Capítulo 87

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//Christopher Vélez//

"El motivo de mi renuncia es más que nada, personal. Se lo diré, porque por mucho tiempo fue mi jefe y aunque era extremadamente estricto y frío, llegué a tenerle afecto...

Su cabello castaño y medio rizado, su  sonrisa contagiosa y ese par de ojos que me vuelven loco... Yo simplemente no puedo trabajar con esa mujer, mucho menos sabiendo que ella ni siquiera me voltea a ver.

Puede sonar algo cursi, pero desde la primera vez que la vi, me impacto con su belleza, aún recuerdo cuando corrió a la anterior secretaria, yo estaba totalmente desesperado e inclusive al grado de volverme loco, por conseguirle una secretaria nueva, y ella apareció, como un ángel caído del cielo. Chocamos, nuestros ojos se encontraron, su perfume dulce, y ni hablar de su cuerpo, no dudé ni dos veces en contratarla.
Cuando leí su expediente, quedé aún más embobado, me sentía a morir, era o bueno sigue siendo la chica de mis sueños, es inteligente y además de eso hermosa.
Aún me sigo odiando por haberlos dejado ese día encerrados en la oficina, ¿Cómo pude ser tan tonto? Si no hubiera hecho eso, nada de eso habría pasado, prácticamente se la lancé a sus brazos.

Se que tuvieron sexo esa noche, pero... ¿Qué podía hacer? Correcto, nada, no podía hacer absolutamente nada.
También se que sus "visitas" continuaron, siguieron viéndose y revolcándose, lo digo de esa manera porque me duele, de tan solo verlos muero de los celos...
Alessia... No puedo seguir trabajando a su lado, sabiendo que ustedes se quieren al grado de que llegó a separarse de su arrogante esposa...
Una cosa más, quiero que sepa que no guardo rencores, puede contar conmigo cuando quiera, sinceramente les deseo lo mejor. Aunque admito que quisiera que ella estuviese conmigo y no con usted...

Atentamente: Johann Vera.

Suspiré... Vaya, yo nunca creí que Johann sintiera algo por Alessia, me ha tomado desprevenido.
¿Debería decirle a Alessia?
Lo pienso... Le diría, no quiero secretos con ella, tomo el teléfono del escritorio y marcó a su escritorio; pasan algunos minutos pero no contesta, que extraño ella siempre responde al momento, me levanto de la silla con la intención de salir a verla, pero una llamada del mismo teléfono me interrumpe.

—Christopher Vélez, diga.

Ay mi Christopher... Mis más sinceras condolencias...

Frunzo el ceño, no reconozco la voz y tampoco puedo pensar el porqué de sus condolencias.

—¿Quién es?

No necesitas saber mi nombre, qué te baste con saber que te estoy haciendo un favor...

—¿Qué es lo que quieres? —pregunté algo desesperado.

¿Yo? ¿Qué quiero? Nada, por supuesto.

—¿Entonces?

Solo quería decirte que deberías vigilar mejor a tu novia, digo, mientras tu trabajas como loco, ella se ve a espaldas con tu mejor amigo, auch, eso debe doler, el karma es una perra querido Christopher...

Dejo de respirar por un segundo, ¡¿Alessia y Joel!? ¡¿A mis espaldas!?

¿Qué? ¿No me crees? Revisa tu teléfono, ahí esta la prueba, y te sugiero que vengas rápido a la dirección que aparece, parece que en cualquier momento podrían irse a un motel... Hasta luego bebé.

Antes de que pueda decir algo, cuelga. Regresó rápido a mi escritorio, enciendo mi teléfono y lo desbloqueo, efectivamente hay mensajes de un teléfono privado. A la velocidad de la luz entro a la conversación. Mi corazón se rompe al ver a Alessia y Joel en una cafetería, se ven felices, si no los conociera diría incluso que son una pareja perfecta...

Con una rabia inmensa salgo de la oficina, al pasar por su escritorio, me siento deshacer al ver que no esta. Sin mirar atras salgo del edificio, sin importar los gritos de Fátima.
Entró al auto, y conduzco hacia la dirección, me toma menos de diez minutos llegar, afortunadamente encuentro un lugar donde estacionar, rápido dejó el auto y prácticamente corro hasta el lugar.
Mi corazón termina de romperse al ver como mi mejor amigo está besando a mi novia.
Me acerco rápidamente a ellos.

—¡¿De que se trata todo esto!? —grito al borde del colpaso.

Ambos se separan rápido. Alessia me mira culpable, mientras que Joel no tiene ninguna expresión.
Ignoró a la gente que se ha acumulado alrededor nuestro, sin pensarlo me lanzo a Joel, a quien le doy un puñetazo en la mejilla.
Este no hace nada mientras que Alessia me ve sorprendida.

—¡¿Por qué!? ¡Se supone que eras mi mejor amigo! ¡y tu! —señalo a Alessia—
¡No puedo creer que me hayas hecho esto!

—Christopher yo... Yo puedo explicarlo...

—¿Ah si? Te escucho...

Lo pienso dos veces, los periodistas han comenzado a tomar fotografías y no me apetece para nada salir en el noticiero o en el periódico en primera plana.
Le dedico una mirada a Joel de "no hemos terminado" para luego jalar a Alessia hacia mí y con la mirada aún de los periodistas sobre nosotros la sacó de la cafetería.

Subimos a mi auto, y comienzo a conducir hasta mi casa...

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Ojo: Reflexionen la carta, porque aunque se vea que Johann le ha dejado el camino libre a Christopher, puede ser que no sea así... Así como también piensen que podría ser que Joel no sea la persona que quiere terminar con Chrissia...

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La amante ||C.V|| Sin EditarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora