Locura de alfas/ Omegaverse/Trio

Entre dos es mejor

Zachaly no quería quedarse atrás en comparación a su hermano por lo que fue el primero en acercar sus dedos al jugo de nudos que tuvo que reconocer que sería realmente difícil lidiar con él. Pero no se echaría hacia atrás. Quería hacer algo por el omega.

Enredó sus dedos con los hilos de oro y comenzó a tirar de los que creía que eran los indicados sin mucho resultado. En cambio recibió un leve gemido de dolor ante sus torpes acciones. Zacha apretó sus labios, lo menos que quería era escuchar algo como eso. Revolvía la parte protectora dentro de él.

-Oh, vamos, quita- Ishaia quitó sus manos y lo empujó posicionándose él detrás del omega y agarrando los hilos- Eres realmente inútil.

Zacha le gruñó pero se alejó sentándose un poco lejos. Le molestaba su hermano y más ahora que desprendía feromonas igual que él. Ambos podían estar discutiendo pero el omega no parecía muy molesto por ello. Las feromonas lo envolvían tan fuerte que comenzaban a marearlo aún más que la bebida en su sistema.

Ishaia no se demoró tanto pero le tomó algunos minutos lograr romper los fuertes nudos y tirando fuera el duro cinturón, dejando que la cintura estrecha del Asule se estirara en sus dimensiones reales. Un enorme suspiro de alivio salió de los labios de este al no sentir tanta presión en sus músculos abdominales.

Estirando su espalda se dejó caer hacia atrás dejando que esta se acurrucara contra el pecho de Ishaia, su cabeza se posó sobre su hombro cómodamente. Ishaia rodeó su cintura entre sus manos y comenzó a dar un suave masaje. El menor ronroneó contra él ante las deliciosas sensaciones.

Asule, con una leve sonrisa estiró su mano hacia la mejilla del alfa mientras sus labios dejaban un beso en la otra. Esto lo cogió desprevenido por lo que se estremeció recordando la primera vez que lo había hecho. Solo que ahora sus labios estaban ligeramente húmedos y cálidos.

-Gracias alfa- le dijo ronco con los ojos entrecerrados y las pupilas dilatadas. Ishaia tragó en seco, se veía realmente deseable en ese momento. No pudo evitar apretarlo más hacia su cuerpo abrazando sin lastimar su cintura.

Sentía que la tela estaba en medio. Se preguntó que sería tener su piel en contacto con la suya. Inconscientemente se relamió los labios y este movimiento fue seguido por las pupilas del omega que gimió ligeramente.

Las feromonas de Asule se habían vuelto más dulces. Eso le indicó al alfa una sola cosa, que en sus brazos tenía a un omega excitado.

Un gruñido cerca de ellos hizo que ambos rompieran el íntimo contacto visual y se enfocaran en aquella persona que en unos segundos había sido dejada a un lado. La expresión del rostro de Zachaly era…complicada.

Por una parte parecía molesto, por el otro también excitado influenciado por las feromonas de Asule y en tercero ¿decepcionado?

Asule inclinó la cabeza todavía en el hombro de Ishaia y acarició el muslo del alfa con la punta de su pie desnudo.

-¿Qué pasa alfa? ¿Por qué tienes esa cara? ¿Estás triste?- el omega mostró un poco de preocupación en su rostro. No entendía lo que le ocurría al alfa. Más bien, sus crudos instintos que ahora eran los que controlaban su cuerpo no lo entendía.

Intentó separarse del hombre detrás de él. Por alguna razón sentía que debía consolar a aquel alfa que sus feromonas le indicaban que la soledad lo estaba envolviendo pero los brazos fuertes alrededor de él se lo impidieron. Ishaia le gruñó contra el oído en advertencia.

Eso no le gustó a Asule que se removió incómodo.

-No me controles alfa- su voz parecía un ronroneó gruñón que solo incitó al alfa a apretarlo más hacia él.