Capítulo 21: Las vacaciones con problemas

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Los personajes pertenecen a nuestra amada escritora JK Rowling, la trama es de mi propiedad.

♧♧

—¿Draco que ha pasado amigo?—
El moreno se sentó en la cama del rubio en espera de una respuesta.

Draco trago saliva y desganado decidió contarle a su amigo.

—Me han descubierto.

—No entiendo, ¡explícate!—
El moreno sonaba extrañado.

—Te creía más inteligente.

Blaise rió sarcástico y lo miro en espera de su respuesta.

—Esta bien, te dire. Vi salir a  Hermione del baile, así que la seguí y la encontré sollozando.  Por esa comadreja, puedes creer. Sabes que estoy enamorado de ella y no podía reprimir mas este sentimiento. Luego de eso, tratábamos de vernos a escondidas en los momentos más inoportunos. La vi allí tan débil y tan hermosa, me senté  a su lado y la abracé, ella lo recibió gustosa y los besos se hicieron presentes, un calor nos invadió y no te contaré que paso después porque lo sabes.
El moreno escuchaba atento y se reía por las últimas palabras del rubio.

—Y dime ¿lo hicieron al final?

—No te contaré eso y déjame continuar ya— el moreno se rio y asintió. —Al poco tiempo ya cuando terminamos de hacer eso lo ya sabes. Ella se durmió en mi hombro y mi corazón latía tan fuerte como aquel día. Todo era tan especial hasta que San Potter apareció y nos descubrió abrazados.

—¡¡¿Qué?!! ¿Te peleaste con él o qué?— interrumpió el moreno.

—Pues algo así. Con Hermione nos quedamos totalmente petrificados, sinceramente no sabíamos que hacer. Discutimos claro, pero eso no es todo. Él ya nos había visto anteriormente en unos de los pasillos basándonos. Sinceramente estaba muy enojado Potter, Hermione estaba aún estupefacta. La trató muy mal y casi tengo un duelo con él.

—¡Oh por Merlín!
Sonaba sorprendido Blaise.

—Lo que más me preocupa es que no sé como esta y no sé cuando podré verla nuevamente.
Draco se mostró triste.

—Amigo, sí que estás en un grave problema, ¿solo lo sabe Potter o ya lo sabe alguien más?

—Potter y de seguro que ha ido corriendo a contarle a esos estúpidos de Gryffindor.

—Alguna solución debes buscar Draco, animo amigo— dijo el moreno y lo abrazó. Draco no era de demostrar sus emociones y sentimiemtos pero correspondió el abrazo de su amigo.

Draco se quedó pensado en como haría para poder ver a Hermione.  Debería buscar alguna solución, se sentía destruido. La marca empezó  a arderle y le recordó la misión del Señor Tenebroso.  A si mismo,  recordó que en las vacaciones, la Mansión Malfoy será invadida por mortifagos nuevamente. Estaba entre la espada y la pared, entre el amor y la lealtad.

El expreso de Hogwarts estaba partiendo de Hogsmade hasta King's Cross, muchos alumnos estaban bastantes ruidosos por las vacaciones. 
Draco estaba sentado junto a Blaise con su semblante preocupado, necesitaba ver a  la castaña. A su vez, Hermione estaba con Harry, Ginny y un Ron un tanto enojado con su amiga por haberlos traicionado con Malfoy.
El silencio reinaba en ambos compartimientos.

Llegaron hasta la estación y los almnos bajaban emocionados caminando y corriendo a la búsqueda de sus familias.

—Hermione ¿a dónde iras de vacaciones?— preguntó la pelirroja.

—Creo que ire a Francia o tal vez a la montaña a esquiar, aun no lo sé— respondió con su tono un poco triste.

—Eso es genial Hermione. Espero que tengas una feliz navidad y disfrutes mucho de tus vacaciones, te extrañaremos en la Madriguera. No te desanimes.

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