Si me amas, ¡dímelo!

Capítulo 9: Un acercamiento peligroso

Los personajes pertenecen a nuestra amada escritora JK Rowling, la trama es de mi propiedad.

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Esa mañana Hermione se despertó. Aún estaba en la enfermería y ya se sentía mejor.

—Señorita Granger, ya ha despertado ¿Cómo se siente?—
dijo la enfermera examinándola.

—Ya estoy bien, ¿cuando iré a mi sala común?— espeto la castaña.

—Eso es muy bueno, desde ahora tiene el alta— agregó la enfermera.

—Gracias por cuidar de mi Sra. Pomfrey— dijo saliendo de la enfermería.

Mientras tanto en la Sala de Menesteres…

Harry y Ginny seguían dormidos,  los rayos del sol golpearon de lleno en la cara de la pelirroja. Vio a Harry dormido así que se desprendió del abrazo del pelinegro, decidió no despertarlo. Se veía tan lindo, tan sereno y salió de la sala.

Harry al tiempo despertó y Ginny ya no estaba ahí, así que se acomodó su uniforme y salió de la sala.

Mientras tanto en la sala común de Slytherin…

Varias serpientes ya se habían despertado, Blaise y Theo se estaban preparando para salir al Gran Comedor.

—¿Hay que despertar a Draco? De seguro aún sigue dormido— dijo Theo.

—Ve y despiértalo, yo ire al Gran Comedor— dijo Blaise saliendo de su sala.

—Está bien— dijo el castaño.

Theo se dirigió a la habitación para despertar a su amigo.

—Draco, Draco despiértate— sonó el castaño.

El joven rubio no despertaba, sudaba mucho y estaba soñando algo realmente espantoso.

—Draco, despiértate—
Seguía insistiendo el castaño. Lo zamarrea y el rubio poco a poco se va despertando.

—¿Qué quieres Nott?— preguntó entre dientes el rubio.

—Despierta idiota, se nos hará tarde para desayunar. Veo que has tenido una pesadilla, estas sudando— respondió en seco Theo.

—Eso es algo que no te incumbe— agregó el rubio.

—Vamos, Draco te conozco. Todavía sigues preocupado por tu familia y por la misión— le dijo su amigo.

—Has dado en el blanco pero hay otra cosa que me preocupa y eso no te interesa— dijo sobrándolo con la mirada.

—¿Es Granger, no? Sé que como la miras. Además hace noches atrás escuche que balbuceabas su nombre— dijo en tono burlón.

—¿Estas bromeando? Como puedo decir el nombre de esa sangre sucia, con tan solo verla ya me repugna— dijo en tono serio.
—Ya vete que me quiero darme un baño antes de ir a desayunar— agregó al final.

—Como digas— dijo Theo entre risas y salió de la habitación.

Draco sabia que su amigo tenia razón, notaba a Hermione muy hermosa ese año y sentía un deseo que lo consumía además se quedó con las ganas después de aquel beso. Él, Draco Malfoy, deseando a una sangre sucia, eso no puedo pasar.

Tuvo el mismo sueño que la vez anterior, pero siempre cambiaba a la misma imagen de estar en su mansión y ver que sus padres lo presionaban para que cumpliera sin ningún problema el deseo del Señor Tenebroso.

Eso lo desesperaba y lo hacia dudar. Estaba bajo presión por parte de sus padres pero quería tener un año tranquilo en Hogwarts por lo que le quedaba de estadía.