Christopher Vélez, cree que lo tiene todo, es rico, guapo, y está felizmente casado.
Pero alguien llegará... Alguien que cambiará el orden de su vida, que lo hará darse cuenta de que es lo que realmente desea...
⚠️Historia adaptada, aunque a partir...
—¿Y el joven Chris? —Nadia preguntó apenas crucé la puerta.
—En la oficina.
—No me diga que... ¿Se pelearon? —preguntó espantada.
Sonreí.
—Nada de eso, me mandó a casa por que dijo que tenía una sorpresa para mi.
—Aww, ¡Es un amor!
—Lo sé —dije sin dejar de sonreír.
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Dejé salir un bufido de frustración, pasaban más de las doce de la noche, Chris aún no volvía, y me desesperaba demasiado porque me había acostumbrado tanto a sus abrazos que me hacían imposible dormir sin el. Tras media hora de tratar de acomodarme, sentí como la puerta de abría, luego de segundos me llegó la fragancia de hombre.
—¿Dónde estabas? —susurré, estaba a punto de quedarme dormida.
—Por ahí, haciendo cosas —sonrió, quitándose la ropa a excepción del boxer.
—¿Qué cosas? —pregunté, los ojos se me cerraban pero trataba de mantenerlos abiertos.
—Lo verás mañana.
Me abrazó. Después de eso caí en la inconsciencia.
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—Ya se a quien contrataré —dije mientras subíamos en el elevador.
—Me imagino que a la primera no —me respondió riendo.
—Ella se puede ir mucho a la mierda. Contrataré a Luz.
—¿La señora?
—Así es, tiene experiencia, es respetuosa, amable y bastante seria.
—Perfecto.
—La llamaré —contesté mientras caminábamos fuera del elevador.
Ya en mi escritorio, marqué a su numero. Desafortunadamente me dijo que ya había conseguido trabajo cerca de su casa, colgué resignada. Marqué a mi segunda opción, pero también me dijo que ya había conseguido empleo, y así sucesivamente, todas mis opciones extrañamente ya tenían trabajo.
—No salió bien ¿Cierto?
—Para nada.
—¿Te queda alguna opción?
—Solo me queda una.
—¿Quién?
—Andrea, su nombre es Andrea Smith.
//Joel Pimentel//
—¿Cómo te fue?
—Muy bien, señor —suelta en tono sumiso.
—Así me gusta —le hago una seña para que se acerque y ella obedientemente viene hacia mi.
Acaricio sus lindos pechos, aunque no puedo evitar comparalos con los de Alessia, los de mi Alessia son perfectos, son del tamaño perfecto y están firmes, nada que ver con los de la chica que tengo en mi sillón.
—Entonces, ¿Es seguro que Andrea sea contratada?
—Por supuesto. La perra de Alessia ya no tendrá más opciones, todas las candidatas han encontrado trabajo, excepto por ella.
Asiento, no soporto que llame perra a Alessia.
—En mi presencia, evita llamar así a Alessia.
Ella rueda los ojos. Me enfurezco aún más.
—No entiendo que le ven a ella.
—Lo que no te ven a ti —respondo frío— ahora, vístete y largate de mi oficina, tengo trabajo que hacer.
Rápidamente se viste y sale a paso veloz de mi oficina.
Se me han quitado las ganas de follar, lo único que quiero es tener Alessia conmigo, no puedo evitar compararla con la mujer que se me cruce enfrente. Tengo que decir que admiro a Christopher por sus gustos, aunque eso no le quita lo hijo de puta que es.
Trato de dejar de lado mis pensamientos, y comienzo a trabajar o por lo menos a tratar de trabajar, Alessia no sale de mi cabeza, y comienzo a pensar que no solo la quiero por venganza.
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¿Cómo les ha parecido la historia? ¿Les ha gustado? ¿Alguna sugerencia? ¿Alguna duda?
Me encantaría que votarán y comentarán.🥺
Ya casi se acaba la historia🥺
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