos los invitados lo hicieron también. Excepto Dany, quien se quedaría a esperar a Rachel, para entregarla en el altar.

Un par de minutos después, el auto donde Rachel, sus damas y su amiga Andrea venían, estacionó frente a la Iglesia. 

La primera en bajar fue Andrea, quien entró directamente a la Iglesia, no sin antes saludar a Dany. Después bajaron las damas de honor, quienes fueron entrando lentamente y en fila a la Iglesia. Y finalmente, bajó Rachel, luciendo tan hermosa como siempre. Dany se acercó a ella de inmediato y la abrazó.

(Reproduzcan la canción en multimedia)

Atlas: Luces hermosa. Harás llorar a muchos -sonrío.

Rachel: Estoy muy nerviosa, aunque no se la razón. Esto es lo que siempre he querido.

Atlas: Es normal, creo. ¿Entramos? -dijo, a la vez que le ofrecía se brazo a Rachel.

Ella asintió con una sonrisa, entrelazó su brazo al de su hermano y ambos entraron a la Iglesia.

En cuanto entraron, la música comenzó a sonar y todos se pusieron de pie. En cuanto Rachel entró, en el rostro de Thomas se dibujó una enorme sonrisa y un par de lágrimas amenazaban con salir.

Jack también sonrío de oreja a oreja cuando vio a Rachel en ese precioso vestido de novia. Sus ojos se cristalizaron por los lágrimas, pero las reprimió lo mejor que pudo. No debía llorar, no quería que Rachel lo viera así.

Caminaron lentamente por el pasillo, recibiendo sonrisas y miradas de felicidad de los invitados. Cuando terminaron de recorrer el pasillo y llegaron junto a Thomas, Dany besó la mejilla de Rachel y abrazó a Thomas, para después tomar su lugar con los demás padrinos.

Rachel le dirigió una linda sonrisa a Thomas, que se le devolvió. Se tomaron de las manos y miraron al padre frente a ellos.

***: Estamos aquí reunidos para ser testigos de la unión en matrimonio de estos dos jóvenes -hubo un corto discurso sobre el matrimonio y luego siguió- Ahora, los votos.

Thomas: Yo, Thomas, te quiero a ti como mi legítima esposa y me entrego a ti. Prometo serte fiel en las alegrías y en las penas, en la salud y en la enfermedad, todos los días de mi vida.

Rachel: Yo, Rachel, te quiero a ti como legítimo esposo y me entrego a ti. Prometo serte fiel en las alegrías y en las penas, en la salud y en la enfermedad, todos los días de mi vida.

***: Y ahora, es el momento de que entreguen los anillos.

Thomas se giró para ver a Dylan, quien sacó el pequeño anillo de su bolsillo y se lo entregó.

Thomas: Recibe esta alianza en señal de mi amor y fidelidad a ti -dijo, mientras colocaba el anillo en la mano de Rachel.

Rachel, de igual manera, se giró para ver a Ava, quien le dio el anillo.

Rachel: Recibe esta alianza en señal de mi amor y fidelidad a ti -e imitó la acción de Thomas.

Ambos se miraron, con una enorme sonrisa en el rostro, y luego dirigieron su vista hacia el padre.

***: Bien. Ahora, si alguien se opone a esta unión, que hable ahora o calle para siempre.

El silenció reinó en el lugar. Algo dentro de Jack decía que esa era su última oportunidad de poder ser feliz al lado de Rachel, pero había otro "algo" que lo hacía entrar en razón. Jack sabía que no era lo correcto, sabía que Rachel era feliz con Thomas y no quería arruinarle eso. Como se había repetido una y otra vez desde que Rachel volvió: "Si ella es feliz, yo también lo seré".

Después de unos segundo de silencio, el padre continúo.

***: Ahora, por el poder que me es conferido y con mucha alegría, los declaro marido y mujer. Ya puedes besar a la novia -le dijo a Thomas.

Rachel le dio su ramo a Ava y envolvió sus brazos alrededor del cuello de Thomas. Él la tomó por la cintura, acercándola a su cuerpo, y unió sus labios en un lento y tierno beso. Su primer beso como marido y mujer.

La Iglesia estalló en gritos y aplausos. Todos llenos de alegría al ver a la feliz pareja recién casada. Bueno, casi todos. Aunque Jack tenía una sonrisa en el rostro y aplaudía enérgicamente, por dentro había terminado de romperse.

Cuando los recién casados se separaron, miraron a sus invitados y les dedicaron una linda sonrisa. La mirada de Rachel se cruzó con la de Jack, ambos se sonrieron. Rachel estaba muy agradecida con él, sabía que esto le dolía y, a pesar de eso, él estaba ahí.

Thomas y Rachel se tomaron de las manos y salieron de la Iglesia. Tan felices como nunca se habían sentido.


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N/A

Por favor no me odien por no publicar el lunes :'(

El sábado no tuve muchas ganas de escribir (por unos asuntos emocionales) y el domingo no tuve mi computadora. 

Espero les guste el capítulo y nos vemos el lunes.

Los amo.

Por cierto, hoy está de cumpleaños mi bebé, Dylan O'Brien. ¡Felices 29! 

 ¡Felices 29! 

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La Nueva Jinete (Jack & Rachel) TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora