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Fumaba su cigarrillo en la zona v.i.p de uno de los clubes en donde uno de sus amigos era dueño y, a pesar de poder permitirse el estar en dicha zona y que la atención siempre iba a ser la mejor para ellos, su amigo siempre se encargaba de que la pasaran bien, así sea sirviéndole los mejores tragos o enviarles a sus mejores bailarines.

Pero esta vez era la excepción. Jungkook le había dicho que esta vez no necesitaría compañía, pues estaban esperando a alguien especial.

Aún así, Seokjin mantenía du mirada concentrada en un joven que bailaba en la pista que había llamado su atención desde que habían llegado.

- Si Jimin no viene, ya sé con quién me divertiré esta noche.

Namjoon se rió mientras volvía a dejar su copa después de darle un trago- Sí vendrá.

Y como si esa fuera su señal, una cabellera rosa llamó su atención, pues destacaba aún más debido a las luces del club, y como lo había mencionado en la llamada, no venía solo.

Se perdió la presentación cuando notó la cercanía que mantenía aquel chico quien miraba a los hombres de manera amenazante, como si estuviera advirtiendoles con la mirada. Jungkook quiso reír como también bufar. ¿Quién se creía que era? Comenzaba a pensar que había sido una mala idea haber accedido a que viniera acompañado.

Taehyung era su nombre, por lo que pudo entender, y el muy bastardo se había asegurado de sentarse al lado de Jimin sin darle oportunidad a alguien más, pues del otro lado estaba la pared.

- ¿Quieres tomar algo, precioso?

Jimin agradeció la oscuridad que ocultaba su sonrojo. No le había dado tantos detalles a su amigo, aún cuando este no había parado de hacerle preguntas, pero explicarle algo y que fuera testigo de lo que tenía con estos hombres eran dos cosas diferentes.

Él asintió, dándole una rápida mirada- Lo que ustedes estén bebiendo está bien, gracias- apartó la mirada cuando Seokjin le guiñó un ojo antes de irse a la barra, pero se encontró con la de Taehyung, quien tenía su ceño fruncido- ¿Qué?

- No le pediste algo para mí- se quejó en un puchero, haciendo reír al menor.

- Puedes pedirlo por ti mismo- intervino Jungkook, molesto porque esto no es lo que se imaginaba. Pero cuando cruzó miradas con Jimin, suavizó su dura expresión- O se lo pides a un camarero. Para algo están, ¿no crees?

No escuchó la respuesta del chico, lo único que supo fue que se había retirado para ir al baño, dejando solo a Jimin, a pesar de que este se había ofrecido a acompañarlo, junto con Namjoon y Jungkook.

Jungkook volvió a observarlo, mordiendo su labio cuando una corriente lo recorrió al percatar cuan sexy se veía el chico vestido de negro, y cómo esa camisa traslúcida dejaba apreciar su piel lo enloquecía. Si fuera por él, ya lo hubiera llevado a un lugar apartado y ya le hubiera comido la boca.

Pero incluso si lo hubiera hecho, Namjoon fue rápido en ocupar el lugar que el otro chico ocupó antes. La mano grande del mayor no tardó en deslizarse por la pierna del pelirosa, mirándolo con una sonrisa.

- Estuvimos esperando estar contigo toda la semana, ¿sabes?- le dijo, inclinándose hacia él con su mirada puesta en sus labios regordetes- Estuviste tan bien esa noche que no podemos parar de desearte- se atrevió a dejar algunos besos en su cuello cuando el chico se lo permitió, moviéndose para darle lugar- Eres delicioso, Jimin.

- ¿Empezando sin mí?- Seokjin apareció con algunos tragos, acercándole uno en especial a Jimin que contenía un líquido de un color azul exótico. Jimin lo vio con algo de desconfianza porque nunca antes había probado algo como eso, sólo bebía cerveza o vino. Pero el rubio le hizo un ademán, animándolo a que lo bebiera- Lo pedí exclusivamente para ti, bonito. Vamos, bébelo.

Yᴏᴜɴɢ ᴀɴᴅ Bᴇᴀᴜᴛɪғᴜʟ // KᴏᴏᴋᴍɪɴDonde viven las historias. Descúbrelo ahora