Milo Walker.©#1✔️[BL] [Saga Hermanos Walker]

#19.

La fuerza recide en tus latidos, solo tienes que sentirlo—Umbra.

"Algo más que besos"

GIANNER.

Hace días que mi mente se viene preguntando porqué no he golpeado e humillado a Milo Walker, la respuesta de ha instalado en mi cabeza con una velocidad alarmante: me gusta.

No es como que no lo supiera desde un principio, pero me gustaba de forma ¿carnal? No creo que pueda llamarlo de ese modo, simplemente me parecía guapo. Ahora guapo se ve demasiado pequeño para él. Y es ridículo, porque yo no soy de los que se joden la mente pensando en chicos o chicas, pero aquí me encuentro, pensando en él y en esa jodida fiesta a la que debo asistir como invitado de honor. Es gracioso que ese patético de Nicanor McQueen desee verme la cara de idiota, es gracioso que se acerque a mí cuando es obvio que no le agrado en lo absoluto.

Conozco a todos con los que me rodeo, están a mi alrededor como ratas solo porque tengo popularidad y mucho dinero. Sí, me refiero a una familia respetable, no a que yo soy el millonario, soy consiente que todo lo que tengo es por ese hombre que me ha dado su apellido. Y eso es molesto y frustrante.

El sonido de la puerta siendo tocada se escucha por la habitación, me tomo unos segundos para dejar que la sirvienta entre en mi espacio.

—Lamento molestselo, Jove...

—¿Qué sucede?

—Uh, sí, su amigo está esperando por usted en la...

—Qué suba.

—Sí, joven.

Ella cierra nuevamente la puerta y yo maldigo por lo alto.

Olvidé que hoy ese tonto de ojos verdes viene a verme para ajustar algunos detalles de la fiesta, seguro querrá que la haga en la casa de verano ¡noticias! El puto verano se terminó. Además se supone que soy el invitado, no anfitrión o cómo cojones se diga.

Me levanto de mi sofá y camino hasta quedar frente a la puerta que da al balcón, corro las cortinas y veo el cielo un tanto gris. No me muevo de mi posición cuando con seguridad abre la puerta, me deja bastante confuso esa acción, cada vez que viene toca y espera mi permiso.

—Bonita habitación. —Un cosquilleo extraño me recorre la espalda cuando escucho su voz—. Aunque muy seria.

Giro encontrandome con su sonrisa, lleva una sudadera negra, la capucha de esta descansa sobre su cabeza, al igual que sus bolsillos acobijan sus manos.

—¿Qué haces aquí?—inquiero bastante sorprendido, solo que se me da bien ocultar mis expresiones tras un rostro tranquilo y voz monótona.

—Bueno, ahora que lo preguntas de ese modo, todo serio, siento que la razón por la que estoy aquí... Es un tantito torpe.

—Dime, Milo.

—Quería verte.

Su respuesta es una que no me esperaba en lo absoluto y eso me tiene muy contrariado. Me gusta y a la vez me asusta que él esté sintiendo algo más que atracción. No puedo pasar por alto que cuando miró a Nicanor sus ojos brillaron diferente. Aunque ese quería verte no significa que me extrañaba ni nada por el estilo. Seguro tiene algo que decirme.

—¿Por?

—Porqué más. —Sonríe de una forma que no comprendo—. Te echaba de menos.

—¿Estás de broma?

Niega con una expresión que me parece adorable y que a la vez me parece seductora. Muerde su labio inferior y eso solo me hace pensar que lo hace como un incentivo para que camine hasta él y lo bese como un demente.

—No soy tu novio como para que estés extrañadome, lo tienes claro, ¿cierto?

—Sí, pero que lo tenga claro no significa que me niegue a las emociones. No sé cómo funcionan tus pensamientos, pero si quiero a alguien voy por esa persona y, te quiero a ti.

—No me digas, ahora me vas a proponer que seamos novios.

—Eh, no, no te quiero de esa manera, creo.

Elevo una ceja ante su revelación. Admito que escucharlo decir eso es como recibir un golpe en pleno rostro. No me agrada lo que dice.

—Estoy a dos segundos de petear tu trasero fuera de mi habitación, Walker.

—No te enfades, si vine a proponerte algo, solo debes decir sí o no, pero por favor no comentes nada al respecto, es bastante vergonzoso tener que pedirtelo, pero eres el único que creo tiene experiencia.

—Ajá, déjame adivinar, quieres que te enseñe sobre sexo y que me folle tu culo virgen.

Espero ver una expresión enfadada o que me de un golpe, pero no me espero sus mejillas arrebatadoramente sonrojadas.

—Sí... Es eso lo que quiero... Pero no lo digas de esa forma, suena muy vulgar.

Demonios, jodidamente esto debe ser una broma.

—Lárgate, ahora.

Sus ojos se abren y me miran con pasmo, y eso solo me hace enfurecer de una forma tan repentina y nueva que por poco termino por perder la razón y darle un golpe en ese jodido rostro de ángel que tiene.

—Pero...

—Claro, seguro pensaste qué como te he besado y no te he partido el rostro por siquiera hablarme, puedes venir y utilizarme como tu puto muñeco de prueba, pero qué creer, no.

—Yo... Gianner, no es eso...

—He dicho que te largues.

—Giann...

—Y Walker, no te me acerques de nuevo a mí. Estoy bastante cabreado de todos los imbéciles que creen poder utilizarme, pero sinceramente no me lo esperaba de ti, pero ese fue mi error.

—Lo lamento, no era mi intención, no quise ofender...

—¿De qué hablas? ¿Ofenderme? Yo no me ofendo, yo solo me paso las palabras de los demás por donde me de la gana. Sobretodo la de los idiotas que solo buscan obtener algo de mí.

—Yo... Lo siento.

—No me importa si lo sientes o no, ya sabes que va a sucederle a tu rostro si te acercas a mi de nuevo.

Camino hasta la puerta de mi habitación, la abro esperando que se marche, cuando llega hasta mi y sale de mi habitación no pierdo de decir algo que espero le duela.

—Al parecer eres un cualquiera que se abre de piernas demasiado fácil, quizás a Nicanor le guste tu propuesta, ve a ofrecerle tu virginidad a él, seguro él también tiene experiencia.

Cierro la puerta con fuerza y pego mi espalda a ella, dejo que mi cuerpo resbale por la superficie de madera hasta que termino sentado en el piso con un nudo en mi garganta y la molestia bañando mis pupilas.

Y yo creyendo estúpidamente que podrían ser algo más que besos, supongo que fue mi error y al final Milo Walker resultó igual que todos.

Pidan, pidan, pidan todo lo que quieran que Gianner va a darles todo... Porque a él no le importa ser utilizado.

Idiotas.

ThiagoDavis.