Milo Walker.©#1✔️[BL] [Saga Hermanos Walker]

#20.

Cometer errores no es de idiotas, es de humanos—ThiagoDavis.

"Mírame a los ojos"

MILO.

Mis piernas tiemblan un poco, mis ojos arden con el deseo de soltarme a llorar. Lo he arruinado. Por mi culpa Gianner ahora no me quiere ni un centímetro cerca de él.

Con lentitud bajo las escaleras, cuando me encuentro en la planta baja muerdo mi labio inferior con fuerza reteniendo una maldición.

—Ey, chico. —Levanto la vista encontrando a una chica joven, una que me mira bastante preocupada—. El gruñón te trató mal ¿cierto? Joder, ese patán, le daré su merecido...

—No, no, no es nada de eso. —digo atrapando su brazo para evitar que suba las escaleras—. Todo lo que sucedió fue mi culpa, no supe ver más allá de mis narices. Gianner me dejó ver mejor... Me marcho, adiós.

Libero mi agarre y salgo de la casa del chico que ahora mismo debe estar maldiciéndome. No quería arruinar esto, pero he fracasado.

Me duelen mucho las palabras del castaño, en serio creo que me duelen mucho más que las que una vez escuché de mis compañeros de instituto, esos que me trataban como basura. Haberle pedido eso fue lo más estúpido que pude haber hecho. Me doy cuenta que realmente no conozco absolutamente nada de Gianner. Sí, es serio y un poco distante, pero no fui capaz de ver más profundo en él. La molestia y la decepción en sus ojos al decirme todo eso me dejó helado.

Piensa que lo quería utilizar.

Solo quería experimentar mi sexualidad... No imagine que él se enfadaria y me soltaría esas palabras que aún me duelen como si me las estuviera diciendo en este momento. Gianner tiene problemas con la confianza en las personas, ahora yo he contribuido a que eso aumente más. Que gran imbécil.

No puedo dejar esto así.

Me detengo cuando estoy cerca de la calle del gran condominio, tomo mucho oxígeno y con decisión giro sobre mis talones y me encamino nuevamente a la gran mansión. En cuanto estoy llegando veo a la hermana de Gianner saliendo, me apresuro hasta ella.

—Chico...

—No puedo dejar las cosas mal con Gianner, ¿me permites entrar y hablar con él?

—Claro, entra.

En mi emoción por poder entrar nuevamente me apresuró a ella y la abrazo.

—Eh, sabes, no soy muy amante del contacto, ve y habla con mi primo, de paso dile que ya me fui.

—Uh, no eres su hermana...

—Ay, no, soy Kimberly, su prima.

Asiento y ella me pellizca la mejilla para por consiguiente marcharse, no dudo en entrar en la casa y subir las escaleras.

***

Abro la puerta de la habitación del castaño oscuro, pero no logro verlo por ningún lado, eso logra que trague saliva y me adentre completamente en el lugar.

—Gianner. —susurro su nombre y al instante me siento estúpido, aclaro la garganta—. Gianner.

Aunque mi voz suena más alta él no me responde. El sonido de la ducha me deja en claro que su ubicación. Me debato entre entrar y quedarme esperando fuera, sin embargo algo dentro de mi me hace tomar el pomo de la puerta del baño y entrar.

—G-Gianner.

Su cuerpo desnudo, siendo recorrido por el agua casi me deja sin aliento, las cortinas de la ducha están abiertas y por eso puedo verlo completamente. No es lo magestuoso de su anatomía lo que me ha dejado sin aliento, sino que sus ojos que a pesar del agua recorriendo su rostro puedo notar que está llorando y eso me hace doler el corazón.

Gira su rostro completamente y me pide que me marche, pero no he entrado dejando mi miedo a que me de un golpe para luego marcharme sin hacer lo que he regresado a hacer.

—Por favor, escúchame.

—Al parecer no me has entendido, y eso que he sido bastante claro, lárgate, Walker.

—No me iré, no voy a irme hasta me que escuches.

—Te sacaré por mi cuenta y no será bonito, así que vete.

Muerdo mi labio inferior con fuerza y sin que él o yo mismo me lo espere me encuentro moviéndome en su dirección, entro en la ducha con ropa quedando a escasos centímetros de él y por su expresión no se esperaba esto, yo menos.

—No volveré a pedirte algo como lo que pedí, lo prometo, pero por favor entiende que no era mi intención hacerte sentir como un objeto. No lo eres para mí, Gianner me agradas de verdad, por favor, por favor, perdóname.

Digo todo eso con mis manos en su rostro, mirándolo a los ojos, para que vea y sepa que estoy siendo completamente sincero. Primero arruga su entrecejo, luego luce contrariado y al final suspira con fastidio.

—No confío en las personas porque siempre quieren algo de mí, no importa lo patán que sea, todos quieren que yo sea parte de sus cosas y de ese modo obtener...

—Gianner, yo... Si quiero algo de ti. —digo y él arruga su entrecejo, seguramente está por maldecirme, pero sigo hablando—. Quiero que iniciemos de nuevo, ¿puedes darme eso?

Se lo piensa unos segundos, luego puedo notar como suspira con algo parecido a la molestia, pero algo me dice que más bien es confusión.

—Sí quieres que te de un nuevo inicio tienes que terminar esto con algo que yo quiero de ti.

Elevo mis cejas y parpadeo confuso, él apaga el agua y aleja mis manos de su rostro, luego mira mis labios unos segundos. Pienso que va a pedirme un beso, pero algo me dice que no es eso.

—¿Q-Qué quieres?

—Qué me la mames. —Mis mejillas se acaloran y sin poder verlo a los ojos bajo la mirada—. Mírame a los ojos y dame una respuesta.

Trago saliva y hago lo que me pide, lo miro a los ojos y lo único que veo es una maliciosa burla que me hace arrugar el ceño.

—Gianner, no es divertido...

—Aunque tienes una rica boca no, no quiero que me la chupes. —Ahora si creo que estoy todo rojo, él no tiene mucha sensura que digamos—. Pasaré por alto esto, pero voy a dejarte algo muy en claro, no tengo intención de ser tu amigo.

—¿Qué?

—Lamento haber dicho lo de antes, creo que puedes entender que estaba enojado, y no es escusa, pero de verdad lo siento.

—No importa... Me dolió, pero te herí primero.

—De igual modo no debí decir eso. —expone y luego me ayuda a que salga de la ducha—. Puedes utilizar algunas de mis prendas, espérame en mi habitación, pues como verás estaba duchandome.

—O-OK. Pero, Gianner ¿de verdad no quieres ser mi amigo?—Él niega y eso me hace querer llorar—. Yo entiendo...

—No, no entiendes, yo no quiero ser solo tu amigo, porque aunque a ti te guste otro a mi me importa una mierda, de algún modo te haré mío, y no solo en mi cama, espero vayas entendiendo eso.

No dice nada más, cierra las cortinas y vuelvo a sentir el agua caer.

Llevo una de mis manos a mi pecho y lo siento, mi corazón late como loco.

ThiagoDavis.