2.Primer día

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7:00
La alarma de mi móvil me ha despertado, me da mucho palo levantarme, estiro mis articulaciones haciendo crujir mi espalda, un bostezo sale de mi boca sin querer. Me he lavado  la cara y me he cepillado los dientes para acabar de despertarme, tengo una cara horrible. Para mi primer día he decidido ponerme una camisa de One direction y unos jeans azules de hace dos años, la camisa me queda un poco grande ya que era de cuando estaba un poco más rellenita.
Bajo las escaleras aún medio dormida para prepararme  unas tostadas, mi padre, Hector, está en el sofá con un café y leyendo el diario.

-¡Buenos días cielo!- Una sonrisa enorme se le ha dibujado en la cara-¿Preparada para tu primer día?

Sí...supongo. - Miento, no quiero preocuparlo ya tiene suficiente con lo suyo.- Al salir del insti voy a ver a Lía, ¿Quieres venirte conmigo?- He puesto cara de angelito.

-Lo siento, ya sabes que tengo mucho trabajo en el bar- Ha puesto otra excusa más- Iré cuando pueda, lo prometo.

¿Por qué te niegas papá? ¿Qué es lo que te asusta?

Me he quedado con las ganas de preguntar pero no quiero empezar con mal día así que simplemente asiento y le muestro una sonrisa amable .

Me como las tostadas a toda prisa y luego me cepillo el pelo, el año pasado siempre lo llevaba recogido pero este año creo que paso. Me pongo mis gafas metálicas doradas que combinan tan bien con mi piel morena y mis ojos café.

Casi pierdo el bus, no me gusta correr y tampoco llegar tarde, en general soy muy perfeccionista y cabezota con todo, una de mis cualidades/defectos, por suerte lo he tomado a tiempo. Me ha dejado a dos manzanas del insti. He ido andando escuchando mi música.

Aquí estamos de nuevo, otro año más.

Suspiro con desánimo antes de entrar por las puertas principales, todo el mundo se ha quedado callado al verme entrar. Una sensación de vergüenza ha entrado directa a mi corazón, todos me están mirando, odio estas situaciones aunque debería haberlo imaginado, al fin y al cabo, he cambiado mucho desde la última vez que me vió todo el mundo.
Empiezo a caminar ignorando la mirada de toda la gente, estoy tratando de encontrar mis amigas con la mirada pero no las veo por ningún sitio.

Layla, respira, todo está bien, todo está bien.

-¡Layla! Estamos aquí.-Siento un gran alivio  al escuchar la voz de Ella, veo una mano levantada saludando, están mis amigas apoyadas en las taquillas sonriéndome alegres.

Me acerco hacia ellas y antes de que pueda decir nada me dan abrazo grupal muy fuerte.

-Chicas...me quedo sin oxígeno.- hago un gesto de asfixia y me sueltan entre carcajadas.- Me alegro mucho de veros, os he echado mucho de menos.

Ella y Jessa me miran de arriba a abajo con la boca muy abierta, sus ojos se abren como platos, de repente noto unas manos tirando hacía arriba mi camisa. Antes de que Ella pueda hacer algo más la empujo contra las taquillas con un grito y le lanzo una mirada asesina.

-¡No vuelvas a hacer eso en tu vida!- Miro alrededor para ver si alguien nos ha visto, espero que no. Puedo ver como Jessa se ríe hasta ponerse roja, al ser tan blanca no le cuesta mucho.

Ella es rubia con ojos azules de pelo corto y Jessa es negra con una piel envidiable, las dos son muy hermosas.

Ella se incorpora mirando que su atuendo esté perfecto- La próxima vez me llevas contigo a Italia a ver si así me pongo igual de buena que tú.-me guiña un ojo.

Even YouDonde viven las historias. Descúbrelo ahora