HERO (CITRUS)

CAPITULO XII: LA BESTIA CON CABEZA DE LEÓN Y CUERPO DE SERPIENTE

El cielo brillaba con el resplandor del sol, azul como si fuera un día hermoso en el cual se debía salir a disfrutar plácidamente mientras el aire sacudía tus cabellos. Setesh miraba el hermoso cielo y de pronto vio un cometa surcar el cielo con una cola negra de humo. Una parvada surco el cielo y estaban sobre él con mirada burlona.

-Vuela... pequeña ave. –dijo alzando la mano. –Y llévame contigo lejos, donde está el sol.

Los gritos que hacían de fondo comenzaron a cobrar fuerza junto el sonido de las flechas echando uno que otro chiflido que parecía lastimar los cuerpos. Las espadas chocando, los gritos de agonía, la sangre manchando la tierra seca y el sudor del esfuerzo. Miro a su costado y yacían tres cuerpos mutilados.

-¿Esto... es lo que los humanos buscan? –murmuro con asco.

Dos caballos le pasaron al lado y enfrentaron en lugar de los muertos. Cuando se está peleando se olvida de verificar si alguien ha quedado vivo en el suelo y se les mata pisándoles por ser débiles y sucumbir ante la lucha. Setesh los miraba con sorpresa al ver como no temían el seguir blandiendo sus armas en pro del sueño de alguien más.

Matsuri lo tomo de la hombrera y lo levanto con fuerzas y le lanzo un puñetazo a la cara mandándolo de nuevo a suelo.

-¡LEVANTATE, PEDAZO DE MIERDA! –grito dándole su espada que estaba al lado de él. -¡SI NO LUCHAS MORIRAS, IMBÉCIL!

Setesh sostuvo su arma y la miro con expresión repulsiva y de pronto quiso tirarla. Sus ojos derramaron lágrimas y miro a Matsuri.

-¿POR QUÉ PELEAR? ¡SOLO ESTAMOS MATANDO! SIN NINGUN SIGNIFICADO. –Le grito a Matsuri.

Un enemigo se acercó hasta Setesh y estaba bajando su espada para cortarle la cabeza cuando Matsuri le empujo y asesino al otro partiéndole la columna con su garrote lleno de picos.

-¡SI QUIERES UN MOTIVO PARA EMPUÑAR UNA ESPADA ES PARA QUE VIVAS, ESTÚPIDO! –dijo tomándole del mentón para traerlo cerca. -¡SI NO PELEAS Y DEJAS QUE ESTA GENTE GANE MORIRÁS O SERÁS PARTE DE SUS EXPERIMENTOS! ¿DESEAS VIVIR ASÍ?

Setesh la miro con miedo en sus ojos que salían de orbitas.

-¿CREÍSTE QUE ESTAR EN LA GUERRA ERA FÁCIL? ERES UN IDIOTA, AQUÍ SOLO HAY MUERTE Y DOLOR, SINO PUEDES SOPORTARLO LÁRGATE DE AQUÍ, DEBILUCHO.

Matsuri siguió avanzando, matando y desgarrando la piel de otros mientras defendía un sueño que era ajeno a Setesh, a todos allí. Miro a su alrededor y todos tenían miedo como él, pero seguían adelante, mostrando que eran dignos de vivir y avanzar.

-¡LUCHEN! ¡AVANCEN! –grito Mei cabalgando al lado de Yuzu y Flora. Su rostro estaba concentrado en avanzar. -¡SEAN FUERTES PARA INMORTALIZAR SU ALMA!

Más soldados llegaban y peleaban aun cuando veían que los demás morían, ¿es que no tenían miedo?

-¿Qué haces novato?, ¡muévete o te mataran! –dijo un soldado que le empujo adelante.

-¿No tienen miedo? –pregunto deteniéndolo. –Pueden morir si siguen adelante.

-Sí, ¿y qué? –dijo sonriendo. –Preferimos morir peleando por nuestra libertad comandados por la princesa, ella lucha por nosotros para salvarnos de este infierno.

Setesh la admiro y supo que ella era como ver un héroe de leyenda, que dirigía a los humanos temerosos a su salvación.

-Y la seguiremos hasta el final aun si cuesta la vida. –sonrió de nuevo para correr a la pelea. -¡PARA ASEGURARNOS UN FUTURO DONDE VIVAMOS EN PAZ!

Setesh lo vio partir y pareció entender un poco ese sentimiento de querer ser guiado por alguien superior a una meta más poderosa y llenadora. Que alguien le diera una misión y significado a su vida mediocre. Apretó su espada, sí tal vez moriría pero tenía derecho de aferrarse a la vida y labrarse un destino que deseara.