ᴿᵒᵗᵒ ʸ ᵉˣᵗʳᵃᵛᵃᵍᵃⁿᵗᵉ ✁ ᴱᵈʷᵃʳᵈ ˢᶜⁱˢˢᵒʳʰᵃⁿᵈˢ.

²⁷: ᴿᵉᵉⁿᶜᵘᵉⁿᵗʳᵒ.

"There is something that I see

In the way you look at me

There's a smile, there's a truth

In your eyes

But in an unexpected way

On this unexpected day

Could it mean this is where I belong

It is you I have loved all along

It's no more a mystery, it is finally clear to me

You're the home my heart searched for so long

And it is you I have loved all along

There were times I ran to hide

Afraid to show the other side

Alone in the night without you

But I know just who you are

And I know you hold my heart"

"Over and over I'm filled with emotion
Your love rushes through my veins
And I am filled with the sweetest devotion
As I look into your perfect face"

It is you de Dana Glover.

La felicidad invadía el cuerpo de Lilith como si un milagro hubiera sucedido frente a sus ojos, aunque prácticamente aquello había pasado en estos instantes.

Lilith se sentía eufórica y extasiada por estos sucesos que comenzaban invadir su vida, pues que nuevamente estuviera en este pueblo era un sueño hecho realidad, que ninguna otra persona se lo iba a arruinar.

El camión de mudanzas estaba frente a su nuevo hogar, Arthur mandaba a la gente a acomodar las pertenencias por el lugar, los vecinos observaban ahora de forma más descarada, pero a Lilith no le importaba aquello, para nada, porqué su vista estaba enfocada en contemplar aquel castillo en ruinas en la colina, en aquel castillo en donde vivía su Edward.

El corazón de Lilith latía con rapidez, porque aún no se creía que todo estaba sucediendo, aunque agradecía que fuera así, agradecía estar en su verdadero hogar.

Lilith sonrió y fijó su vista en Arthur que parecía estar muy ocupado ordenándoles a los hombres que acomodaran todo con precaución, ya que era claro que iba a ser un caos esta mudanza. Para empezar, Arthur no había preparado nada, y por ello, no estaba ni bonita la casa, sin contar que Laila mandaba mensajes con frecuencia preguntando por cada detalle, por desgracia, había cosas más importantes que contestarle. Y se notaba en la mirada de Arthur. Sin embargo, a pesar del estrés del hombre, la mujer no pudo evitar correr a abrazarlo y sorprendiéndolo. Él aceptó el afecto de su hija, y al termino de esté, la mujer se alejó de él y sin perder tiempo y sin importarle que hubiera miradas curiosas, comenzó a caminar hacia Edward, en dirección de la colina.

Fue muy discreta al introducirse al bosque, que nadie la vio. Cuando la mujer finalmente subió todo ese camino, comenzó a buscar atentamente a su amigo, rezando que estuviera bien a pesar del tiempo pasado.