●CAPITULO TRAINTA Y SEIS.

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Tiago me contenía en sus brazos mientras yo lloraba sin parar.

Me sentía tan débil, tan triste y cansada, todo vino tan de golpe.

- Todo va a estar bien amor- Susurraba Tiago en mi oído.

El susto del accidente, y después la sorpresa del embarazo me tenían tan frustrada.

- Otro bebé...- Solloze, no podía ser tan descuidada, como iba a hacer ahora, Isa todavía es una bebé.

- Amor, vamos a salir adelante juntos- Dijo dejando un beso en mi cabeza, tratando de calmarme.

Levante la cabeza y lo mire a los ojos, aquellos ojos que hoy se ven tan desanimado, cansados y asustados.

Me acerqué a él, dejando un beso en sus labios. Teníamos que ser fuertes, por Isa, y por el bebé que viene en camino.

- Promete que vamos a estar juntos, que nada nos va a separar- Dije tratando de dejar ese miedo a la soledad.

- Te lo prometo- Susurro cerca de mis labios. - Te amo tanto- Dijo finalmente y unió nuestros labios.

(...)

Me desperté tarde, escuchaba voces en la cocina, y a Isa reirse.

Me levanté y fui directamente al baño, hice mis necesidades, me mire al espejo, tenía ojeras y los ojos hinchados de tanto llorar anoche.

Volvi a la pieza y me cambié, seguía escuchando a Tiago hablar con alguien, era la voz de una mujer, supongo que debe ser Gri.

Empecé a ir a la cocina y a medida que me acercaba me di cuenta que si era Griselda, se encontraba tomando mates con Tiago.

- Buen día- Dije con voz de dormida, Gri se levantó y me abrazó.

- Buen día hijita ¿cómo estás? ¿Te duele algo?- Preguntó preocupada, yo negué repetidamente con la cabeza.

- M-mamá- Dijo Isa estirandome los brazos para que le hiciera upa, salude a Ambar y agarre a mi hija.

Me sente alado de Tiago, quien rápidamente me dio un beso en el cachete, haciendo que Isa se enojara, tirándole un manotazo.

- ¿Porque no me dejas darle besos a mamá, hija?- Pregunto Tiago, haciendo pucherito, rápidamente mi hija estiró los brazos hacia su papá.

Tiago la tomó en sus brazos y ella lo abrazó, escondiendo su carita entre el hombro y el cuello de su papá.

Yo miraba la situación embelesada ante tanta ternura, al igual que Gri.

- Ella está enamorada de su papá- Dijo Gri feliz, sabía que ella estaba contenta de vernos a los tres juntos.

- Si, es muy celosa también- Dije mientras tomaba mate.- Yo no me puedo acercar a Tiago cuando esta ella- Solte entre risas, termine el mate y se lo di a Griselda.

- Ma, hay algo que tenemos que contarte- Dijo Tiago, mientras se ponía serio.

Habíamos quedado en contarle a su mamá lo antes posible, porque lo que más necesitamos es el amor y el apoyo de ella.

- Si, me di cuenta, los dos están raros, decaídos- Dijo Gri haciendo otro mate, nos hizo un gesto para que hablemos.

- Bueno, pero quiero que estés tranquila si- Le dijo Tiago tratando de que la noticia no choque tanto.

- Gri, ayer después del accidente tenía mucho dolor en la espalda y me tuvieron que hacer una ecografía- Dije explicándole cómo empezó todo.

- Yo llegué justo cuando le iban a hacer la ecografía, así que estaba con ella- Conto Tiago. -Y el doctor me preguntó si yo era su novio, cosa que nos pareció raro a los dos- Explico el pelinegro, mientras Isa le apretaba los cachetes, quitándole lo seria a la situación.

Reprimi un risa, al ver que Isa le tiraba el pelo a Tiago, mi hija estaba muy inquieta últimamente.

- ¿Y qué salió en la ecografía?- Pregunto preocupada Gri, creo que espera de todo menos un bebé.

- Bueno... eso te lo va a decir Lex- Dijo Tiago rápidamente, dejándome la parte más difícil, lo mire con mi mejor cara de orto.

Tome aire y lo mantuve un ratito, Gri me miraba ansiosa e impaciente, al igual que Ambar, que se había sentado junto a ella.

- Vamos a ser papás... otra vez- Dije tratando de sonar tranquila, pero en realidad tenía ganas de vomitar.

- ¡¿QUÉ?!- Grito Ambar con una sonrisa en su cara, salió disparada a abrazarnos.

Griselda se quedó en silencio, seria, nos miraba atentamente, no mostraba ningún signo de felicidad ni de enojo.

Mire a Tiago para que diga algo, pero el agacho la mirada, rápidamente se levantó y se fue a la pieza.

- Amor...- Dije tratando de que se quedara, pero no me hizo caso y se fue con Isa.

- Yo no puedo creer de que sean tan irresponsables- Dijo Griselda levantándose, agarrando sus cosas para irse.

- Ni nosotros, pero ya está, no hay vuelta atrás- dije tratando de que entendiera que ahora no sirve de nada quejarse ni enojarse.

- ¡Estoy muy decepcionada con ustedes, no pueden ser tan descuidados!- Solto enojada, nunca me había hablado así.

Agarro a Ambar del brazo y se fueron, cerrando la puerta de un golpe.

Me quedé estática, mirando la puerta, nunca imaginé que Griselda se iba a enojar.

Rápidamente fui hacia la pieza encontrandome con Isa sacándole las lágrimas que caían por el rostro de Tiago. 

Me senté junto a ellos, acaricie la espalda de mi novio, tratando de que se calmara. 

- Vi la decepción en sus ojos- Dijo Tiago sollozando, me partió el alma, su mamá es todo para él.

- No amor, ya se le va a pasar, va a pensar bien las cosas y va a volver- Dije tratando de que entendiera que es el enojo, todo lo dijo caliente.

- La escuche, que estaba decepcionada de nosotros- Dijo despacito, sabía que le dolió y a mi también me lastimó, pero tenemos que dejarla.

- Amor, cuando ella se de cuenta de que no sirve nada enojarse va a volver, en algún momento va a querer cocer a su nieto- le dije mirándolo a los ojos, tratando de tranquilizarlo.

Le di un beso corto, pero puso una de sus manos en mi nuca y unió nuestros labios nuevamente, pero más profundo, con mas sentimiento.

Nos separamos cuando Isa empezó a pegarnos y a tirarnos los pelos. Ambos la miramos y ella sonrió, nuestras princesa.

- Así que nieto, vos decís que va a ser nene- Preguntó Tiago más tranquilo, lo mire y sonrei.

Espero que sea un nene...

***
Aparezco... ah

Estoy re desaparecida, pero es por soy una señora y estoy trabajando, entonces no tengo tiempito jajaja

Gracias por que siguen bancando. Lxs amoooo mucho!

ojitos tristes - Tiago pzkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora