Cuando llegué por ella a la hora que se suponía que habíamos quedado, aún no estaba lista. Ya había pensado que podía ser una posibilidad pero al final de cuentas no me mataría esperar cinco minutos, o diez... o más.
—Lo siento, Shaoran —dijo ella desde la planta alta al asomarse por el barandal de las escaleras—. Estaré en cinco minutos.
Eso significaba que estaría aproximadamente en quince o en veinte si bien me iba, asentí y ella corrió de nuevo a su habitación.
—¿En dónde están tus padres? —La casa estaba silenciosa y los únicos ruidos que se escuchaban eran los de los peines y la ropa cayendo de un lado a otro.
—Salieron. Les gusta ir al cine juntos y fueron a ver una película que mamá tenía ganas de ver desde hacía ya tiempo. —Confirmó ella desde su habitación y luego gritó y se escuchó otro ruido de algo chocar contra el piso o la pared.
—¿Estás bien?
—Bien, gracias. En verdad eres muy, muy puntual.
—Solo cuando me interesa llegar temprano.
—Puedes pasar a la sala si quieres.
—¿O subir?
—¡NO! Eso no. —Me reí ante su paranoia, me apoyé en la puerta de entrada y me crucé de brazos. Pasaron diez minutos hasta que al fin ella bajó. Iba vestida con una blusa roja, una falda de color azul oscuro con motas rojas y ligeros volantes, y unos tacones de color rojo—. Siento haber tardado mucho.
—No pasa nada... a veces vale la pena esperar.
—¿Me veo bien? —preguntó mientras se hacía un mechón de cabello para atrás.
—Muy linda. —Me encantaba su cabello, siempre me parecía increíble—. Vamos, quedé de pasar por algo a casa de mis padres, después nos iremos. ¿Está bien?
Ella asintió y los dos salimos de su casa y nos dirigimos a la camioneta. No dijimos mucho porque supuse que los dos pensábamos en la situación. Estábamos saliendo. Juntos. Esa se podría decir que era una cita... ¿no? Y yo no me había puesto a pensar en lo que iba a suceder al momento en el que llegáramos a la casa de mis padres, ¿cómo se suponía que iba a explicar algo así?
—¿Puedo esperarte en la camioneta mientras bajas por lo que necesitas?— preguntó ella de un momento a otro con las mejillas sonrojadas y yo me di cuenta de que ella había estado pensando lo mismo que yo.
No quería enfrentarse a la situación, al menos no esa noche y yo no podía culparla, pero... las cosas no podían estar así. No estaba bien.
—Preferiría que bajaras conmigo —comenté con determinación y ella me miró alarmada.
—Shaoran... no hablarás en serio, ¿verdad?
—Estoy hablando en serio.
—Pero... pero... nos preguntarán qué estamos haciendo juntos y yo... no, Shaoran yo no...
—Tranquila —dije mientras ella se mordía el labio inferior en gesto de frustración e incomodidad.
—No me voy a bajar de la camioneta, ¿me escuchaste? Si quieres que baje, tendrás que cargarme —repuso cruzándose de brazos, y yo, aunque comprendía la situación, me reí de su actitud.
—Entonces lo haré.
—No puedes hacerme algo así.
—Sí que puedo. ¿A qué le tienes miedo exactamente? —quise saber mientras la miraba de soslayo y ella resoplaba como si hubiera demasiado aire en sus pulmones.
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Prohibido enamorarse
FanfictionEnamorarse es difícil, pero lo es aun más cuando es de la mujer equivocada. Shaoran Li, está estrictamente prohibido que te enamores de ella. +18. ShaoranxSakura. TomoyoxEriol.