●CAPÍTULO DOCE.

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Maratón  06/10

Entre a la casa, escuchaba como Griselda discutía con Tiago en voz baja. Cuando cerré la puerta se quedaron callados.

- ¿Pasa algo?- pregunte con las cejas fruncidas, re metida pero bueno, quería saber.

- Que te importa- solto Tiago de una forma brusca, y se fue a su pieza, efectivamente dormía a donde yo dije.

- Pendejo atrevido- dijo mientras iba atrás de él, pero yo la frente y negué restándole importancia.

- Le estoy diciendo a Tiago que te pase su cama y el duerma en un colchón abajo- Dijo comentandome la situación.

- Oh pero yo puedo dormir en el colchón, no tengo drama- dije, no quiero ser molestia y menos si Tiago no quiere pasarme su cama.

Ella negó varias veces y entró a la pieza de Tiago, yo la seguí porque sabia que era para pelea. Él estaba tirado en la cama con auriculares y mirando su celular. Su mamá le hablaba pero él la ignoraba.

- Gri, no importa me acuesto en el colchón, vaya a descansar- dije y le sonrei para que se calmara, aparte no quería que siga insistiendo con el tema, me ponía incómoda, me re sentía un estorbo.

- ¿Estas segura?- pregunto seria, yo solo asentí y le sonrei. Ella me deseó buenas noches y se fue a dormir. Mire el colchón que se encontraba justo al lado de la cama de Tiago pero en el piso.

Busque algo cómodo para dormir, saque un pantalón corto y un remeron que siempre usaba con pijama. Mire a Tiago y el segui concentrado en su celular.

Me saqué la remera rápido y me puse el remeron, como me quedaba grande me saqué el pantalón, total el remeron me llegaba hasta los muslos. Me puse el pantalón corto y me fui hasta el colchón.

Me recosté sobre las frazadas y agarré el celular, le contesté algunos mensajes a Farfa, en estos momentos necesitos sus consejos o sus chistes.

Me tapé y me acomodé para dormir, cerré los ojos, mis pensamientos no dejaban de molestarme, y claro culo inquieto se movía para todos lados.

- Voy a tener que atarte así te dejas de mover- dijo Tiago bajito asi no escucha su mamá, yo solo bufé molesta, porque tenia razón estaba muy inquieta.

- No puedo dormir- dije con el mismo tono, siempre que pasaba eso él me abrazaba, esperaba que eso pasara ahora.

- No me importa, deja de moverte- dijo molesto, senti como se daba vuelta y me daba la espalda.

Desde ahí no hablamos más y me dormí como a las 4 a.m.

Me desperté porque escuchaba ruido en la cocina, me levanté y vi a un Tiago muy dormido con la boca entre abierta. Baje un poco mi mirada y vi su torso desnudo, cerré los ojos y me fui a asear al baño.

Saludo a Gri en el camino, hice mis necesidades y salí. Fui a la habitación, miré la hora, 10 a.m. busque ropa para ponerme. Elegí un joggin negro con un top blanco sencillo.

Tomamos mates con Griselda y le pregunte dónde podía ir a ver departamento hoy.

- ¿Tan rápido te querer ir?- dijo tristona, ay no me va a hacer sentir mal. Yo solo le sonrei y agarré su mano.

- No, solo quiero encontrar un lugar para ya instalarme, no quiero molestar acá- dije mientras le apretaba un poco la mano.- Aparte me va a tener cerca- dije sonriéndole.

- No molestas acá- dijo mientras cebaba otro mate y me lo pasaba.- Si por Tiago no te preocupes, el se va acostumbrar- mencionó eso por lo que pasó anoche.

Yo solo negué y seguimos hablando de otras cosas, después se levantó Tiago y se unió a lo mates.

- Bueno mis niños, me tengo que ir a trabajar- Dijo la mamá de Tiago mientras agarraba su cartera. Lo que sabía es que estaba trabajando como niñera, y Tiago se encargaba de Ambar cuando llegaba de la escuela. Cuando él no podía la cuidaba su abuela.

Nos dio un beso en la cabeza a cada uno y se fue. Ambos nos quedamos en silencio, decidí seguir con los mates, era temprano, sabía que Ambar salía como a las 12:30.

Tire la yerba y le puse nueva mientras calentaba la pava, Tiago seguí con ese bendito celular. Acomode las cosas en la mesa y hice el primer mate, lo tomé, hice otro y se lo tendi.

El me miró y levantó una ceja, lo agarró y lo tomó. Hicimos eso por un rato, tomar mates sin hablar.

- Yo entiendo que pasó mucho tiempo y que ya no es la misma confianza- dije jugando con la miga de la galletita, haciendo figuras abstractas.- Pero no por eso me vas a tratar así- Desarme las figuras y lo junte todo.

- No se como te estoy tratando, pero si sos una sensible de mierda no es mi problema- dijo mientras me pasaba el mate y volvía a posicionar sus ojos en su celular.

Yo me pare y fui a la pieza, me senté en la cama, mi respiración se empezó a acelerar, un nudo en mi garganta apareció.

Agarre algunas cosas que había en un escritorio que tenia Tiago y lo puse en mi bolso, lo siento mucho por Gri pero no voy a soportar que este pibe me trate así.

Con los ojos llenos de lágrimas agarré mis cosas y salí para la cocina. Tiago seguía sentado en la mesa.

Cuando estaba llegando a la puerta sentí como Tiago me agarraba del brazo.

ojitos tristes - Tiago pzkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora