Capítulo 18: El baile de Navidad

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Los personajes pertenecen a nuestra amada escritora JK Rowling, la trama es de mi propiedad.

♧♧♧

La pelirroja caminaba detrás de sus amigos hasta que una mano le tomó la suya y la arrastró hasta detrás de un árbol.

La atrajo más a él y le dijo.

—Otra vez nos volvemos a ver linda pelirroja.

—¿Qué quieres Blaise?— preguntó.

—¡Verte!— respondió confiado.

—¡Ah si! Que interesante. —lo ignoraba completamente.
No quería serle infiel a Harry una vez más.

Ginny se alejaba y Blaise la tomó del brazo nuevamente.

—¿Qué haces?— moviéndose del agarre.

—¿Quiero invitarte al baile preciosa?— concluyo Blaise.

—¿Qué?— sorprendida lo miro a los ojos.

—Como escuchaste.

Ginny pensaba que ya se habia vuelto loco para preguntarle semejante estupidez.

—Eso no será posible, iré con Harry al baile.

—¡Uh que lastima! Pelirroja te perderás de toda esta belleza— sonrió pícaro.

Ginny se rio por lo bajo y se alejó dejando al moreno debajo de ese árbol.

Se acercó al castillo y le pidió a Harry hablar con él.

Cuando llegaron hasta un pasillo alejado, hablaron tranquilos y muy enamorados. Harry le propuso ir al baile con él por lo cual Ginny aceptó y le dio un tierno beso en la mejilla sonrosada.

El tan ansiado baile llegó, el Gran Comedor estaba muy bien decorado gracias a los prefectos y premios anuales de cada casa.

Las féminas del colegio ansiosas con sus vestidos de gala y esperando a sus parejas por todos los pasillos del colegio. Los hombres se veían tan guapos con sus trajes.

Hermione se compró un vestido que encajaba con su sutil silueta,  Ginny tenía un vestido corto y Luna parecía una princesa con su vestido de color cielo y sus aretes de rábano.

Por su parte Harry y Ron ya tenían sus respectivos trajes de gala y bajaron a la sala común a esperar  a sus parejas de baile.

—Wow, te ves preciosa Ginny—alegó Harry mirándola sonrojado.

 —Tú también.
Le respondió con una sonrisa en los labios.

Ambos bajaron al Gran Comedor y se encontraron con los demás estudiantes.

El clímax se estaba sintiendo en el Gran Comedor, los alumnos animaban con cada canción que sonará.

—Hermione, te ves increíblemente bien— Ron asombrado dijo con sus mejillas de color escarlata.

—¡Muchas gracias!— respondió Hermione tímida.

Ambos bajaron al Gran Comedor.

El Gran Comedor ya se encontraba repleto de alumnos ansiosos de que ya comenzará el baile.

El director se levantó de su asiento y dirigió unas palabras a los alumnos.

—Me complace darles la bienvenida al baile de Navidad, por favor les pido a los prefectos y premios anuales que abran el baile. Por favor vayan al centro de la pista.

Los prefectos y premios anuales se posaron en medio del Gran Comedor. La música empezó a sonar y las parejas danzaban al ritmo de ella, al instante más parejas se sumaban a estas, hasta que se concluyó completamente la apertura del baile. 

La música de apertura terminó y dio paso a una más movida, los adolescentes se descontrolaron al ritmo de ella.

Hermione y Ron bailaban animadamente hasta que Lavender tomó del brazo del pelirrojo, lo atrajo hacia ella y le planto un beso pasional  frente a ella.

Hermione vio la escena y decidió dejarlos solos, algo en su interior pareció dolerle. Las lágrimas se harían presente en cualquier momento y no quería que nadie la viese en ese estado.

No sabía si quería a Ron o no, pero ver esa escena le partió el alma. Un fuerte dolor de cabeza se presentó, se fue a sentar y tomar un poco de agua para calmarse pero no fue así. Un recuerdo estaba llegando a su mente o mejor dicho se estaba desbloqueando.

"¡Hermione! sonaba un niño mientras veía el cuerpo petrificado de la castaña"

"El pelirrojo abrazo a la joven cuando estaban por decapitar a BuckBeak"

"El pelirrojo estaba celoso de Víctor Krum y no quería demostrarlo frente a ella"

Mas recuerdos se hicieron presentes esa noche.

"¡Oh no puede ser! He recordado a Ron, a Ronald Weasley" pensaba mientras una lagrima rodaba por su mejilla.

Harry y Ginny se acercaron a ella.

—Hermy ¿estás bien?— preguntó la pelirroja preocupada por su estado.

—¿Qué?
Miraba confundida a Ginny.

—¡Hermione!— sonó preocupado Harry.

—Creo que estoy bien. ¡Iré a la enfermería!— exclamó confundida.

Harry y Ginny se quedaron preocupados por la situación de su amiga.

Salió del Gran Comedor, sin rumbo alguno. Les había mentido a sus amigos ya que su destino no era precisamente la enfermería.

Unos ojos grises la siguieron hasta verla salir del Gran Comedor.

Llegó hasta la torre de Astronomía, era un lugar calmo y sereno. Se sentó sobre las escaleras que daban de lleno con la parte superior de la torre.

Las lágrimas descendieron, no podía creer que recordaría al chico pelirrojo de esa forma. Al cabo de un rato  limpiaba cada lagrima derramada, su corazón le dolía. Admitió que le gustaba Ronald Weasley.

Unos pasos detrás suyo la alarmaron.

—Sabía que te encontraría aqui—
dijo el rubio acercándose a ella.  La castaña reconoció la voz de Malfoy.

—Si vienes a molestar, te puedes ir por donde viniste— con algunas lágrimas le advirtió. Draco se exalto.
Él no quería molestarla, no le apetecía ya hacerlo, la ama pero se sorprendió al verla salir del gran Comedor con su semblante triste.

—No te vengo a molestar, si eso es lo que piensas. Ya te declare mis sentimientos por ti. ¡Me preocupo por vos!— convenció en tono calmado y tratando de abrazarla.

Hermione lo miro y notó en sus ojos sinceridad, se preguntaba a si misma si el realmente había cambiado.

—No…no..me.. mires… asi—tartamudeaba y rompió a llorar.
—Me veo patética, por favor dejame sola.
Draco hizo caso omiso a sus palabras y se acercó más a ella, le tomo del mentón y la obligó a que lo mirará.

—¡Mírame!— ordenó. —Si estas mal por esa comadreja, me tienes a mí. ¡Yo te protegeré!— limpió las lágrimas de la castaña y acercando sus labios a los de ella, la beso con ternura y compasión.  Ambos se fundieron en un beso con una pizca de ternura por parte de él y con tristeza del lado contrario.

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Buenas noches!! Otra actualización esta disponible.

Espero que disfruten la historia y saludos queridos lectores 😘

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