Los días habían pasado rápido y estaba nerviosa de quedarse sola con Dahyun, le había rogado a su hermana que no se fuera que buscaría otra manera de hablar pero ella se fue llevando a las dos pequeñas fuera del restaurante donde habían quedado para cenar.
Momo: ¿Como has estado?
Dahyun: Bien.
Momo: Yo quería hablar contigo sobre...
Dahyun: Si es sobre Amber esta bien pero si es otra cosa me iré.
Momo: Bien, es sobre Amber y...- la chica la quedaba mirando sin decir nada esperando que termine de hablar.- Te queda muy bien ese color púrpura, te ves muy hermosa.
Dahyun: Gracias, sigue con lo de Amber.
Momo: Yo decidí adopatarla...
Dahyun: ¿Y?
Momo: No te molesta?
Dahyun: Porque lo haría, yo no puedo darle todo lo que tu si podrás, cualquier comida que quiera, juguetes, ropa, un hogar lindo y una familia.
Momo: Sabes que a ella no le importa nada de eso, sabes que a ella le basta con tenerte a su lado y no quiero que pienses que la estoy adoptando para mi benefició de que podamos arreglar lo nuestro...
Dahyun: Lo nuestro? Nosotras no tenemos nada nunca hemos tenido nada.
Momo: No es así...
Dahyun: Momo no te desvies del tema sigamos con Amber...
Momo: Yo en verdad he llegado a tener un gran cariño hacia ella y como Mina solo podía adoptar a Sana porque se le hacia difícil a las dos yo lo hice
Dahyun: No quería que Amber se sintiera mal porque no pueda ser adoptada y me alegre cuando la hermana Emely me dijo que tu la adoptarías.
Momo: Sabes que ella también tiene un mini...- se calló al ver a la mesera acercarse.
— ¿Quiere pedir algo más?. - preguntó mirando solo a la pelinegra con una sonrisa coqueta.
Momo: No gracias...
— ¿Tenemos un postre especial que solo lo servimos los sábados?
Momo: ¿En serio?
— Sí, tienes que llamar a este número y te llegara donde estés.- le paso una servilleta con un número.
Momo: Oh... Yo...- miro a la pelipurpura que estaba mirando hacia la ventana tal vez incómoda, estiro sus manos y agarro las de la contraria que estaba encima de la mesa.- Lo siento pero a mi novia no le gusta tanto el dulce.- deposito un beso en aquella blanquecinas y suaves manos.
— A... Bueno cualquier cosa puedes llamar.
Agarro la servilleta y la dejo a un lado cuando la mesera se fue.
Dahyun: Si Momo, yo soy como su mamá y espero que me la dejes ver.- siguió con la conversación.
Momo: Claro que sí, puedes ir a verla cuando quieras y si quieres puede quedarse a dormir contigo en tu casa.
Dahyun: Gracias...
Momo: ¿cómo te va en la universidad?
Dahyun: Bien, puedes pedir la cuenta.
Momo: No, yo aun tengo hambre y Mina ya se fue a casa con las niñas puedes quedarte, me sentiré sola si te vas, hazme compañía yo te llevaré a casa.