Canto de lluvia

Capítulo 29. Dia de grabación

Dos días después, estaba programada la primer cita con los de la disquera para comenzar con la grabación.

-Y bien ¿Qué es lo que tenemos?- preguntó el productor.

-Tenemos... -Fergus busco en su  las partituras – está canción, y el ensamble.

-Me parece perfecto. Pues empezamos con el ensayo. Sus instrumentos están ya en el estudio, pueden pasar si quieren, los técnicos no tardan en llegar.

Los chicos cruzaron el pasillo hasta una gran habitación en la que iban a comenzar la grabación en unos instantes. Afinaron en lo que esperaban a los técnicos.

Matt se acercó a David, que aún seguía estirando la cuerda de A con las clavijas.
-Dave... esto... ¿Cómo va todo con Carolina?
-Excelente, no podría ir mejor. Esta noche voy a llevarla a cenar en el centro, investigué y encontré un restaurante donde sirven comida deliciosa...

-David ¿estás consiente de nos vamos en menos de un mes?

La cuerda se partió. Todos voltearon a ver a David sorprendidos, algo lo había alterado. Hizo como que no pasaba nada y buscó en el estuche una cuerda nueva.

-Si, estoy consiente de ello.

El producto entró junto con los técnicos y les presentó a Sofía y Reacher. Luego fueron a la cabina de control mientras que la otros esperaban la señal para comenzar el primer ensayo.

-¿Y como se llama la canción chicos?- dijo Sofía ajustando los controles.

- Buena pregunta. Todavía no lo sabemos, el autor no se ha decidido ¿verdad Dave?

-Ya, ya. Aún tengo tiempo para elegir un nombre adecuado. Es muy especial para mí, por lo tanto no puede llevar cualquier nombre. Quiero que sea perfecto.

-Pero necesito uno​, le dejaremos temporalmente pista 1. De acuerdo... ¡Primer ensayo en uno... dos... tres!

***

En la oficina, Carolina estaba revisando la redacción de un artículo sobre esculturas Miguel Ángel en exhibición, mientras Israel se dedicaba a beber tranquilamente su café y a mirar las últimas noticias en el ordenador.

Flotaba en el ambiente un​ dulce olor a roles de canela, una pieza de jazz se escuchaba a volumen bajo desde otro cubículo. La ciudad daba su último bostezo perezoso, después del ajetreo matinal, las calles se sumergían en una calma hasta el mediodía, el reloj de pared apenas marcaba las diez con quince.

De pronto, delante de la hoja de redacción de Carolina, saltó la notificación de que había recibido un correo electrónico un tanto peculiar. Dejó un momento el procesador de textos y abrió el mensaje. Este decía:

Señorita​ Tovar:

La Nueva Casa de la Cultura y las Artes tiene el honor de invitarle al acto conmemorativo de nuestro primer centenario que se celebrará el día 16 de noviembre del presente año en el Antiguo Palacio de Congresos de la ciudad.
Esperamos contar con su distinguida presencia.

-¡No puede ser!- dijo a Israel – No vas a creer esto.

-¿Qué es? ¿Descubrieron vida inteligente en Marte?- bromeó como de costumbre.

-¿Recuerdas que hace un año hice una solicitud para cubrir el evento de La Nueva Casa de la Cultura y las Artes?

- Si lo recuerdo, también recuerdo que te dijeron: "ahorita no, joven".

-Pues acabo de recibir un correo en el que solicitan mi "distinguida presencia", y no a cubrir el evento, sino como invitada ¿Se deberá a la entrevista que le hice a David?

- Es probable. Además, eres irresistible.