Si me amas, ¡dímelo!

Capítulo 22: Estoy de vuelta

Los personajes pertenecen a nuestra amada escritora JK Rowling, la trama es de mi propiedad.

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Veinte minutos después, los padres de Hermione estaba saliendo de la sala ya que necesitaba descansar.

—¡Hija! Debemos irnos. Aquí los médicos te cuidaran muy bien. Mañana si dios quiere te darán el alta. Debes descansar— su madre se acercó y le dio un beso en su frente mientras su padre asentía.   

—¡Adiós mamá! Estaré bien— la castaña les sonrió.

En la madriguera se encontraba en una situación de tensión, fue destruida por el fuego completamente. Los Weasley estaban muy enojados con los mortifagos, se metieron con algo que no debían: su familia.

—¡Molly! Quédate tranquila. Saldremos adelante— animaba Arthur a su esposa. Molly asintió. Los demás Weasley se encargaran de preparar nuevamente el terreno para la reconstrucción de la casa nueva. Una lechuza venia volando en dirección a los pelirrojos y Harry.

—¡Eso es una lechuza!— gritó Ginny y los demás se giraron en torno a la misma.

Una carta cayó sobre la joven y le causó curiosidad. Era de los padres de Hermione, al parecer algo había pasado.

Familia Weasley:

Debemos contarles algo muy importante. Ayer en la fiesta de Navidad, Hermione tuvo un accident. El doctor detectó su pérdida de memoria. Claramente confiamos en Dumbledore y la ha estado cuidando muy bien. El punto es que ha recuperado su memoria totalmente. Se les realizarán exámenes médicos y se le dará de alta del hospital, si todo sale bien.

Por favor avísenle a Harry.

Muchas Gracias.

Sr. y Sra. Granger.

Ginny leyó la carta, estaba muy contenta ya que su amiga había recuperado la memoria. Les dijo al resto de la familia y a Harry. Los cuales se alegraron y estaban muy entusiasmados por verla de nuevo excepto un pelirrojo que desde un sillón se mostraba serio y tanto enojado.

A Ron Weasley no le emocionaba la idea de que Hermione recuperara su memoria. Estaba enojado por lo que había pasado con Draco Malfoy.

—¡Hey, Ron! ¿Por qué esa cara?—
pregunto Fred.

—No te importa.

—Y no te pone feliz que tu amiga haya recuperado la memoria

—No insistas y déjame en paz— gritó furioso captando la vista de todos. Ron se alejó un poco, se dirigía a un árbol en donde jugaban cuando eran niños. Una vez Hermione y Harry fueron a ese lugar. Muchos recuerdos atormentaban al pelirrojo.

Ya era demasiado tarde. Aunque aún estaba enojada con la castaña, de a poco iba admitiendo sus sentimientos. Un terrible remordimiento lo atacó por no darse cuenta antes y estar tan ciego con Lavender.

"¿Deberé recuperarla?" pensó mientras transcurría la siesta de ese dia.

Un joven rubio sumido en sus pensamientos caminaba rápidamente hacia los jardines de la Mansión Malfoy. Solo una razón lo tenía muy preocupado: la castaña.

—¿Cómo dices Bella?— preguntó atónita Cissy.

—Como escuchaste.
La bruja sonrió maliciosamente.

Draco se dirigió a ellas. Algo no andaba bien y el semblante de su madre se mostró serio y de sorpresa a la vez.

—Madre, ¿qué ocurre?— el rubio se acercó hasta su madre.