»LENGUA DE PLATA«

11 2 0
                                    

Una semana después...

Hadley

Tenía seis semanas de embarazo y mi pancita seguía igual, según la doctora el bebé parecía una lagartija, no se notaba mucho, pero ya comenzaba a parecer algo más que una lombriz. Víctor no había vuelto a llamar, tampoco mandó más regalos o flores. Había escuchado que salió de la ciudad y que retomó sus labores normales y me alegraba que él estaba mejor, eso hacía que yo me sintiera mejor. Pero Haley-Jean no estaba muy feliz, todos los día me preguntaba por él.

Ahora estaba en el parque con Paco, Roxy y Haley, habíamos decidido ir al parque. El pequeño jugaba en la resbaladilla y nosotros lo veníamos desde los columpios, comiendo un helado.

–Hace días ví a Víctor antes de que se fuera– Dijo Paco tomándome por sorpresa– Aún tiene un moretón en el pómulo derecho, debajo de una línea cosida.
–Entonces Eduardo si le abrió feo– Dijo Roxy, ella no había estado ahí así que no vió.

Yo solo seguí chupando mi helado mientras Paco se reía.

–Si, me burlé de él un rato– Decía pero luego me vió y se le borró la sonrisa– En fin, ¿A quién le importa? Es un idiota.

Estábamos en silencio viendo a Haley hasta que Roxy señaló a una esquina.

–¿Cómo se atreve a pasear por este lado?– Preguntó Roxy y yo volteé.

Dayana estaba caminando por la calle, yo no entendía a lo que Roxy se refería.

–Ni siquiera sé por qué aún la dejaste viva– Me dijo Roxy y levanté una ceja– Cariño ¿No lo sabes? Fue ella la que se metió con tu hombre.

Eso no lo sabía, siempre creí que había sido una de las chicas del Máscara negra o algo así, pero nunca supe quién fue. Sentí arder mis venas y apreté los puños. Conocía a Dayan desde la universidad, sabía que ella era como yo, pero ella tenía un único poder.

–Ya sé lo que pasó– Dije sacando mi teléfono– Y no se va a quedar así.

“Spooky 👻”

Trae a los muchachos

También las herramientas

Rápido

Le envié ese mensaje a Óscar junto con mi ubicación.

–Roxy ¿Puedes cuidar un segundo a Haley?– Pregunté dándole mi helado y poniéndome de pié.
–¿Qué harás?– Preguntó ella y negué.
–Paco, ven conmigo– Dije empezando a correr.

Corría despacio pero quería alcanzar a esa perra. La seguimos por la calle, había menos gente de este lado.

–¿Qué haremos?– Preguntó Paco en un susurró.
–Seguirla hasta que llegue Óscar– Respondí en voz baja.

La seguimos por varias calles y en la esquina de una nos alcanzó Óscar, nos subimos a la camioneta especial para secuestros, adentro estaban mis amigos.

–¿Que se hace?– Preguntó Spooky y señalé a la zorra.
–La secuestramos y lo demás me lo dejan a mí, pero eviten que hable en cualquier momento– Advertí y todos asintieron.

Seguimos avanzando por una calle hasta que di la orden. Desde la camioneta vi como la sujetaban, le ponían un trapo en la boca y la metían a la camioneta con una bolsa en la cabeza. Seguimos avanzando rápido hasta llegar a una de las casa en donde hacíamos el trabajo sucio, la metimos y la amarramos en una silla. El cuarto estaba cubierto con hule espuma para evitar que el sonido saliera, también estaba cubierto por plástico negro para que así la sangre se limpiara fácilmente.

ENTRE ROSAS Y ESPINAS |TTE #2| Victor Zsasz Donde viven las historias. Descúbrelo ahora