[2] LA HERMANDAD

301 43 106
                                    

He visto cientos de películas adolescentes con fiestas épicas en ellas

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

He visto cientos de películas adolescentes con fiestas épicas en ellas. Esto no es lo que pensé que sería, para ser sincera, me doy cuenta de lo mucho que miente la T.V.

A donde quiera que veo, los chicos están drogándose como si esto fuese una fiesta en Ámsterdam. Jamás había visto cocaína en mi vida y tampoco había visto algo desaparecer tan rápido como lo hizo ese polvo blanco en la nariz de aquella chica.

Soy buena para fingir, pero no estoy segura como mirar todo esto sin sentirme incomoda. El humo sobre nuestras cabezas, las luces neones y la música electrónica me están causando un efecto nunca antes experimentado.

Apenas pasé la recepción y ya me ofrecieron droga más de cuatro veces. Estoy comenzando a creer que he entrado a la dimensión desconocida... y no me gusta nada.

Voy a sonar muy Jasper, pero no puedo creer que esto esté pasando bajo las narices del decano. Alcohol, drogas, chicos cogiendo en cada rincón del lugar y todos parecen tan normales... es una locura.

Me limito a seguir a Nick y sus amigos con cuidado de no pisar ni chocar contra nada ni nadie. Varios se acercan para saludar a Nick, parece ser un chico popular por aquí.

—¡Oye! ¡Sonríe! —exclama tomando mi mano—. Vamos, te conseguiré algo para entrar en calor.

¿Calor? ¿Más del que hace aquí? ¡Claro corporal que expiden esos exhibicionistas! Agg, creo que acabo de ver las anginas de alguien. Me concentro en los pies de Nick y lo sigo hasta lo que parece ser la cocina, bueno, veo una estufa y muchos vasos rojos junto a cientos de botellas sobre una isla en medio de la habitación.

Nick se inclina para hablarme al oído, con la música tan alta es la única forma de comunicarse.

—Bien, ¿Qué tipo de chica eres?

—¿A qué te refieres? —pregunto extrañada, esa pregunta puede tener muchas respuestas.

Me sonríe mostrando sus perfectos colmillos.

—¿Cuál es tu bebida?

Mis ojos recorren todas las botellas sobre el granito color marrón, cuando vuelvo hacia Nick, él me mira con curiosidad.

—Ah, en realidad no bebo —digo sintiéndome estúpida.

¿Qué clase de chica de 19 años no bebe? Pues una que sea médica.

—¡¿Bromeas?!

—No —niego con la cabeza haciendo un gesto por el ruido—. No puedo, me estoy medicando.

Él abre los ojos como canicas brillantes.

—¡Santo cielo! ¿Estás enferma?

—No es nada grave —le informo—, una simple gripa.

Boca mentirosa.

—De acuerdo, entonces te daré un poco de esto. —Toma una botella de Vodka con etiqueta azul y la vierte en un vaso rojo—. Ni lo sentirás, confía en mí —me guiña un ojo antes de saludar a alguien que pasó frente a nosotros.

MI VIDA AL REVÉS ✔ [Spin-off de ¿EEAR?]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora