Capitulo 36

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A excepción de los escombros que se asentaron, el silencio lo rodeó.

Tumbado boca abajo y sin aliento desde su aterrizaje, Harry trató de calmarse lo suficiente para pensar. Incluso con solo mentir donde estaba, Harry sabía que esta situación no era buena. El Ministerio tenía capas de siglos de antigüedad que protegían el edificio, por lo que o los Inefables se habían entrometido en algo que se suponía que no debían hacerlo, o esto se había hecho a propósito.

Había un peso encima de él, que había aterrizado al mismo tiempo que él, un líquido pegajoso empapaba su túnica, sangre si no se equivocaba. Pero, ¿por qué no le dolía la espalda si estaba herido? Y el peso encima de él era demasiado cálido para ser un pedazo del piso roto.

Girando la cabeza para mirar hacia atrás, Harry apretó los dientes para evitar vomitar. No podía ver el rostro de la persona que yacía encima de él con ellos acostados de espaldas. Pero el sombrero de color rosa le dio una buena idea de la identidad de la persona. ¿Cómo había terminado allí siquiera cuando habían estado en habitaciones separadas?

Girándose, Harry separó el cuerpo del suyo, haciendo una mueca cuando más sangre se filtró por su ropa. Pero con ella removida pudo moverse nuevamente.

A pesar de la caída, se sintió aliviado al descubrir que estaba algo ileso, habría algunos moretones en la espalda donde la mujer había aterrizado sobre él y los viales se clavaron en su piel, pero hubiera sido mucho peor si no fuera por el gigante. oso de peluche de color verde azulado en el que estaba acostado.

Sus brazos temblaron cuando Harry se niveló, necesitando saber cuál era la situación actual.

Encima de él, la mayor parte del techo había desaparecido, la suposición de Harry era que la habitación en la que había estado había sido una de las últimas en ser afectada por lo que había causado que se hundiera, una gran razón por la que no estaba enterrado escombros ahora mismo.

A su alrededor, la gente parecía estar levantándose. Algunos, como él, habían tenido la suerte de aterrizar sobre algo blando, mientras que otros no habían tenido tanta suerte y Harry se obligó a no mirarlos, sabiendo que no podía hacer nada por ellos, por mucho que odiara admitirlo. .

Una parte del techo se rompió y aterrizó no muy lejos de donde estaba sentado Harry, causando que el vidente saltara de miedo al darse cuenta de que no podía quedarse donde estaba. Sin embargo, si el piso volviera a fallar, el oso de peluche definitivamente suavizaría la caída.

Se cortó del osito de peluche, dándose cuenta de lo grande que era cuando tenía ambos pies plantados en el suelo y se encontró incapaz de mirar por encima de su parte superior.

La destrucción había dejado una quietud antinatural detrás. Por un momento, Harry temió ser el único que quedaba con vida. Había más cuerpos inmóviles esparcidos por el suelo entre los escombros y aún más podrían estar enterrados bajo los escombros.

Pero el miedo no duró mucho. La gente emergió, un poco deslumbrada pero en su mayoría ilesa debido a sus propias reacciones rápidas.

"¡Harrykins!" El vidente no tuvo tiempo de agacharse antes de que unos brazos delgados se envolvieran alrededor de su cuello y Harry encontrara su rostro enterrado en un pecho bien desarrollado. "Oh, mi dulce y pequeño Harrykins, ¿tienes idea de lo preocupada que estabas haciendo que tu tía Bellatrix? Viéndote caer así, si me salen algunas canas, terminas sobre mi rodilla, joven."

Finalmente, el agarre se aflojó lo suficiente como para permitir que Harry retrocediera y tomara profundas bocanadas de aire antes de ser arrastrado hacia atrás por Bellatrix, quien continuó preocupándose por él, completamente ajena al caos y el pánico que los rodeaba.

Pequeño vidente de HuskyWalkerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora