Las voces en el jardín

Capítulo 5: La danza de una pequeña flor

Enero 2019

Diana se encontraba en la oficina de la doctora Bristol sabiendo que sería su última sesión sobre la primera etapa. Para la próxima vez que se vieran, estarían entrando en su inconsciente recuperando recuerdos, lo que la ponía nerviosa.

-Hoy terminaremos de ver las últimas tres intervenciones para reducir riesgos. Es necesario discutir sobre la responsabilidad del sistema y la involucración de sus respectivos agentes en caso de que alguna identidad o todo el sistema agreda a alguien o cometa algún acto delictivo. Se tiene la creencia de que como cada identidad tiene sus propias opiniones y forma de actuar independiente del resto, entonces cada uno sería responsable de sus propios actos y errores. Sin embargo, como todas las identidades comparten el mismo cuerpo, todo el sistema es responsable de lo que ocurra mientras usan el cuerpo.

-Eso no es justo. No siempre todos somos conscientes de lo que ocurre afuera ni consentimos lo que hacen los demás. -reclamó Ramsés quien llevaba un rato controlando el cuerpo, con Diana y Bruno co-fronteando y el resto de los alters escuchando en el fondo.

-Creo que no nos habíamos visto antes. Eres Ramsés, ¿cierto?

-Así es, madame. Mi nombre es Ramsés, el segundo protector del Soul Garden System. Protector de las emociones y dueño del Narciso. Un placer, doctora. -se presentó de pie el muchacho haciendo gala de sus modales.

-Un gusto en conocerte. Bueno, Ramsés, tampoco es justo para la víctima o persona que recibió el daño que nadie en el sistema se haga cargo de las consecuencias. Si alguno de ustedes hiere o agrede a alguien, debe trabajar en equipo para compensarlo o alguno deberá tomar las consecuencias en nombre de todos. La mejor manera de evitar cargar con las repercusiones es mejorar la comunicación del sistema y conociéndose mejor entre ustedes cuando no haya barreras amnésicas. No pueden estarse lanzando la culpa de sus actos entre ustedes, especialmente a las identidades más problemáticas o a las que más odian. Si alguno de ustedes comete un acto delictivo, deben enfrentar las consecuencias penales como cualquier ciudadano. No siempre pueden ganar las peleas legales apelando a la insanidad. Para declarar la insania mental se requiere que se trate de un enfermo mental con incapacidad habitual permanente, siendo que la persona no pueda dirigir sus  acciones o administrar su patrimonio. Es un proceso extremadamente largo y extenuante que puede traer mala fama al acusado. Primeramente, requiere que todo el quipo y yo probar bajo declaración jurada su estado de enfermo mental; además, requiere el análisis de otros psicólogos y terapeutas externos para verificarlo. Tendría que revelar todo su expediente médico y, sobre todo, ustedes y sus allegados tendrían que declarar ante el jurado. Quizás la peor parte de todo el proceso sería que ustedes quedarían expuestos ante mundo, ya que un juicio de ese calibre atrae a la prensa amarillista que no tiene escrúpulos en torcer la verdad; recibirían demasiado odio de varios grupos.

-¡Esa mujer dijo que no podía revelar nada de los que ocurra durante las sesiones! Por ley tiene prohibido revelar nuestro expediente. -reclamó Scarlet.

-Pero por ley está obligada a revelar nuestro caso si nos intentamos lastimar a nosotros u otros. -replicó Bruno. -No hagas algo tonto si no quieres vernos en esa situación.

TRIGGER WARNING (Advertencia de contenido sensible). Menciona violencia doméstica, hospitalizaciones, autolesiones, intentos de suicidio y grupos de apoyo. También analogías a la muerte.

-Lo mismo ocurriría si ustedes deciden denunciar a alguien que los maltrató. Lo que nos lleva al punto siguiente: la defensa contra la violencia doméstica. ¿Cómo definen ustedes la violencia intrafamiliar?

-La violencia doméstica, también llamada intrafamiliar o violencia de pareja, es el tipo de violencia que ocurre entre los miembros de una familia tanto dentro como fuera del entorno doméstico. Las relaciones abusivas siempre conllevan un desequilibrio de poder y control. El abusador usa palabras y comportamientos intimidatorios e hirientes para controlar al abusado. -explicó Bruno tomando el control.