Capítul❍ 8.

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"Aquel chico se estaba acercando mucho a mí últimamente..."

"Estaba muriendo de vergüenza, ¿de nuevo solos?..."

"Parecía que el destino no estaba a favor mío..."

"Sus manos son tan cálidas..."

"Hoy pude..."

Cerré con fuerza el libro en mis manos.

Desde aquel día, Seungmin se había unido a nosotros, Han lo había recibido muy bien, y a pesar de que estaba en otro edificio, ambos se las arreglaban para que quedasemos juntos.

Y vaya que Jisung se había dado cuenta acerca de mi pequeña atracción por el menor, pues muchas veces nos dejaba solos. No me molestaba, ni incomodaba, mucho menos me desagradaba. Solo me...

Me sentía extraño, punto.

Hice una mueca estirando mis músculos para olvidar esa sensación.

Ya habían pasado unas semanas, y el maldito libro había acertado cada día. Ya sea con las expresiones de Seungmin o sus actos.

Y sí, todavía sentía que algo andaba mal cuando lo veía de lejos con un aura grisácea pero de cerca sentía un aura rosa deslumbrante, incluso a veces podía llegar a ser amarillo.

Había buscado libros para ello, había buscado por Internet para saber la razón. Estudiaba psicología y no tenia ni una idea de que significaba.

Todo empezaba a frustrarme pero cuando llegaba a ver una de sus sonrisas se calmaba.

Culpaba a las hormonas, debía ser ello o su mente. Quien le jugaba en su contra cada vez que hiciera algo cerca de Seungmin.

Había sido el primero en enterarse que sentía algo por Seungmin, y no lo podía llamar amor porque a penas se llevaban conociendo unas semanas.

¿Atracción?¿Ilusión?¿Simple gusto?

No lo sabía, pero no era el único que se había dado cuenta ya.

El segundo en verlo fue Jisung, era de esperarse, además que el mismo era quien en varias ocasiones quería que se la pasaran juntos.

La tercera fue Ryujin, tenía que estudiar psicología, pensó en cuanto la chica le había preguntado sobre el menor que ahora andaba junto a ellos.

Parece un cachorrito —dijo la chica en cuanto lo había visto y hablado con él, había sido la primera vez que los habían presentado.

Rodó para quedar boca abajo, había colocado una de sus almohadas bajo la cabeza para que pueda dormir. Había apagado todas sus luces para lograrlo. Pero Morfeo no parecía estar de acuerdo, pues cada vez que quería dormir le hacia llegar más pensamientos absurdos.

°[MrMockbap]°

De acuerdo, había estado evitando a Seungmin solo por darle la contraria al libro ese.

Pero no parecía funcionar, pues lo esencial de ese día siempre estaba escrito y hecho.

—Aquí estabas —escuchó la voz de Hyunjin a sus espaldas, solo lo dejo seguir hablando, pero no lo hizo.

—¿Acaso vino otro estudiante nuevo?

El de mirada rasgada rió, agachándose a su costado para quedar sentado y luego acostado sobre el recién podado pasto.

El chico de mi novela.  ლ〚2MIN〛Donde viven las historias. Descúbrelo ahora