꧁§░𝕄𝕒𝕤 𝔸𝕝𝕝𝕒 𝔻𝕖𝕝 ℍ𝕠𝕣𝕚𝕫𝕠𝕟𝕥𝕖░§꧂

«CAP 8»💀❤

Ambos estaban caminado por la plaza para encontrar un poco de ramen que se le había antojado al hermoso rubio, por lo cual el azabache se dispuso a encontrar lo que su rubio amor deseaba, asi que se separaron por un momento.

El rubio estaba buscando muy concentrado su comida favorita, así que no se dio cuenta de que había chocado con una señorita por error.

Lo-lo siento mucho, discúlpeme por favor- decía el rubio avergonzado, por su equivocación y tratando de ayudar a la jovencita.

Déjame, no me toques doncel estúpido, es que acaso no te das cuenta por donde andas!- dijo muy enojada la chica de cabello pelichicle, golpeando la mano que le extendió el doncel para ayudarla a levantarse.

De verdad lo siento, señorita- dijo el rubio intentando alejarse.

Jaja, que gracioso así que un torpe doncel como tu tiene modales, eso no me lo esperaba, creí que eras un simple tarado, igual que el resto.- dijo la muchacha burlándose del doncel.

La verdad, no me interesa el hecho de como me vea "señorita", además no la conozco y ni me interesa, así que con su permiso, me retiro- dijo el rubio, ya molesto por la actitud de aquella mujer.

A no, tu no te vas- dijo la pelichicle, tomando y jalando del brazo al doncel, bruscamente.

Le pido que me suelte, señorita- dijo con el seño fruncido el rubio doncel, le estaba doliendo el brazo por el agarre de la pelichicle.

Y es que acaso no sabes quien soy, niño tonto!- dijo enojada y burlándose del doncel.

La verdad es que no, no lo se, señorita, y con todo respeto, no me interesa- dijo el rubio, soltándose del agarre de la pelichicle.

Ja, para tu información, soy Sakura Haruno, la siguiente en heredar la mayor parte de estas tierras, por lo tanto, tu y estos pueblerinos, me pertenecen, por lo cual puedo hacer lo que quiera, cuando quiera, con ustedes- dijo la pelichicle llena de arrogancia.

Pues diga lo que quiera, a mi no me importa, quien sea y mucho menos le pertenezco a usted, así que me retiro, por cierto, ahórrese sus comentarios, talvez pueda comprase mas tierras- dijo el rubio riéndose de la mujer, por las palabras tan absurdas que había dicho, sin embargo, con un poco de miedo, por lo que le pudiera hacer esa mujer, con su dinero.