𝐼𝑋

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Unos golpes en mi puerta hicieron que me parara rápido de mi lugar, no hacia falta gritar quien era, ya sabía que Jin vendría hoy, y eran las dos de la tarde en punto.

Al abrir la puerta lo vi, traía una sudadera blanca con gorro, la cual que llevaba puesta, el frío era horrible alla afuera, unos pantalones deportivos negros y unos zapatos deportivos del mismo color, en cada una de sus manos traía una bolsa de plástico con todas las cosas se necesitarían para pasar juntos el día de hoy, me hice a un lado para que pasara, una vez que lo hizo cerré la puerta y seguí su camino, iba a al comedor para dejar las bolsas sobre este y volteó a verme, su rostro serio ya era una costumbre.

- Hola, lamento interrumpir tu fin de semana, pero quería verte, hace tiempo que no nos reuníamos. -

- Hola, y no te preocupes por eso, en realidad los únicos planes que tenia eran dormir todo el día, comer y ver series, creo que tu visita es mucho mejor que todo eso -

Pude ver como un casi invisible color carmín apareció en sus mejillas, él sólo asintió y camino rápido hasta el sofá, sentándose en una esquina, reí bajito al verlo así, era tan tierno. Seguí sus pasos, sentandome hasta el otro extremo del sofá y apareció un silencio, no era incomodo, al contrario, era agradable.

- ¿Qué quieres hacer primero? - Jin había sido el primero en hablar, giré mi vista hacia él mientras pensaba que sería bueno para comenzar.

- Hmm, bueno... ¿Ya comiste? - él negó - ¿Te parece si primero comemos?, me está comenzando a dar hambre y supongo que a ti también - volvió a asentir, sacando su celular de las bolsas de su sudadera.

- ¿Qué quieres pedir?, ¿Te gustaría pizza o... -

- ¿De qué estás hablando?, no vamos a pedir nada - me miro extrañado, su cabeza se ladeo inconscientemente hacia un costado, demasiado adorable.

- ¿Entonces que?... -

- Yo voy a cocinar - ahora su expresión confusa se había convertido en una de sorpresa - Oye, el que esté todo el día ocupada no quiere decir que no sepa hacerlo, me ofendes... - coloqué ambas manos en mi pecho, fingiendo estr dolida, él solo río.

- Perdón pero, realmente me sorprende que sepas cocinar, nunca lo imaginé... -

- Y no es por presumir, pero cocino delicioso, o bueno, eso es lo que la mayoría de las personas me dicen - subí y baje mis hombros restándole importancia a la situación, me pare del sofá para comenzar a caminar a la cocina - Si gustas quedarte aquí, en media hora te llamo para que vengas a comer - le sonreí antes de dar la media vuelta para seguir caminando.

Comencé a prepara la comida, decidí hacer una porción más grande de lo habitual, no sabía si Jin comía mucho o no, así que era mejor que sobrara en vez de que faltara. Media hora después ya me encontraba poniendo los últimos toques.

- ¡SeokJin, la comida está lista, ven al comedor! - en menos de cinco segundos ya se encontraba sentado en una de las sillas, viendo con detenimiento el alimento frente a él.

Hice lo mismo, me senté en la silla de enfrente y comencé a servir en dos platos, uno para él y el otro para mi, una vez servido le tendi el plato y él lo acepto, poniéndolo de su lado, agarró los cubiertos y llevó una porción a su boca, yo solo lo miraba, esperaba que haya quedado bien, tan siquiera decente. Sus ojos se abrieron grandes y me miró.

- Este tteokbokki es uno de los mejores que he probado... ¿Cómo es posible que tu comida sea tan deliciosa? -

No pude evitar sonreír grande ante su cumplido, definitivamente la comida era uno de mis fuertes.

"𝐵𝑟𝑜𝑘𝑒𝑛" - 𝑀𝑌𝐺.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora